Vitoria quiere una contrata de limpieza para diez años y sube el canon a las empresas a 35,5 millones anuales

El Ayuntamiento de Vitoria ha aprobado el expediente de contratación del servicio de limpieza pública, recogida y transporte de residuos urbanos, la mayor contrata de la ciudad y no exenta de polémica en el pasado. Los pliegos contemplan la renovación total de la maquinaria, por ejemplo. La adjudicación se hará para diez años y con un valor de 35,5 millones anuales.
La alcaldesa, Maider Etxebarria, y el concejal de Gestión Ambiental, Pascual Borja, han especificado esta semana que el nuevo contrato implica un incremento de 10 millones de euros en la partida anual para la prestación del servicio. Actualmente, la UTE de Prezero (Cespa) y Onaindia gestiona el servicio. Antes lo hacían FCC y GMSM (Viuda de Sainz). Según Etxebarria, el pliego “responde a las necesidades que en materia de limpieza presenta Vitoria y a lo que la ciudadanía ha venido trasladando”. “Queremos que marque un antes y un después en un servicio público fundamental”, ha señalado, informa Europa Press.
En este sentido, ha remarcado “el gran esfuerzo económico que supone para las arcas municipales” abordar un contrato que, por primera vez, contempla un período de ejecución de diez años, para “poder amortizar la inversión que realiza en maquinaria”. Por su parte, Borja ha comentado que el documento está orientado a lograr el cumplimento de la ley de residuos de 2022, que establece que “para 2035 el porcentaje de residuos municipales recogidos separadamente será como mínimo del 50% en peso del total de residuos municipales generados”.
Con el nuevo contrato se va a renovar el 100% de la maquinaria actual y que, por los años de servicio, se encuentra al final de su vida útil, se ha dicho. Esta sustitución de barredoras, camiones y otro tipo de vehículos se irá haciendo de una manera progresiva, en dos fases. Se da la circunstancia de que la flota de la limpieza ha sido polémica muy recientemente por el estado en que FCC y GMSM dejaron el material rodante a Prezero y Onaindia. La ciudad ha tenido que poner 0,6 millones para cubrir esos arreglos.
“La maquinaria pesada ha de ser obligatoriamente de gas natural, contemplándose también la incorporación de vehículos eléctricos como factor de puntuación adicional”, ha especificado Borja. “Por el tiempo transcurrido desde la anterior licitación y por los avances tecnológicos será, además, mucho más eficiente, sostenible y silenciosa a la hora de llevar a cabo sus recorridos”, ha añadido. Asimismo, incorpora como nuevo servicio el fregado de pavimento con la utilización de unas máquinas específicas para extraer la suciedad del pavimento y lograr así que aceras, baldosas, plazas, paseos y calles de peatones y con actividades que manchan el pavimento recuperen su estado más pulcro, dentro de “un tratamiento que supone un incremento de la calidad final de la limpieza”.
Al respecto, los equipos de la contrata llevarán a cabo, como mínimo una vez al año, una limpieza intensiva en los barrios. En las jornadas previas se avisará a vecinos, se señalizarán las calles para el retirado de vehículos y obstáculos durante estos trabajos. Estos equipos se centrarán en la limpieza de calzadas, aceras, sumideros, papeleras y eliminación de pintadas con maquinaria para barridos motorizados, máquinas de baldeo o de limpieza con agua a presión, entre otros.
El pliego establece la instalación de 500 papeleras selectivas durante la vigencia del contrato, además de arreglar, pintar o sustituir las más deterioradas, que se encuentran en el Casco Medieval. En el capítulo de limpieza se contempla, además, un refuerzo de la campaña otoñal para la recogida y retirada de la hoja de la vía pública con la incorporación de una máquina retroexcavadora destinada a ese fin en el trabajo de los equipos. También se va a llevar una especial vigilancia para la retirada de la vegetación espontánea que surge en las zonas pavimentadas. “Los equipos de barrido manual controlarán que en sus zonas de actuación no se desarrolle esta vegetación adventicia y deberán eliminar, por medios mecánicos, manuales o térmicos, cualquier atisbo de la que pueda surgir”, ha explicado Borja.
Respecto a la recogida de residuos, los contenedores actuales se irán sustituyendo progresivamente, a medida que termine su vida útil, por unos nuevos recipientes de hierro. Todos ellos serán de acero galvanizado, con un grosor mínimo de 1,5 milímetros, serán accesibles para toda la población y tendrán una capacidad superior a los actuales, que será entre los 3.000 y 3.200 litros. El concejal de Gestión Ambiental ha valorado que, con “este cambio de material se hace frente a actos de vandalismo como los incendio sufridos en este inicio de año”. Por otro lado, ha comentado que “su mayor peso evitará que, en jornadas de fuerte viento, se desplacen de sus ubicaciones en la vía pública y generen molestias a peatones o vehículos”.
Otra de las novedades del nuevo contrato es que se implantará un sistema de recogida diaria puerta a puerta de las cinco fracciones de residuos para los negocios y establecimientos ubicados en la zona Centro, El Ensanche y el Casco Medieval. “De esta manera cada establecimiento ya no sacará sus restos a la calle y deberán guardarlos en el interior en bolsas o en pequeños contenedores que se les entregue para ello. Se dispondrán los horarios de recogida y se les comunicará para que conozcan los días y horas en los que se procederá a la retirada”, ha explicado Borja.
Además, se distribuirán módulos fijos de recogida selectiva de todas las fracciones como sustitución del actual sistema 'quita y pon' de contenedores en algunas zonas del centro. Serán unos módulos bien integrados en el paisaje urbano con las bocas de color fácilmente reconocibles para depositar papel, envases, fracción, resto u orgánica. El Punto Verde Móvil dará paso a otro sistema con la colocación de 20 puntos fijos para el reciclaje de aceite de cocina, pilas, radiografías y residuos electrónicos, entre otros materiales. “Se van a distribuir por diferentes espacios y barrios de la ciudad, para que se conviertan en pequeños 'Garbigunes', mucho más cercanos a la ciudadanía y no tener así que estar pendientes de la visita a nuestro barrio del Punto Verde Móvil, como hasta ahora”, ha incidido.
Por otro lado y para el tercer año de vigencia del contrato, se ha fijado el cierre del contenedor de fracción resto. Esta medida es una decisión que puede variar si, “con la colaboración de la ciudadanía y su contribución a mejorar los índices del reciclaje, se alcanzan los datos del 50% que nos exige Europa”. Al margen de los detalles sobre los servicios a prestar por la empresa adjudicataria, el documento incluye también mejoras tanto para el personal de la futura nueva contrata, como en las instalaciones de Aguirrelanda. Así, se van a mejorar y arreglar los vestuarios, se arreglará también la gasinera para los vehículos y se instalarán paneles fotovoltaicos para generar energía renovable.
Tras la aprobación en la junta de Gobierno local este lunes, se publicará el anuncio de licitación y se abrirá un plazo de dos meses para la presentación de ofertas, hasta el próximo 15 de junio. A partir de esa fecha, comenzará el estudio y evaluación de las posibles plicas recibidas, con la intención de ir superando las fases de proceso y alcanzar el 1 de enero de 2026 como fecha de inicio para la prestación del servicio por parte de la nueva contrata de limpieza de Vitoria hasta el año 2036.
0