PP y Vox fuerzan una auditoría en el Tribunal de Cuentas de la devolución al PNV de su palacio histórico de París

La comisión mixta de control del Tribunal de Cuentas del Congreso y del Senado, reunida en la Cámara alta de las Cortes Generales, ha mandatado este martes al órgano auditor que fiscalice la largamente esperada recuperación por parte del PNV del palacio ubicado en el 11 de la avenida Marceau de París, El partido lo adquirói mediante testaferros y con un coste de 65.000 euros durante el inicio de la Guerra Civil y unos años después, siendo ya sede del primero Gobierno autonómico vasco en el exilio, le fue arrebatado por la Gestapo nazi en la Francia colaboracionista, que acabó poniéndolo en manos de la España franquista. La restitución se produjo este mismo año fruto de una disposición específica en un decreto que el Congreso convalidó y después de que un informe historiográfico adelantado por este periódico reconstruyera el proceso de compra de un edificio que ahora es utilizado para el Instituto Cervantes, un organismo estatal que al menos hasta 2030 abonará al PNV una “renta de mercado” para continuar allí.
La iniciativa de realizar una auditoría ha partido del PP, que ha contado con el apoyo entusiasta de Vox. Ambos partidos gozan de mayoría en la comisión del Tribunal de Cuentas, con 20 de 38 integrantes. El PNV, que ha defendido que la solicitud se fundamenta en “inexactitudes y falsedades”, ha contado con el respaldo de PSOE, Sumar e incluso de EH Bildu. Se da la circunstancia de que la iniciativa aprobada alude a la “restitución” del inmueble de París, una palabra que implica lingüísticamente la devolución a alguien de algo que ya era suyo. Y también se da otra circunstancia: pese a la durísima campaña contra la operación, el PP terminó votando a favor del decreto que incluía esta devolución dentro de un listado más amplio de medidas.
La portavoz 'popular', María Pilar Alía, ha explicado que su iniciativa era “urgente” por la gravedad del asunto. Sin embargo, fue registrada en enero y ha acabado debatida cuatro meses después. Entrando ya al fondo del asunto, ha hablado de opacidad del Gobierno de Pedro Sánchez con esta operación, que ha sido “un regalo” a un socio “valorado en 17 millones de euros” a cambio de su apoyo político. “Los españoles tenemos que conocer por qué el Gobierno regala al PNV el inmueble”, ha añadido. Además, quiere que la auditoría analice la posible “financiación irregular” del PNV y la renta que percibirá en concepto de alquiler por parte del Instituto Cervantes. Alía ha insistido en que no está acreditado “cómo” y “por cuánto” adquirió el PNV el palacete de Marceau, orillando la existencia de los informes historiográficos. “Este inmueble es de los españoles”, ha remachado la parlamentaria del PP.
Desde la bancada del PNV, María Dolores Etxano ha interpretado que el PP no busca “ni transparencia ni rendición de cuentas” sino usar el Tribunal de Cuentas para intentar una victoria política. Sin tener tiempo para completar su discurso, ha explicado el recorrido histórico del edificio y ha recordado que el suyo fue un partido “represaliado” durante la dictadura. También ha tomado la palabra Uxue Barkos, expresidenta de Navarra e histórica referencia de la coalición Geroa Bai, que integra al PNV y Socialverdes, el grupo político que fundó. Sin embargo, lo ha hecho en nombre de “Sumar”. Barkos, senadora, no comparte grupo con el PNV y sí con otras formaciones de izquierdas. Con todo, Barkos ha defendido el derecho de este partido a ser titular del palacio de Marceau y ha recordado la doble vara de medir del PP porque “cuando el zapato de la mayoría en el Congreso les ha apretado” a los presidentes José María Aznar y Mariano Rajoy llegaron a ofrecer al PNV la restitución de Marceau. Ha sido ella la que, precisamente, ha recordado el significado de “restituir” en el diccionario.
Por ello, al finalizar su alocución, Juan José Aizkorbe de Vox se ha apresurado a recalcar que lo que está sobre la mesa “no es una restitución sino una apropiación”. Él ha elevado a “25 millones de euros” el regalo, ya que suma otras compensaciones por otros bienes del PNV en Francia que iban en el mismo paquete que el palacio de París. “¿Dar licitud a un regalo de millones no es financiación irregular?”, se ha preguntado el representante de la ultraderecha.
Los portavoces de PSOE y EH Bildu han apoyado al PNV. Los socialistas han reprochado al PP que quisieran ofrecer al PNV el Ministerio de Industria para que les apoyara mientras critican a su partido por los acuerdos que alcanza con las fuerzas nacionalistas. Josu Estarrona, de la coalición abertzale, ha hecho un largo recorrido por las incautaciones que sufrieron los partidos perdedores de la Guerra Civil y ha recordado el simbolismo del edificio de Marceau por haber acogido al primer Gobierno de lo que entonces se llamaba Euzkadi. Era un gabinete plural en el que había otros partidos como el PCE, el PSOE, ANV o fuerzas republicanas. Ha tenido un recuerdo para Alfredo Espinosa, republicano y único consejero fusilado. Ha señalado que a sus herederos les llegaron a reclamar “20 millones de pesetas” por responsabilidades económicas después de la ejecución.
Las fuentes consultadas señalan que el mandato de la comisión mixta es de obligado cumplimiento para el Tribunal de Cuentas. A diferencia de los organismos equivalentes de las comunidades, este tribunal no solamente audita sino que puede iniciar un procedimiento judicial si detecta irregalidades. Es también el organismos encargada de revisar las contabilidades de los partidos políticos.
1