Díaz presenta en el Parlamento su declaración de renta de 2012, donde declara 59.894 euros

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha presentado este miércoles en el Registro del Parlamento su declaración de la renta correspondiente al ejercicio de 2012 y la de su marido, así como la declaración de bienes.

En una declaración individual, Díaz declara 59.894,44 euros en la casilla de 'total de ingresos íntegros computables', mientras que su marido, José María Moriche, declara 15.171,55 euros como ingresos íntegros computables. Ambas declaraciones se pueden consultar en la página web de la Junta de Andalucía.

A la presidenta le sale a pagar a Hacienda 1.423,15 euros, mientras que a su marido se le devuelven 550,22 euros.

En cuanto a la declaración de bienes también presentada este miércoles por la presidenta, todo lo que se refleja en ella es al 50 por ciento con su marido, como su vivienda habitual en Sevilla, con un valor catastral de 14.217,78 euros y un solar anexo sin edificar, por 5.274,99 euros.

En la declaración se refleja un saldo total en cuentas bancarias por 2.580 euros y una cantidad de 14.400 a plazo fijo, ambas al 50 por ciento. También aparece un seguro de vida cuya indemnización asciende a 350.000 euros. La presidenta declara también tres vehículos y dos créditos bancarios.

Tras hacer entrega de las declaraciones, Susana Díaz ha intervenido ante la reunión del grupo parlamentario socialista en la Cámara andaluza, en la que ha pedido a los diputados del PSOE-A que hagan también el “sobreesfuerzo” de transparencia que ella ha llevado a cabo, si se quiere recuperar la confianza de los ciudadanos en la política y “vuelvan a creer en nosotros”.

Ha indicado que el lunes, sus consejeros presentarán sus declaraciones de la renta y las de sus cónyuge. Ha indicado que los socialistas tienen la “obligación, la responsabilidad y oportunidad” de recuperar la confianza de los andaluces en sus dirigentes políticos.

En su opinión, la política está muy desprestigiada y los ciudadanos “nos ven mal” y, ante eso, solo hay una fórmula posible: la utilidad y la transparencia. Es fundamental, según ha señalado, que los ciudadanos vean que la política es útil para mejorar sus condiciones de vida y que tengan confianza.