Las posturas se enconan y la investidura se aleja: no para la segunda votación

Tiras y aflojas y, sobre todo, más incertidumbre. Tras el debate parlamentario a la Presidencia de la Junta de Andalucía todo apunta a que la hora de la investidura se aleja un poco más. Este miércoles el campo de las negociaciones se ha pintado como sigue: todos hablan de que el diálogo no termina pero la relación de Podemos y Ciudadanos con el PSOE parece rota, mientras los socialistas han dado un pequeño gesto al PP con una puerta entreabierta en forma de intercambio de documentos. Oficialmente, el PSOE andaluz mantiene que nada ha cambiado y todas las vías de diálogo siguen abiertas con todos para cerrar acuerdos antes de la segunda votación de este viernes. Extraoficialmente, se da por perdida la segunda votación y ya se trabaja a futuro.

La tensión vivida en el Parlamento durante la jornada del martes se ha traducido en una cadena de acontecimientos que han tensado las cuerdas. Podemos ha considerado un importante paso atrás en el proceso negociador la filtración a la prensa de un informe jurídico que ponía en duda la posibilidad de retirar las cuentas de los bancos que desahucien. Según el informe elaborado por la Consejería de Hacienda y Administración Pública, retirar las cuentas podría infringir los principios de libertad de acceso a las licitaciones, publicidad y transparencia de los procedimientos y no discriminación e igualdad de trato entre los candidatos. Los letrados de la Junta acuden a la Ley de Contratos del sector público y al código de buenas prácticas para llegar a esta conclusión. El objetivo del informe es rebatir la propuesta de desvincular a la Administración de las entidades bancarias que realicen desahucios de primera vivienda sin ofrecer alternativas. Esta medida junto a la reducción drástica del número de cargos políticos en la administración andaluza son, de nuevo, las exigencias de los de Teresa Rodríguez para abstenerse en la votación de este viernes.

“Un portazo de extrema cobardía”

“La filtración de este documento es un portazo a la negociación de una extrema cobardía por parte del PSOE”, aseguró Sergio Pascual, secretario de organización de Podemos y una de las partes en la negociación. Pascual ha afirmado que los socialistas “han mandado un mensaje clarísimo de no a las propuestas de Podemos, aunque prefieran no decírselo claramente a todos los andaluces”.

Podemos afirma que recibió el informe en la reunión celebrada el pasado sábado, les llegó sin fechar y sin firma. La organización califica sus conclusiones como débiles y claramente rebatibles jurídicamente. “Las cuentas corrientes de la Junta no se abren según el procedimiento de la Ley de Contratación”, dicen. La base jurídica de su respuesta la encuentran en el Manual de Procedimientos de la Tesorería General de la Junta, la Ley General de la Hacienda Pública andaluza y el Reglamento General de Tesorería. Además, la formación denuncia que los socialistas hayan utilizado los Servicios Jurídicos de la Junta de Andalucía para elaborar la documentación, “en una nueva muestra de que utilizan la administración al servicio del partido”.

Con la información recibida, y a solo unos días de la segunda votación en la Cámara andaluza, desde Podemos prefieren no dar las negociaciones por rotas pero ven ya casi imposible llegar al acuerdo de la abstención. “Nosotros nos mantenemos abiertos al diálogo para mejorar la vida de los andaluces y que haya gobierno cuanto antes, pero el PSOE debe mostrar una voluntad clara de cambio”, afirmó Sergio Pascual.

Oscilaciones

Tampoco parece viable el acuerdo con Ciudadanos. De un lado, la entrada en escena de Albert Rivera que insiste a los socialistas en que tienen que poner fecha a la salida de Manuel Chaves del Congreso. Del otro, el PSOE que señala que el anunciado pacto anticorrupción no se firmará hasta que Susana Díaz sea investida presidenta.

Por un lado, la oscilante postura de los naranjas entre la conciliación de Marín y las exigencias de Rivera han calentado los ánimos y han alejado a las dos formaciones. Por otro, la decepción de los naranjas con la actitud del PSOE cuando explican que el documento para combatir la corrupción no se corresponde con lo acordado. En concreto, señalan que los socialistas se han echado atrás a la hora de acordar la responsabilidad civil subsidiaria de los partidos en casos de condena por corrupción, pese a que la Díaz lo mencionó en sede parlamentaria. Ciudadanos descarta nuevas reuniones en los próximos días y, por tanto, mantienen el voto negativo a Susana Díaz para este viernes. Sin embargo, fuentes socialistas afirman que el diálogo con el partido de Albert Rivera es fluido y constante.

La ventana

Y cuando unas puertas parecen cerrarse, alguna ventana aparenta abrirse. PSOE y PP iniciaron este miércoles, seis semanas después de las elecciones, el proceso de negociación en torno a la investidura con una reunión entre Mario Jiménez (PSOE) y Carlos Rojas (PP). Fue un encuentro rápido, cerrado la noche del martes tras la votación del pleno en las que se enfriaron de forma clara las opciones del PSOE para ocupar la Presidencia de la Junta este mismo viernes gracias a la abstención de Podemos y Ciudadanos. El discurso oficial por ambas partes es que hay una clara disposición al diálogo. Pero será un proceso lento, puntualizan fuentes populares, no hay tiempo para cambiar las posturas de aquí a la votación del viernes. Con lo que se refuerza la teoría de que, desde el principio, lo populares iba a esperar más allá de las municipales. Los socialistas estudian ahora el documento con las 146 propuestas que presentó Juan Manuel Moreno Bonilla en la sesión de investidura.

Cuánto hay de verdadero desencuentro, y cuánto de dramatización política e intereses partidistas, se irá dejando entrever a lo largo de estas nuevas semanas que traen consigo ya la campaña electoral municipal.