La rebaja fiscal prometida por Susana Díaz despeja el camino para que C's respalde las cuentas de 2016
La reunión de la comisión de seguimiento del pacto de investidura entre el PSOE-A y C's ha concluido este lunes con un compromiso del Gobierno de Andalucía de incluir una rebaja de dos puntos en el tramo autonómico del IRPF en los presupuestos autonómicos de 2016 para contribuyentes que ingresen menos de 60.000 euros brutos por año. Una decisión que la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, anunciaba a primera hora en una entrevista, y que C's ha interpretado como un triunfo propio que, a falta de concretar otros puntos, despeja el camino para que den su voto a las cuentas, clave para un PSOE-A en minoría y con los otros tres grupos (PP-A, Podemos e IU) en pie de guerra.
En este sentido, pese a que la consejera de Hacienda y Administración Públicas, María Jesús Montero, mantuvo hace un par de semanas reuniones con todos los grupos para buscar su respaldo en la metodología de la regla de gasto de cara a las cuentas, ésta es la primera vez en que se pone a hablar de condiciones más concretas para los presupuestos autonómicos y ha empezado con C's, partido con el que tiene más fácil el consenso. La propia consejera ha estado en la reunión de este lunes para explicar el compromiso a C's.
El tono de esta formación la última semana -incluido un órdago de su líder, Juan Marín, avisando de que “nadie” llamara a sus “puertas” para negociar si no se contemplaba la rebaja fiscal- hacía prever que el anuncio estaba cerca y la intención de C's era no desperdiciar la ocasión de reivindicar su papel en la consecución de este objetivo.
Juan Marín ha subrayado tras el encuentro que “esto no significa que esté cerrado ya el respaldo” de su grupo a los presupuestos autonómicos, “porque no es suficiente”, pero sí ha reconocido que se va por el buen camino “porque ya hemos empezado a hablar”. Ha expuesto que, “de momento”, el resultado de la reunión, es que el Gobierno de Andalucía “estaría dispuesto a aceptar una bajada de dos puntos” del tramo autonómico, y ha repetido varias veces que es “por imposición del pacto de investidura”, empeñado en resaltarlo como una victoria de C's, cosa importante en vísperas de las elecciones generales, si bien lo ha desvinculado de este contexto.
La consejera les ha transmitido, según ha dicho, que esta rebaja fiscal supondrá una reducción de 120 millones de euros en los ingresos del próximo ejercicio, que ya está en condiciones de poder garantizar que se puede asumir. Cabe recordar que hasta la fecha el Gobierno de Andalucía no había descartado que fuera posible una rebaja fiscal, si bien había insistido en que era un compromiso para la legislatura y que dependería de que se pudiera hacer sin mermar el gasto en los servicios públicos.
Los cálculos del líder de C's son que esta rebaja fiscal supondrían una inyección en el consumo de entre 3.500 y 4.000 millones de euros, cifra que reduce notablemente el PSOE-A, que como mucho prevé unos 1.500, sin que nadie explique muy bien de dónde sale la cifra. Juan Marín lo ha interpretado como “un cambio en el posicionamiento” del Gobierno de Andalucía y ha destacado que C's ha mantenido desde el principio que ésta era una línea roja de su grupo porque es una medida “importante para aliviar los bolsillos de los ciudadanos, y no un capricho”. Ha remarcado que “C's no va a proponer nada que no sea asumible”.
En la misma línea, ha repetido que se trata de una “rectificación importante” del Gobierno de Andalucía y, de hecho, iba “excéptico” a la reunión, “que no la tenía ni programada”, por lo que lo ha recibido como una “sorpresa”. Eso sí, ha recordado que tienen otras dos líneas rojas, para dar el sí a los presupuestos autonómicos, que son un plan especial para los autónomos y un “esfuerzo concreto” con la ley de la dependencia, “que se vea reflejado en las cuentas con alguna medida”.
Otras cuestiones sobre las que quiere negociar C's son la reducción de los entes instrumentales, si bien la Junta de Andalucía ya trabaja en esto, o del consejo de administración de la RTVA, que también está en la agenda del PSOE-A, por lo que es más fácil que lleguen a puntos de encuentro y no necesariamente que esté vinculado a un plazo tan concreto.
Poco dinero pero gran esfuerzo
No es que lo vayan a notar mucho las familias, porque según los tramos, en realidad sólo supondrá entre 82 y 138 euros menos por ejercicio, pero sí va a beneficiar a un 90% de los contribuyentes, que son los casi tres millones de andaluces que ingresan menos de 60.000 euros brutos por año. Pero sí supondrá un “importante esfuerzo” para el Gobierno de Andalucía en la elaboración de las cuentas, tal y como ha explicado la consejera de Hacienda y Administración Pública. Ha expuesto que se trata de “homogeneizar” los tramos autonómicos con los estatales. En concreto, se establecen cuatro tramos que sí tendrán rebaja fiscal y dos por encima de los 60.000 euros que no experimentarán la reducción.
La consejera ha comparecido poco después junto con el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, miembro del comité de enlace, para explicar el anuncio. Juan Cornejo ha recalcado que “se va por buen camino” para la elaboración del proyecto y muestra de que la presidenta “cumple con sus compromisos”.
En cuanto a qué ha cambiado para que en pocos días se haya pasado de insistir en que la rebaja fiscal era “para la legislatura” a aplicarla ya el primer año de los primeros presupuestos autonómicos de la misma, la consejera ha puntualizado que el compromiso estaba ahí y se ha podido hacer cuando se han calculado los ingresos “blindando los servicios públicos”. Ha negado que se haya cambiado de estrategia por el hecho de que el PSOE-A se vea más forzado a dialogar, especialmente después de que la abstención de C's y el voto en contra del resto de la oposición tumbara el decreto ley de la función pública que precisamente salió de su departamento. “El diálogo siempre ha estado presente”, ha apostillado.
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