Profesionales sanitarios forman una asociación regional para detener el “uso abusivo” de contratos eventuales
“Nosotros, señora consejera, le informamos de algo más. De algo que no sabe. Que sólo nosotros vivimos día a día. De los pacientes. De la calidad asistencial que reciben. Cada día les atiende un profesional sanitario diferente. Cada día, la calidad asistencial del Sistema Andaluz de Salud se merma de una manera inasumible. Inasumible para los pacientes e inasumible para un personal con una formación que roza la excelencia y que ven sus fuerzas, ganas y motivación aplacadas”.
Es la carta de presentación de la Asociación de Eventuales del Servicio Andaluz de Salud (SAS), constituida el pasado 10 de enero y compuesta por profesionales sanitarios de todos los estamentos con contratos eventuales (y sus múltiples variantes: eventuales al 75%, 50%, 33%, 'contratos búho'…). Miran por regular su situación, por una mejora en sus tipos de contrato, pero también en la calidad del servicio que prestan dentro de la sanidad pública. Y le han hecho llegar sus reivindicaciones a la consejera en una misiva. El que previsiblemente sea el nuevo gerente del SAS, José Manuel Aranda, tendrá otra tarea sobre la mesa.
Son “eventuales de muy larga duración”. “He encadenado 30 contratos en nueve años”, dice una de sus portavoces. No son personal estatutario, sino laboral. Una sentencia del pasado diciembre dictada por el Juzgado de lo Social número 3 de Cádiz, después de varios intentos de médicos demandando al SAS por su tipo de contratación, les ha hecho ver algo de luz y organizarse para poner fin a su “situación limbo”. El fallo aún no es firme pero obliga al SAS a declarar como personal laboral indefinido a dos médicos eventuales que habían acumulado durante más de los 18 meses legales (de hecho, 8 y 14 años) contratos consecutivos. Consideran que la interposición de la demanda por la vía social pudiera ser “la piedra angular para un cambio de rumbo” en el tratamiento del conflicto. El objetivo es presentar una demanda colectiva por esta jurisdicción.
Van más allá. “No sólo es ilógico en términos de sentido común que un trabajador esté firmando contratos cortos y sucesivos durante años en una misma empresa, sino que se trata probablemente de una actuación fraudulenta”, argumentan desde el blog sus asesores jurídicos. No saben cuántos son pero sí que en muchos centros sanitarios, algunos tan relevantes como el Hospital de Valme (Sevilla), “hay más médicos eventuales que fijos”. El Hospital Virgen Macarena, junto al Virgen del Rocío, también de Sevilla, ocupan el dudoso honor de estar en el podio nacional de hospitales con más reclamaciones por parte de los pacientes que han hecho uso de sus servicios de Urgencias, según la Memoria 2013 de la Asociación del Defensor del Paciente. El Macarena acaba de poner en marcha un nuevo circuito asistencial para reordenar el área de Urgencias.
Los médicos eventuales denuncian especialmente algunos tipos de contratos del SAS como los denominados 'buho', realizados durante la noche para cubrir las guardias de 24 horas en atención especializada hospitalaria. Siempre con “la disminución de contrataciones, la sobrecarga de trabajo y la precariedad laboral” de fondo. Su intención es que se aplique el Estatuto de los Trabajadores, que señala que los contratos eventuales no se pueden prorrogar más de año y medio, tratando también de defender la equiparación en cuanto a derechos y obligaciones del personal estatutario tanto fijo como temporal.
“Lo que es cierto es que no se puede abusar de este sistema de contratación y menos sin tener en cuenta las peculiaridades de cada actividad y a las características del puesto de trabajo, siendo clamoroso como en el SAS se debe prevenir la utilización abusiva de contratos de duración determinada con distintos trabajadores para desempeñar el mismo puesto de trabajo cubierto anteriormente con contratos de ese carácter, con o sin solución de continuidad”, señalan.
Los objetivos marcados por la asociación son principalmente la asesoría jurídica de sus socios en lo referente a dudas y conflictos tanto individuales como colectivos, y la puesta en marcha de un proyecto de demanda al SAS contra el actual sistema de contratación de la Administración y solicitando la modificación de la situación de los eventuales de más de 18 meses de antigüedad. Han nacido, dicen, por la necesidad de unificar esfuerzos y centralizar los disgregados métodos de protesta por “la pésima situación laboral de un grupo muy numeroso de sanitarios”. Estos son sus estatutos.