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La esperpéntica historia de Cardeña y su alcaldesa “por sorpresa”

Trinidad Moreno, alcaldesa de Cardeña

Juan Javier Ríos

Córdoba —

La dirección provincial del PSOE cordobés ha expulsado a los cuatro concejales socialistas insumisos que tenía en la corporación municipal de Cardeña, población de 1.700 habitantes situada al norte de Córdoba. La notificación les ha llegado ahora pero su resolución, según indican desde el propio partido, se produjo bastante antes. El resultado: un PSOE sin representación en un municipio con claro respaldo a la izquierda; cuatro expulsiones y una agrupación municipal socialista que intenta ahora reconstruirse.

Mientra tanto, la alcaldesa del PP, Trinidad Moreno, (única concejal por este partido) y los cuatro concejales –ahora no adscritos- pero con sentimiento socialista, como así indica Mario Torralbo, llevan el timón de un pueblo bajo un mandato que ya alcanza su ecuador.

Torralbo es el primer teniente de alcalde y, según ha mantenido, la agrupación provincial “le ha estado dando vueltas a la pelota” hasta que les han notificado la expulsión. “Es algo que nos duele” y “no entendemos por qué se tienen que extrapolar a un pueblo las relaciones que hay entre partidos a otros niveles”, asegura, mientras deja entrever las malas relaciones a nivel local entre IU y PSOE en Cardeña.

Desde el PSOE de Córdoba, su secretario de Organización, Antonio Ruiz, dice que “desde un primer momento” se opusieron “a que ese gobierno municipal del PP, con el apoyo de los concejales socialistas, fuese una realidad” porque “el compromiso es trabajar por Cardeña desde la izquierda”.

Por su parte, la concejal de IU, Catalina Barragán, y exalcaldesa del municipio, mantiene que el pueblo ha vivido “un esperpento en toda regla”, con el apoyo del PSOE al PP y con la llegada a la Alcaldía de una “señora” -ya que no la reconocen como alcaldesa- “que vive en Córdoba”, viene “dos días en semana y ejerce un ordeno y mando”.

Distintas ve las cosas la regidora, quien afirma que se ha impuesto un Gobierno que da estabilidad al municipio y “ha tenido que llegar una persona que no es de Cardeña y del PP, para tratar a todos los vecinos por igual”. Para Moreno, las declaraciones de IU son “patéticas” y resalta que, mientras ella ofrece formación a las cardeñeras, Izquierda Unida se limita a “montar meriendas de churros y chocolate en los que critican a la alcaldesa”.

El juego democrático

El juego democráticoPero, ¿cómo se ha llegado a esta situación de rencillas, celos y enfrentamientos que no cesan tras dos años discurridos? Para responder hay que remontarse al 11 de junio de 2011, cuando se celebró el Pleno de elección de alcalde: IU había sido la fuerza más votada con 584 votos y 4 concejales; PSOE 514 votos y otros 4 concejales mientras que el PP había obtenido un único concejal con 133 votos. La votación parecía puro trámite ya que en Cardeña se preveía un nuevo gobierno, en todo caso de izquierdas, como ha venido ocurriendo históricamente. Sin embargo, la sorpresa fue mayúscula cuando, en el recuento de votos, se desveló que los concejales socialistas habían votado a la edil del PP, convirtiéndola en “alcaldesa por sorpresa”, como fue conocida.

Ante la incredulidad de los asistentes, Moreno recogía su bastón de mando con la curiosidad añadida de que ella es cordobesa y no está empadronada en el municipio. Desde IU la criticaban porque, según Catalina Barragán, tuvo “poco más que buscar la localización del municipio en Google Maps”. Lo cierto es que Moreno había sido puesta en su partido para encabezar una lista de la que, por los escrutinios históricos, jamás pensaba que fueran a llegar a la Alcaldía.

La situación inédita hizo verse a Trinidad Moreno con todas las áreas en su poder por lo que pidió un Gobierno de concentración a tres bandas, rechazado por IU. Moreno reformuló su idea de Gobierno y decidió repartir cargos entre el PSOE, entre ellos a Mario Torralbo, quien renunció al poco tiempo presionado por la dirección provincial.

La crispación entre vecinos del municipio se hizo patente y no dudaron en salir a la calle para manifestarse en contra de la alcaldesa, que llegó a denunciar ante la Guardia Civil pintadas en su contra.

La moción

La moción

Con el paso de los meses, PSOE e IU a nivel provincial comenzaron a gestar una moción de censura que echaría del sillón a Trinidad Moreno. Sin embargo, cuando las negociaciones provinciales iban avanzadas, Torralbo volvió a dar la sorpresa y dinamitó la moción de censura, anunciando un pacto con la alcaldesa para ser el primer teniente de alcalde.

Fue en mayo del año pasado, y el detonante para que el PSOE iniciase un expediente de expulsión. La gobernabilidad, tras estos dos años, está asegurada, según asegura este gobierno municipal tan peculiar.

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