Se aceptan mediocres, sí pero con pasta

La capacidad del bufón de palacio para sorprendernos tiende a infinito, a la misma vez que, bajo su gestión, la calidad de la enseñanza pública (a la que yo, por poner un ejemplo, le debo tanto) tiende a cero.

Ahora el iluminado señor Wert pone en duda la capacidad de un alumno para seguir sus estudios universitarios si su media aritmética es inferior al 6,5. Bueno, todavía podríamos discutir sobre el asunto si con ello se persiguiera la excelencia académica de nuestros universitarios y con ello, aumentase el nivel de nuestros titulados y doctores para que se vayan a Alemania o a Estados Unidos mejor formados, toda vez que nadie habla nada de cómo van a recuperar el nivel de I + D que se está perdiendo en España como aquellas lágrimas se perdían en la lluvia.

Pero no. No va de eso la gracia de José Ignacio. Porque esa nota de corte es sólo para aquellos alumnos que no tengan recursos para pagarse los estudios. Los que sí tengan dinero, podrán seguir adelante porque la notita de corte sólo es para conceder becas, no para seguir estudiando.

A ver si me entero, que yo soy sólo doctora en Matemáticas y no ministra: se puede llegar a ser médico o ingeniero civil, por poner un par de ejemplos, con un 5 de media solo si tienes dinero para pagar la matrícula, ¿no? ¿No es esto otra más, y en la frente, a los más desfavorecidos?

Si le parece, señor Ministro, que es necesario tener un 6,5 de media para garantizar el éxito y el provecho de la Universidad de un estudiante, ¿por qué no lo pone de nota de corte para todos?

Si lo que necesitamos es recortar en gastos del Ministerio, ¿por qué no habilita un proceso de anti-becas para los que no sacan un 6'5 y tienen más recursos? Me explico: si un alumno con menos de un 6,5 quiere continuar pero tiene pocos recursos, usted no le dará beca. Bien.

Si un estudiante con menos de un 6,5 quiere continuar y tiene muchos recursos, cosa que ustedes controlan muy bien, salvo errores puntuales, claro, en la escritura de los DNI, ¿por qué no les aumenta el precio de la matrícula?

No olvide que los alumnos universitarios pagan un porcentaje muy bajo del coste total que supone a las arcas del estado su formación: alrededor del 80% lo asume el Estado. Esto significa que como los alumnos con más recursos podrán seguir estudiando sin sus rumbosas becas, el Estado seguirá pagando el 80% correspondiente para ellos, pero dejará de hacerlo para aquellos alumnos que abandonen por falta de beca. Por lo tanto, estaremos destinando más dinero público a las familias con más recursos y esto, señor Ministro, no parece justo, ¿verdad?

Y puestos a ser justos y ya que “estamos por la igualdad de oportunidades” como dice su amigo Floriano, ¿por qué los que tienen mucho no pagan más por su matrícula? ¿Por qué no se ajusta el gasto por universitario a su renta familiar?

Déjeme que le cuente lo que mi pobre mente de hija de la clase media intuye de todo esto: es otro término más en la sucesión bien programada por usted y su Ministerio para atacar de frente a la Enseñanza Pública, para conseguir que sólo las familias con más ingresos accedan a estudios superiores y, con ello, a mejores puestos de trabajo (aunque sea con un 5 raspón). Se ha tomado usted muy en serio la necesidad imperiosa en este país de fontaneros señalada por el señor Toharia...

Eso sí, serán fontaneros muy píos, nada de blasfemar si se les cae el curvatubos en el meñique, que para eso usted y sus amigos, los obispos, van a meterse de lleno en los institutos de nuestros hijos.

Por cierto, hablando de amigos, señor Wert, ¿no se siente terriblemente solo en su cruzada? ¿No percibe que no le queremos? En mi caso, ni como madre de alumnos en primaria y secundaria, ni como hermana de maestros y profesores de primaria y secundaria, ni como profesora de la Universidad. Sí, porque, lo siento por usted, pero yo sí tuve la oportunidad de llegar a Doctora en un sistema razonable de ayudas y en un sistema público de enseñanza.

Sí, señor Ministro, rectifique y revise, porque esto no tiene ni pies ni cabeza, como casi todo lo que sale de su Ministerio.