Los amigos del ganadero asesinado en Teruel: “Que nos digan la verdad”
Dolor, tristeza, indignación, indefensión… Las cuatro palabras han sido repetidamente pronunciadas por los amigos de José Luis Iranzo, el ganadero asesinado el pasado jueves 14 –junto a dos guardias civiles– entre los municipios turolenses de Albalate del Arzobispo y Andorra. El exmilitar serbio Norbert Feher se encuentra en prisión como autor de los hechos. Nueve días antes –el día 5–, el conocido como “Igor el Ruso” ya había herido a otras dos personas en una finca de Andorra.
Al igual que la viuda de Iranzo y el sindicato al que este pertenecía, la Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA), sus amigos también han criticado muy duramente el operativo –o la inexistencia del mismo– que se puso en marcha después del día 5 para interceptar al asesino. También el Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso ha pedido explicaciones y ha solicitado la comparecencia del Secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto.
Aseguran sus más allegados que, “ahora” –han remarcado el adverbio de tiempo–, son conscientes de que desde el día 5 han “estado sometidos a un peligro inimaginable que nadie se ha encargado ni siquiera de mencionarnos”: “¿Cómo podemos estar leyendo ahora que estaba todo controlado, que el operativo era suficiente, si hemos andado por nuestro monte, trabajando, y no hemos visto ningún tipo de despliegue acorde a lo que ahora parece que todas las altas instancias sabían que pasaba?”.
Sobre la mesa han dejado infinidad de preguntas que, esperan, sean contestadas. Si el dispositivo existía, dicen, “¿por qué nadie nos dijo nada? Porque si no lo sabían y no hicieron nada desde el día 5, mal; pero si lo sabían y no dijeron nada, peor”.
Y continúan con los interrogantes: “¿Cómo es posible que hayamos estado nueve días a expensas de un asesino?, ¿cómo pueden permitir que hayamos puesto a nuestros hijos, padres, madres, amigos en un inmenso peligro?”.
Todo hubiera sido distinto fuera del medio rural
Tras lo sucedido el día 5, explican, se han cansado de hablar, en casa, en la calle, en los bares, de que no se trataba de un simple robo: “Dos intentos de asesinato con múltiples disparos de arma corta, denuncias por entradas en masías con el mismo modus operandi… ¿De verdad nos quieren hacer creer que se hubiera actuado de la misma manera, ante las mismas circunstancias, en cualquier otro sitio distinto que no fuera el medio rural?”.
Realmente, señalan, “no sabemos si el asesinato de José Luis, Víctor y Víctor Jesús se hubiera podido evitar… pero en lo más hondo de nuestra alma, nosotros creemos que sí”.
Exigen que las autoridades responsables, “esas altas instancias que se apresuraron a decir que todo se hizo correctamente, a pesar de la muerte de tres personas, den todas las explicaciones de las medidas que se han tomado en estos trágicos nueve días y se depuren las responsabilidades pertinentes por las negligencias que a la vista de todos, creemos que se han cometido. Porque es lo que nos queda a los familiares, amigos y vecinos. Que nos digan la verdad. Nos lo merecemos. Es lo mínimo. No nos queda nada más”.
Por añadidura, quieren dejar claro que no cargan de responsabilidad “a las patrullas de la Guardia Civil de la zona, la Guardia Civil rural o agentes del grupo ROCA, que sin medios y quizás sin apoyo suficiente, han perdido igualmente a dos compañeros en estos tristes sucesos. Creemos que la responsabilidad va mucho más allá, y es lo que queremos que nos expliquen, a nosotros como amigos y a toda la gente que está sintiendo esto como algo suyo, que es muchísima. No nos pueden decir que no tenemos derecho a eso”.