Unos 15.000 temporeros llegan a Aragón para cobrar 5,62 euros a la hora, en el mejor de los casos
Con la campaña agrícola, cuyo primer pico tuvo lugar el pasado mes de junio por la recogida de la cereza, llegan a Aragón entre 13.000 y 15.000 temporeros. Buscan un empleo en el campo aragonés por el que cobrarán, en el mejor de los casos, 6,13 euros brutos (5,62 netos) a la hora. Eso es lo que establecen las tablas salariales para trabajadores temporeros recolectores de fruta en Zaragoza. En el caso de Huesca solo se contempla la figura del peón agrícola, con una remuneración brura de 6,73 euros a la hora; y en Teruel existe el cogedor (5,81 euros/hora) y el cogedor menor de 18 años (4,89 euros).
Pero sigue habiendo casos en los que la legalidad vigente no se cumple. Desde UGT apuntan que es “relativamente habitual” que el empresario pague por debajo de convenio (4 o 5 euros la hora). “Tampoco es inusual”, dicen en el sindicato, que el patrón aproveche que en el régimen agrario se declara a mes vencido, para declarar menos horas de las realmente trabajadas y ahorrarse algo en Seguridad Social.
Lo que sí es mucho menos normal, aunque tampoco han llegado a desaparecer por completo, son los casos de trabajadores sin papeles, o los que, aun teniéndolos, no se les hace contrato. A esto afecta sobremanera el hecho de que el porcentaje de irregulares en Aragón (respecto al número total de extranjeros) haya pasado del 40 % en 2005 al 10 % actual, siempre según cifras de UGT.
Un panorama no demasiado halagüeño que, sin embargo, supone un dibujo de la situación mucho más optimista que años atrás: “Esto antes era la ley de la selva”, dicen. A pesar de esta notoria mejoría, queda mucho camino por andar, como demuestra el hecho de que en UGT vayan “a denuncia por semana”.
Se supone que las condiciones continuarán en franca mejoría, y más después de que el 8 de marzo de 2011, una fecha que será “recordada”, según el sindicato, se comenzara un proceso de integración (que durará unos cuantos años) por el que los trabajadores y trabajadoras por cuenta ajena que estaban inscritos en el REASS terminarán formando parte del Régimen General de la Seguridad Social.
Otro de los principales problemas antaño era el de la vivienda. En UGT señalan que también en esto se ha mejorado, llegando incluso a afirmar que “la vivienda ya no es un problema”. De manera residual, empero, sigue habiendo temporeros “en infraviviendas”.
El perfil del temporero que llega a Aragón
A la comunidad vienen más hombres que mujeres. Son, en su mayoría, europeos del este, norteafricanos y subsaharianos y oscilan entre los 20 y los 45 años. El 65 %, aproximadamente, vive en Aragón todo el año; otro 25 % es itinerante y va siguiendo las campañas agrícolas por varias comunidades autónomas de España, y en torno al 10 % son comunitarios que aterrizan desde otros países. Las cifras, señalan en UGT, se mantienen ligeramente al alza en los últimos años.
Algunos vienen ya con trabajo para toda la campaña, otros solo estarán unas semanas, los hay que cambiarán de jefe unas cuantas veces y también están los que llegan con una mano delante y otra detrás. Son estos últimos los que, por regla general, más opciones tienen de estar en infraviviendas.