Un estudio revela que el transporte en autobús emite 3,5 veces menos C02 que el vehículo privado
UGT Aragón ha desarollado un análisis para el Ayuntamiento de Zaragoza acerca del uso del autobús. El estudio, que lleva por título Los autobuses: transporte colectivo para desplazamientos con menos emisiones, refleja datos tan reveladores como que el transporte en autobús emite 3,5 veces menos CO2 que el que se produce en vehículo privado.
En concreto, el desplazamiento en autobús al centro de trabajo genera 0,4 toneladas de CO2 por trabajador y año; si este se hace en vehículo privado, las emisiones ascienden hasta 1,4 toneladas. Se apunta también en el informe que cada autobús de empresa sustituye, de media, entre 14 y 30 vehículos particulares.
José de las Morenas, secretario de Política Sindical e Industrial de UGT Aragón, fue el encargado de presentar este documento en el que se listan una serie de beneficios anejos al uso del transporte colectivo: reduce el riesgo de accidentes in itinere, el absentismo laboral, la congestión viaria, las emisiones de gases y partículas a la atmósfera y el ruido y se reducen los costes de desplazamiento.
Señala también que hay que realizar un trasvase de usuarios del vehículo privado hacia el autobús en los desplazamientos a los centros de trabajo “con el fin de aumentar la ocupación de los mismos como actuación que a corto plazo reducirá las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI)”.
De igual forma, se apuesta por actuar directamente en los autobuses aumentando su eficiencia energética, sustituyendo los combustibles fósiles por otros con menos intensidad de carbono y formando a los conductores y conductoras en materia de conducción eficiente.
Desayuno gratis si vas en bicicleta
En la misma línea de impulsar un modo de transporte sostenible, el Ayuntamiento de Zaragoza está poniendo en marcha una serie de medidas para “fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte cotidiano”, en palabras de la concejala de Medio Ambiente y Movilidad del Consistorio, Teresa Artigas.
La que comenzó el pasado lunes es una pequeña acción, casi simbólica, ya que consistía en dar vales de desayuno a los ciclistas que se desplazaran en sus bicicletas. La propia concejala y el alcalde de la ciudad, Pedro Santisteve, fueron los encargados de repartir estos vales.
Artigas apuntó que el Ejecutivo municipal trabaja “para dotar a todas las grandes avenidas de carril bici con el fin de que se pueda circular de forma segura y también para que se usen las vías pacificadas y no las aceras como forma de respeto al resto de los usuarios”. La concejala recordó que el objetivo es “conseguir que Zaragoza sea la capital ciclista del sur de Europa”. La próxima primavera se celebrará en esta ciudad un congreso internacional sobre movilidad ciclista.