Luis Ibarra: ''El teleférico a La Isleta es un proyecto deseado y anhelado por el Puerto“
El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, se ha posicionado a favor de la instalación de un teleférico entre el Parque de Santa Catalina y la zona militar de La Isleta como reclamo turístico para la capital grancanaria y para “consolidar un espacio Puerto-ciudad alejado de las grandes construcciones que se intentaron en un pasado no tan lejano”.
Ibarra recuerda que se trata de una inversión 100% privada, ideada por el ingeniero industrial Rafael Cabrera, y defiende que el funicular, que recorrería el istmo de Santa Catalina hasta la montaña del Vigía, permitiría “visualizar un espacio que hoy en día está cerrado a la ciudadanía”. La inversión prevista por los promotores de la iniciativa asciende a 10,5 millones de euros y la instalación ocuparía unos 700 metros cuadrados.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas cree que con este proyecto se podría recuperar el edificio volcánico de la Montaña del Vigía, “que está completamente degradado”. Además, minimiza el impacto del proyecto sobre el espacio protegido de La Isleta y remarca que tan sólo ocuparía un 0,001% de su superficie en un lugar donde “hay construcciones de telecomunicaciones y otras militares en estado de abandono”.
“Es un proyecto deseado y anhelado por el Puerto”, ha manifestado Ibarra, que ha destacado que esta iniciativa permitirá convertir la entrada al parque de Santa Catalina, hoy ocupado por un aparcamiento de estructura metálica, “en un parque que albergará en su interior el edificio de salida”. Subraya además que otras ciudades situadas en entornos portuarios, como Barcelona o Funchal, ya disponen de instalaciones de este tipo.
El proyecto para instalar un funicular en el istmo de Santa Catalina fue presentado en mayo a la Autoridad Portuaria por la sociedad Teleférico de Las Palmas. Ibarra considera que esta iniciativa puede convertirse en un “proyecto tractor” de nuevas actividades en el entorno del acuario Poema del Mar que se construye en la zona del Muelle del Sanapú.
El teleférico proyectado tiene una longitud de 2.270 metros entre el istmo de Santa Catalina, con 18 góndolas que sobrevolarán el emblemático barrio capitalino a una altura de entre ocho y quince metros en aproximadamente siete minutos.
Los promotores prevén recibir a unos 600 visitantes por horas y aspiran a lograr una concesión administrativa por 50 años por parte del Gobierno canario, para lo que será necesario que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y el Cabildo insular califiquen esta iniciativa de interés general para la isla y aprueben la suspensión del planeamiento de la zona afectada por su trazado.
Los empresarios pretenden financiar el teleférico con fondos propios y ayudas de la Unión Europea y crear 30 puestos de trabajo directo. Además se han mostrado dispuestos a invertir 100.000 euros en la limpieza del volcán.