Clavijo admite “la incorrecta gestión de dinero público” en Las Teresitas y acusa al PSOE de querer “salpicar” al Gobierno
La reciente sentencia sobre el caso Las Teresitas (que condenó al ex alcalde de Santa Cruz de Tenerife, ex senador y ex dirigente de Coalición Canaria, Miguel Zerolo, a siete años de prisión e inhabilitación para el ejercicio de cargo público por malversación de caudales públicos y prevaricación administrativa) ha protagonizado este lunes un duro enfrentamiento entre el presidente del Gobierno, el nacionalista Fernando Clavijo, y la presidenta del Grupo Socialista, Patricia Hernández, que se han acusado mutuamente de querer emponzoñar la imagen de sus respectivos partidos.
Un cruce de acusaciones que se saldó con la petición de “disculpas como militante de CC” en “sede parlamentaria” de Clavijo por la “incorrecta gestión del dinero público” por parte del equipo de gobierno municipal liderado por Zerolo, no sin antes recordar que la compraventa de la parcela de Las Teresitas contó en 2001 con el voto unánime del pleno del consistorio, incluidos los concejales del PSOE. “Yo ya he pedido perdón en sede parlamentaria y si el Tribunal Supremo ratifica la decisión, volveré a hacerlo; ¿usted también lo hará?”, espetó a Hernández.
“Una cosa es la verdad judicial, que se ha expresado y por la cual los condenados tienen que devolver 54 millones de euros al pueblo de Santa Cruz ,y otra cosa es que a Zerolo se le puso de candidato y se le defendió cuando se sabía que le habían tocado 145 veces la lotería y el candidato a la Presidencia del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, no pidió su dimisión como senador cuando fue condenado por el Supremo”, dijo Hernández.
Para la socialista, CC debe “pedir disculpas por haberlo defendido, por haberlo aforado y protegido, por haber vilipendiado a los denunciantes”.
“¿Y si el Supremo no ratifica la sentencia del TSJC, que ha aún no es firme, usted pedirá disculpas?”, insistió Clavijo, que acusó a la socialistas de “querer salpicar a dirigentes y cargos del Gobierno” no implicados en el caso en vez de centrarse en la “labor de control” al Ejecutivo.
Previamente, Hernández había asegurado que tres concejales que votaron a favor de la operación siguen en el Ayuntamiento; Rosa Dávila “que era teniente de alcalde del equipo que trabajó en el convenio de Las Teresitas, y que dimitió para formar parte del Gobierno de Canarias antes de que se produjera la compraventa”, es consejera de Hacienda del Ejecutivo y Emilio Atiénzar, viceconsejero de Empleo.
Sin embargo, Clavijo ha recordado que Dávila fue nombrada en 1999 por el entonces presidente, Román Rodríguez, directora general del Instituto Canario de la Mujer (ICM), cargo que ocupó hasta 2003, cuando pasó a la Dirección General de Transportes del Gobierno de Canarias, lo que a juicio de Clavijo demostraba las “imprecisiones” de los argumentos de Hernández.
Una lotería que toca 145 veces
“Usted daba palmaditas en la espalda a Zerolo y CC lo protegió y lo mandó al Senado solo para aforarlo, después de que ya le hubiera tocado 145 veces la lotería y estuviera imputado”, dijo Hernández, que volvió a ser replicada por el presidente al afirmar que el PSOE también votó al ex alcalde como representante del Parlamento en la Cámara Alta.
Una afirmación que fue negada por la presidenta del Grupo Socialista con posterioridad en los pasillos del Parlamento:“el presidente miente pleno tras pleno, es ya una costumbre, pero la realidad es que a Zerolo, ya imputado, solo lo apoyó CC para aforarlo, porque solo presentó una pregunta escrita y tuvo cinco intervenciones”.
“El Grupo Socialista votó a Domingo Fuentes, el PP a Josefa Luzardo y los 21 diputados de CC votaron todos exclusivamente a Miguel Zerolo, y las tres abstenciones del Mixto fue porque no presentaron candidato”, dijo Hernández, que también insistió en que “es falso”, como apuntó Clavijo, que la elección de Zerolo estuviera dentro del Pacto con el PSOE.
Actitud miserable
“Es tan falso que se participara en un acuerdo que incluso se cambió el procedimiento de elección de los senadores porque ningún grupo quería apoyar a Zerolo, y se pueden consultar los Diarios de Sesiones”, remachó.
Y respecto a Dávila, Hernández insistió en que “me reitero en que era teniente de alcalde del equipo que trabajó en el convenio de Las Teresitas, y que dimitió para formar parte del Gobierno de Canarias antes de que se produjera la compraventa, sigue siendo correcto lo que he dicho”.
En cuanto a las disculpas ofrecidas por Clavijo, insistió en que el presidente, “no pasaba hoy por aquí” en este caso, pues “dijo en su momento que Zerolo estaba sufriendo una crucifixión por parte de los denunciantes, es el mismo que dijo que la operación de Las Teresitas era un pacto político y que la culpa fue de los trabajadores públicos que escondieron un papel, y no de los políticos”.
Y por si quedaba dudas sobre el papel del PSOE en torno a la compraventa en 2011, concluyó que “el PSOE se opuso siempre, y aquellos concejales que no hicieron caso” a las direcciones insular y regional “fueron apartados y se creó una gestora de la que yo formé parte. ”Esas declaraciones son una actitud miserable de Clavijo“, remachó.