Podemos e IUC buscarán la fórmula para alcanzar en Canarias una confluencia como la gallega o catalana
Los partidos no han logrado alcanzar un acuerdo para garantizar un Gobierno en España, por lo que la celebración de nuevas elecciones es un hecho después de que el rey Felipe VI no nombrase a ningún candidato para la investidura este martes. De cara estos próximos comicios ya Podemos e Izquierda Unida-Unidad Popular han comenzado a dar los primeros pasos para lograr una confluencia que aglutine el voto de la izquierda, tal y como se consiguió en el mes de diciembre en comunidades como Galicia o Cataluña. Las comunidades autónomas, atentas a lo que plantean sus líderes a nivel estatal, ya han tenido sus primeras tomas de contacto y empiezan a pronunciarse al respecto, como en el caso de Canarias.
En el Archipiélago, los secretarios de estos partidos son conscientes de que si hubieran logrado una alianza entre ambos en las pasadas elecciones habrían alzando cinco escaños, dos más de los consiguió Podemos. Es decir, aplicando el sistema D'Hont, si sumamos los 30.933 votos que obtuvo IU- UP en el Archipiélago (15.235 en la provincia de Las Palmas y 15.698 en Santa Cruz de Tenerife) más los 231.063 de la formación morada, el resultado equivaldría a la obtención de estos cinco diputados, con lo que habrían logrado desplazar al PP como la fuerza mayoritaria en escaños en las Islas.
Ante este panorama y en consonancia con la predisposición que existe a nivel estatal, tanto la secretaria de Podemos en Canarias (Meri Pita) como el secretario de organización de IUC (Lorenzo Garzón) apuestan porque, de repetirse los comicios, lo hagan unidos. Para ello, está previsto que la próxima semana se lleve a cabo una reunión entre ambas fuerzas.
“La idea es sumar”, insiste Meri Pita, que cree que ante el reto actual en el que se encuentran los partidos, que deben “cambiar la realidad de este país”, se debe llegar a una mayoría que permita “tranformar las políticas económicas”. En este sentido, recuerda que ambos partidos ya han votado de manera conjunta en las iniciativas que se han planteado en el Congreso estos últimos meses.
Las diferencias son “salvables”
Lorenzo Garzón, por su parte, también está dispuesto a continuar esta línea de diálogo para alcanzar la confluencia. IUC mantenía desde hace días que sí que se iban a convocar nuevas elecciones, a no ser que se produjera “un pacto incluido entre PSOE y el PP”. En este sentido, aclara que históricamente son una fuerza que “en ningún momento” ha querido ir sola. Según señala, “por tradición somos un partido que siempre intentamos aglutinar a más fuerzas de izquierda”.
La única traba, afirma Garzón, radica en la propia identidad de IU , es decir, no quieren “perder” dicha identidad. Considera que en toda España han obtenido más de 1 millón de votantes y que a ello se deben, por lo que aclara que a la hora de enfocar estas negociaciones pretenden que se efectúen con un trato “de igual a igual”.
El secretario de organización de IUC insiste en que mientras se hable con igualdad y desde el respeto hacia todas las fuerzas que aglutinen esa confluencia, no tendrán ningún otro problema. Garzón entiende que Podemos, al tener una mayor representación por haber obtenido un mayor número de votos, tenga mayor peso, pero habrá que tener en cuenta cómo se encara esas conversaciones y con qué requisitos, de manera que se mantenga la independencia de las organizaciones, insiste.
Meri Pita aclara que su partido no pretende que se disuelvan otras fuerzas, aunque tampoco es partidaria de la “sopa de siglas”, que cree que son típicas de otros tiempos. En cualquier caso, apunta que el debate está en las políticas que deben sacar al país de la situación y que el tema de la configuración de las listas o de la forma jurídica, se irán planteando y debatiendo.
Ambas formaciones ponen el punto de mira en los procesos de confluencias que se llevaron a cabo en otras comunidades autónomas como Cataluña (En Comú), Galicia (En Marea) o la alianza de Podemos con Compromís. Para Garzón la clave ha sido el respeto por la independencia de las fuerzas y cree que si en las pasadas elecciones no funcionó esta alianza fue porque Podemos estaba interesado a nivel nacional en personas concretas de IU como Alberto Garzón.
El secretario de IUC subraya que su partido no apuesta por proyectos “individualistas”, aunque es consciente del tirón de su candidato a la presidencia del Gobierno, que es uno de los más valorados por los españoles, y de que están en un buen momento para aprovechar este tirón. No obstante, aunque creen que en solitario están de nuevo mejor posicionados, prevén que junto a Podemos, tal y como dicen las encuestan, puedan conseguir una mayoría más amplia para regenerar el país.
“Somos conscientes de que no coincidimos en todo”, afirma Lorenzo Garzón, para añadir que, por ejemplo IUC se considera 100% una formación republicana, mientras que la formación morada, “no lo refleja de forma tan clara”. Sin embargo, insiste en que son diferencias “salvables” ya que en los aspectos económicos, en las medidas contra la pobreza y la desigualdad, en materia de desahucios... que sostiene que son cuestiones esenciales, coinciden en la totalidad.
“Podemos no cabe en el pacto PSOE-Ciudadanos”
Meri Pita insiste en que Podemos dio el primer paso para tratar de llegar a un acuerdo con el PSOE. Sin embargo, cree que este partido mientras negociaba con una mano con Podemos con la otra cerraba un trato con Ciudadanos. Un pacto en el que cree que no tienen cabida, porque las políticas que recogen son “las mismas que nos han llevado a esta situación”, aclara.
“No se trata de un pacto de izquierdas o de derechas”, insiste, sino de políticas que mejoren el bienestar de los ciudadanos. En este sentido, lamenta que las personas que trabajan por ejemplo en una fábrica de coches o de frigoríficos luego no puedan comprarse un artículo de estos porque los salarios son muy bajos. Resalta que el objetivo es que se reactive el consumo, pero para ello, se debe subir el salario mínimo.
Además, la diputada nacional de Podemos por la provincia de Las Palmas, explica que “no es cierto” que el tema Catalán fuera una línea roja de su partido, y cree que esa afirmación entra dentro de la campaña de manipulación que se ha hecho en los últimos meses. “Lo fundamental eran las políticas económicas”, indica.
Para Meri Pita, la actuación protagonizada este martes por el PSOE de tratar de cerrar un acuerdo in extremis con Compromis e independientes, es una estrategia de última hora, pero que en realidad no va a poner solución a la actual situación política.