Soria se libra de ser declarado 'non grato' en su ciudad natal por dudas jurídicas

José Manuel Soria se ha librado de la afrenta de la reprobación en su ciudad natal por una cuestión de terminología. El pleno del Ayuntamiento de Telde, en la isla de Gran Canaria, ha rechazado la moción propuesta por los dos concejales de Podemos en el municipio (en el grupo de los no adscritos desde este viernes) para declarar al expresidente del PP de Canarias y exministro de Industria, Energía y Turismo del Gobierno español como persona non grata.

Y es que Nueva Canarias (NC), el partido que lidera el pacto de gobierno en el municipio en coalición con el PSOE y el CCD, compartía la esencia de la propuesta planteada por los ediles Esther González y Guillermo Eugenio Ostolozaga, pero no el concepto de non grato, reservado para las relaciones internacionales. El secretario municipal tuvo que intervenir en la sesión plenaria para resolver la duda. Esta declaración, una “apreciación subjetiva de naturaleza política”, podría colisionar con el derecho al honor del afectado, por lo que, según el alto funcionario, sería necesaria la apertura de un expediente administrativo en el que habría que darle audiencia.

La portavoz de NC, Celeste López, planteó como alternativa una manifestación de reprobación a las políticas practicadas por Soria por el “grave perjuicio a la imagen de la ciudad y por el daño ocasionado al conjunto de las islas Canarias”. “Es una enmienda a la totalidad que no podemos aceptar”, respondió Esther González, proponente de la moción. La iniciativa fue rechazada con los dos votos a favor de los concejales de Podemos, los tres en contra del PP y la abstención del resto de grupos (NC, PSOE, CCD, Más por Telde, Unidos por Gran Canaria y CC).

La tensión del debate se trasladó a la zona reservada al público en el salón de plenos. Tras la presentación de la propuesta por parte de la edil de Podemos, un nutrido grupo de asistentes rompió en aplausos. También lo hicieron los simpatizantes del PP, menores en número , pero igual de ruidosos, después de la intervención de Sonsoles Martín (PP). Las diferencias se manifestaron también tras el resultado de la votación. “Cómplices”, gritó uno de los vecinos antes de que a la salida se organizara revuelo con otra ciudadana que se enfrentó a gritos a quienes habían acudido a apoyar a los concejales de Podemos. El incidente no pasó a mayores. Ya en el exterior del edificio, unas quince personas se manifestaron con un cartel con la imagen de Soria en el que se podía leer “Persona non grata en Canarias”.

El PP intenta torpedear la moción

El PP intentó torpedear la moción alegando que la propuesta había sido presentada con el logo de Podemos Telde y que esta formación no existía como grupo en el Ayuntamiento. Los concejales Esther González y Guillermo Eugenio Ostolozaga concurrieron a las elecciones en la plancha de Se Puede Ganar Telde, el partido instrumental de Podemos en el municipio, según recordaron durante el pleno. Sin embargo, en la sesión de este viernes se oficializó su pase al grupo de los no adscritos después de que el representante de Se Puede Ganar Telde elevase un escrito a la corporación informando del abandono de ambos ediles de esta formación. También en esta ocasión el secretario municipal resolvió la duda: la moción había sido registrada en su calidad de concejales y debía prevalecer su derecho a presentar mociones.

Solventada la cuestión de orden, Esther González enumeró en su exposición los motivos por los que, a su juicio, José Manuel Soria merecía ser reconocido como persona non grata en Telde. Aludió a acciones que habían generado una “gran contestación social”, entre las que se refirió a “la imposición de las prospecciones” petrolíferas frente a las aguas de Canarias. La oposición a la actuación del ministro “quedó patente el 11 de junio de 2014”, afirmó la concejal en referencia a la acción de protesta organizada el día en el que el entonces ministro daba el pregón de las fiestas de San Juan.

González también lamentó el “desprecio reiterado y manifiesto” de Soria a la opinión de la ciudadanía y las “continuas dudas” en la ética de sus comportamientos, “al recibir dudosas invitaciones a hoteles que, en algunos casos, incluso eran ilegales”. La representante de Podemos hacía mención de esta forma a las vacaciones del ex dirigente popular en Punta Cana o en el Hotel Volcán de Lanzarote, declarado ilegal por la Justicia. Por último, hizo referencia a la vinculación de sus empresas familiares con paraísos fiscales, “alguna de ellas mientras ya desempañaba un cargo público”, y a sus “reiteradas mentiras” a este respecto, “negando la veracidad de unos hechos que, finalmente, se comprobaron como ciertos”.

En relación a la declaración de persona non grata. recordó que ya el pleno del Ayuntamiento de Arrecife otorgó esta consideración a Soria en 2014 por las prospecciones petrolíferas y que recientemente el de Pontevedra ha hecho lo propio con Mariano Rajoy.

En su réplica, el PP se manifestó en contra del “linchamiento público hacia las personas”. “¿Ha hecho algún sondeo de opinión o es una fobia política? Si preguntara a los ciudadanos, igual se sorprendería”, aseveró Sonsoles Martín, que criticó que se intentará “destruir el honor de un hijo de la ciudad de Telde por no saber explicar algo que sucedió hace 20 años”. La portavoz de los conservadores intentó desacreditar a los promotores de la moción, a quien llamó “tránsfugas”, y vaticinó que aceptarían la modificación que propuso NC, algo que finalmente no ocurrió, para “que se les abra la puerta giratoria y consigan el tan ansiado puesto en el Gobierno municipal”. Tampoco faltaron las referencias a Arnaldo Otegi o a Venezuela.

Para Celeste López (NC), la moción representaba una oportunidad para demostrar que los teldenses “se indignan, reclaman y se comprometen con hechos”. “Hay actitudes en política que no deben quedar impunes”, manifestó la concejal, que reiteró que el apoyo de su formación a la esencia de la propuesta evidenciaba su voluntad de “combatir todas aquellas conductas que degraden o perjudiquen el bien común”. Tras el rechazo de los concejales de Podemos a su propuesta alternativa, López lamentó que la repulsa a las políticas practicadas por Soria no se hubiera explicitado en la aprobación de una moción “por un simple concepto jurídico”.

Sobre las insinuaciones lanzadas por el PP, la alcaldesa del municipio, Carmen Hernández (NC), censuró que la portavoz conservadora se refiriera a los ediles de Podemos como tránsfugas y remarcó que estos no se incorporarían al grupo de gobierno. “Ellos no quieren y la ley lo impide”, aseguró la regidora, que recordó que con su paso al grupo de los no adscritos han perdido derechos políticos y económicos.

Posición de otros grupos

Álvaro Monzón, de Más por Telde, añadió nuevos argumentos a los citados en la moción para criticar la trayectoria de Soria: las torres del Canódromo, el caso Salmón, el hachazo a las renovables... Sin embargo, su partido se abstuvo en la votación al entender que la propuesta tenía un marcado carácter electoralista. “Presentan la moción cinco días después de su dimisión. Están en el Ayuntamiento desde junio de 2015, llevan diez meses. ¿Por qué ahora? Compartimos el malestar y la indignación, pero no podemos apoyar una moción dirigida contra un ciudadano de a pie, que es lo que es ahora Soria, que ha tenido su penitencia en la dimisión y la va a tener en los tribunales y que tendrá que vérselas con la Agencia Tributaria”, agregó.

Para Gloria Cabrera, de Coalición Canaria, “debe ser la Justicia la que persiga y condene los comportamientos que queremos desterrar”. “Ninguna organización como CC ha puesto tan en cuestión la labor de Soria. La confrontación en el espacio público nos llevó a no agachar la cabeza ante decisiones lesivas para nuestra tierra e incluso a romper las relaciones con el Estado”, concluyó la edil nacionalista, que abogó por “no repetir los errores del pasado”.

Los portavoces del PSOE, CCD y Unidos por Gran Canaria no se pronunciaron en el debate.