El Cabildo buscará un acuerdo sin expropiación con el propietario de los terrenos de la Sima de Jinámar
El Cabildo de Gran Canaria se ha comprometido con dos asociaciones para la recuperación de la Memoria Histórica a contactar con el propietario de los terrenos donde se ubica la Sima de Jinámar, símbolo de la represión franquista en la isla, para intentar llegar a un acuerdo que permita acometer diversas actuaciones en la zona, entre ellas una posible exhumación de los restos de los cientos de represaliados que se calcula que fueron arrojados a este agujero volcánico de 80 metros de profundidad tras el alzamiento militar del 18 de julio de 1936.
Fuentes de la institución insular han precisado a este periódico que de momento no se contempla la expropiación de los terrenos, como pretendían las organizaciones. El propietario es un empresario ligado al sector de la construcción.
El presidente del Cabildo, Antonio Morales; los vicepresidentes Ángel Víctor Torres y Juan Manuel Brito, y el consejero de Cultura, Carlos Ruiz, se han reunido este miércoles con representantes del Foro Canario de Víctimas del Franquismo y de la Plataforma de Familiares de Fusilados de San Lorenzo para abordar la propuesta que estas asociaciones elevaron a principios de febrero a la corporación para recuperar la Sima de Jinámar, declarada Bien de Interés Cultural (BIC) y ubicada en un espacio natural protegido, y erigir un monumento a las víctimas y un centro de interpretación que explique los acontecimientos que se desarrollaron en este lugar en los años 30.
A la salida del encuentro, Francisco González Tejera, portavoz de los familiares de los fusilados de San Lorenzo, ha expresado su satisfacción por “el enorme interés y la total predisposición” que ha mostrado el Gobierno insular en relación a esta iniciativa, destacando el hecho de que en la cita hayan estado presentes todos los consejeros con competencias en las áreas implicadas.
Según González Tejera, Morales ha manifestado su voluntad de impulsar las intervenciones propuestas y ha apoyado la idea de levantar un monumento a los represaliados en este lugar con paneles informativos sobre los hechos históricos que allí se produjeron, aunque se ha mostrado más reticente al concepto de centro de interpretación que las asociaciones le han trasladado, que implicaría la presencia permanente de personal en el enclave. “Es más partidario de realizar visitas con un guía del Cabildo”, ha señalado el portavoz de la plataforma.
En el escrito remitido al presidente insular en febrero, las asociaciones también denunciaban el “lamentable estado” del entorno de la Sima, “lleno de basura y residuos” procedentes de la extracción de áridos de las piconeras de Montaña Rajada y La Barquilla, en el campo de volcanes de Jinámar, y las dificultades para llegar al lugar, con un acceso cerrado por una valla de una empresa privada. A este respecto, la institución les ha confirmado que la carretera es de titularidad privada, aunque también ha reconocido que “no puede estar en ese estado” y se ha comprometido a velar por que los ciudadanos puedan acceder al lugar sin restricciones. Técnicos de Medio Ambiente y de Patrimonio visitarán la zona para valorar la situación y comprobar si se están arrojando vertidos a la Sima de Jinámar.
Por otra parte. el Cabildo valorará la posibilidad de celebrar en este enclave un homenaje a José Santana Florido, el Pollo Florido, una de las figuras más destacadas de la lucha canaria en los años 30, recordado por haber arrastrado a uno de sus verdugos -falangista- al ser arrojado a la Sima.
Exhumación de la fosa común del cementerio de Vegueta
En la reunión de este miércoles también se ha abordado el proyecto para exhumar la fosa común del cementerio de Vegueta, en la que se estima que se localizan unos 180 cuerpos, de los que entre 60 y 70 corresponderían a víctimas de la represión franquista.
La asociación estatal ARDF Desaparecidos se ha ofrecido a asesorar al Ayuntamiento y al Cabildo para iniciar la exhumación. Su presidente, Santiago Carcas, se desplazará a la capital grancanaria el 13 de abril para reunirse con Sergio Millares, concejal de Participación Ciudadana, e intentar proyectar unos trabajos para los que se necesitarían, según González Tejera, “tres técnicos específicos durante la excavación”, además de los siete que aportaría ARDF Desaparecidos, “que no cobrarían nada, sólo los desplazamientos”, y un grupo de entre 25 y 30 colaboradores que podrían ser “estudiantes de la Facultad de Historia”.
El Cabildo ha anunciado que se implicará en la exhumación, “aportando los permisos para excavar” la fosa y a técnicos de la corporación para ayudar en la labor, además de buscar junto al Ayuntamiento fórmulas de financiación. Para la investigación antropológica sería necesaria la participación de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC). Con respecto a los análisis de ADN, la asociación presidida por Santiago Carcas suele trabajar con la Universidad de Santiago de Compostela, aunque Ángel Víctor Torres, vicepresidente primero del Cabildo, ha recordado que las exhumaciones del pozo de Arucas, municipio del que fue alcalde, se realizaron en la ULPGC “con gran fiabilidad”.
