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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Cinco diferencias y cinco coincidencias entre el ‘Prestige’ y el ‘Oleg Naydenov’

Rescatada en la zona del barco ruso una tortuga impregnada de combustible

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

Los accidentes del petrolero monocasco Prestige en aguas de Galicia en noviembre de 2002 y el naufragio del pesquero Oleg Naydenov cerca de la costa sur de la isla de Gran Canaria no pueden considerarse iguales. Les separan sobre todo las proporciones, no sólo por el tamaño de los buques y la carga contaminante que ambos transportaban sino, consecuentemente, por los efectos que el primero produjo y el segundo está en condiciones de producir en estos momentos.

Sin embargo, entre un hundimiento y el otro hay también muchas similitudes sobre todo en la gestión de la crisis. Estas son las diferencias y los parecidos.

Las diferencias

1) Uno navegando, el otro no. El Prestige no estaba amarrado a puerto. Navegaba por el corredor de navegación gallego a 28 millas de Finisterre cuando sufrió un accidente provocado por una tormenta con vientos de más de 70 kilómetros por hora. El Oleg Naydenov, antes de ser remolcado a alta mar, estaba atracado en el dique Reina Sofía, del Puerto de La Luz y de Las Palmas, a punto de zarpar rumbo a la pesca cuando sufrió un incendio en su sala de máquinas.

2) Las proporciones. El Prestige medía 246 metros de eslora frente a los 108 del Oleg Nayddenov; el petrolero llevaba 77.000 toneladas de crudo en sus tanques, más su propio combustible, mientras que el pesquero sólo llevaba el fuel necesario para la navegación, 1.400 toneladas.

3) El estado de los barcos. El Prestige era un buque monocasco que no resistió los embates de un temporal, de hecho ese tipo de buques ya no pueden navegar en aguas de la Unión Europea; el Oleg Naydenov acababa de ser reparado en unos astilleros de La Luz (Astican), y según los informes oficiales estaba técnicamente apto para la navegación.

4) La distancia de la costa. Tras ser remolcado durante seis días en una deriva incomprensible, el Prestige se hundió a 250 kilómetros de la costa gallega, mientras que el Oleg Naydenov se fue al fondo del mar a tan solo 20 de la isla de Gran Canaria tras un paseo de tres días también a base de remolcadores.

5) Las reacción oficial. Las autoridades políticas no se inmutaron cuando estalló la crisis del Prestige hasta que el percance adquirió tintes verdaderamente dramáticos, con el barco a punto de partirse en dos. El ministro de Fomento de entonces, Francisco Álvarez Cascos, decidió irse de cacería en los momentos más críticos. La actual titular de esa cartera, Ana Pastor, acudió a Gran Canaria la noche siguiente del naufragio del pesquero ruso.

Los parecidos

1) El PP. La gestión de los accidentes del Prestige y del Oleg Naydenov ha corrido por cuenta de técnicos y autoridades del Ministerio de Fomento bajo gobiernos del Partido Popular (2002, con Aznar, y 2015 con Rajoy). En ambos casos, los responsables han alegado que se ha actuado siempre conforme a protocolos establecidos.

2) Sin refugio. En ambos casos se ha ignorado la conveniencia de acercar a los barcos en situación crítica a puertos de refugio donde poder controlar posibles vertidos y vaciar sus tanques y otros elementos contaminantes.

3) El paseo errático. Tanto en Galicia como en Canarias se optó por darle un paseo al barco siniestrado. En el caso de Galicia mediante una deriva grotesca que empezó con el acercamiento hasta las 4 millas y acabó con el hundimiento a 250 kilómetros de la costa. El pesquero ruso fue incomprensiblemente remolcado a una zona de alto valor pesquero, recientemente declarado Lugar de Interés Comunitario (LIC) frente a Fuerteventura para luego moverlo más de 100 millas hasta un corredor migratorio de zifios y frente a la ciudad turística más importante de Canarias.

4) El hundimiento, lo peor. Ambos sucesos acabaron con la peor solución, el hundimiento del buque sin haberle podido extraer su carga, su combustible y otros elementos contaminantes de su interior. El daño ambiental de la catástrofe del Prestige está catalogado como uno de los peores de la historia. Proporcionalmente, el vertido del Oleg Naydenov, aun en fase de comienzo, podría afectar a un ecosistema marino muy rico que precisamente en los meses de abril y mayo se convierte en corredor migratorio de zifios.

5) Apagón informativo. Como ocurre siempre en estos casos, la Delegación del Gobierno en Canarias decretó apagón informativo para reducir a un “riesgo pequeño” las consecuencias del hundimiento del pesquero ruso. La presión mediática y social ha reventado todos los diques contenedores impuestos.

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