Un libro revela el inexplorado drama de Negrín por la persecución a su familia

Una faceta hasta ahora inexplorada de la historia de Juan Negrín, la del drama personal que vivió al ser perseguida su familia cuando la república de la que fue presidente fue derrocada, podrá ser conocida ahora por el público con la edición de un nuevo libro que ahonda en ese capítulo de su existencia.

Cartas que envió a sus parientes y recibió de ellos después de que tuvieran que exiliarse a Francia para evitar represalias permiten aproximarse a esa otra cara de la vida del político, recopiladas ahora en un libro dedicado especialmente a su hermano Heriberto que, promovido por la Fundación Juan Negrín, se presentará mañana en la que fue su ciudad natal, Las Palmas de Gran Canaria.

El padre Heriberto Negrín y su familia es el título de esta obra, que, siguiendo la trayectoria vital del hermano sacerdote del último presidente de la Segunda República a través de varias homilías que escribió, en muchos casos para señaladas festividades religiosas de su isla, desvela también aspectos humanos de una de las figuras más controvertidas de historia de España en el siglo XX.

Todo ello merced a documentos recuperados del olvido como “una carta impresionante” dirigida por Juan Negrín a sus hermanos Heriberto y Lolita en la que, tiempo después de que ambos hubieran tenido que huir a Francia, “les dice su situación, que ha llegado a la quiebra y a la ruina” tras deambular de un país a otro entre Europa y América agotando sus recursos durante su prolongado exilio.

Así lo ha avanzado hoy el responsable del nuevo libro, Julio Sánchez, también sacerdote, licenciado en Teología y autor de varias obras históricas, al dar a conocer a los medios de comunicación este último trabajo suyo.

Partiendo de la transcripción de una serie de homilías que años atrás llegaron casualmente a manos del presidente de la Fundación Juan Negrín, José Medina, según ha relatado este, Sánchez ha expuesto que desarrolló una investigación más amplia en torno a la correspondencia que el presidente intercambió con su hermano Heriberto y descubrió documentos inesperados.

Gran parte de ellos son cartas que halló buceando en archivos atesorados por la referida fundación en su sede de Gran Canaria pero también de otros lugares de España, como Sevilla, según ha relatado, precisando que ha recuperado una serie inicial de misivas “felices”, escritas en los años de juventud y estudios de uno y otro Negrín.

“Después viene ya lo que vino, que fue la Guerra Civil, y entonces Juan decidió que su familia se fuera exiliada a Francia, porque el apellido Negrín fue proscrito desde el principio”, ha proseguido el investigador, que ha rememorado el peregrinaje que los hermanos y la madre del presidente republicano tuvieron que pasar hasta verse a salvo.

Algo que ha subrayado que le costó especialmente a Heriberto Negrín, quien, en su ruta hacia la frontera, vivió un momento de especial peligro cuando, al llegar a Alicante, “los anarquistas lo detuvieron al saber que era cura y lo quisieron fusilar”.

Si bien escapó a la muerte -ha proseguido- debido a que, “casualmente, en Alicante había un diputado socialista que le ayudó a escapar oculto en un coche”.

Llevado a Madrid, Heriberto se encontró con su hermano, que “lo envió por la carretera de Zaragoza con documentación falsa” hasta que finalmente logró su objetivo se salir del país, ha concluido Sánchez.

El cual ha afirmado que ese es solo uno de los capítulos desconocidos de la vida del presidente de la Segunda República en el exilio que desvela su obra, en la cual la propia nieta del político, Carmen Negrín, ha confesado que ha “descubierto mucho” de su propia familia que hasta ahora no sabía.