El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Desguazar potabilizadoras, último grito
Vamos a llamar desde hoy Soria I a la potabilizadora que el actual ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ensambló en el complejo de Piedra Santa cuando era alcalde de Las Palmas de Gran Canaria. En realidad se llama Las Palmas I, la más antigua de todas, pero fue transformada durante su mandato en una planta de 75 millones de euros destinada a reforzar la producción de agua para consumo humano ante la entonces inminente obsolescencia de Las Palmas II, que el actual alcalde, Juan José Cardona, acaba de mandar a desguazar tras su parada en 2005. Soria I puede ser considerada la mejor planta de todas las que existen a este lado del mundo (está diseñada para producir el agua de mejor calidad), pero tiene un problema insalvable: sólo puede operar en países sonde el petróleo sobre, donde el metro cúbico de fuel valga lo que vale una caja de fósforos. Ni en España ni en cualquier otro país de nuestro entorno sería jamás viable una planta así. Y Soria lo sabía. Se lo dijeron sus técnicos municipales; se lo dijeron los técnicos de Emalsa, la compañía de distribución de agua de la ciudad, y se lo dijeron a él y a Álvarez Cascos, a la sazón vicepresidente del Gobierno, los técnicos del Ministerio de Medio Ambiente, que acabó pagando el capricho con fondos propios y fondos comunitarios a finales de los años noventa. La planta jamás ha sido recepcionada por nadie, ni por el Ayuntamiento ni por ninguna administración canaria. Ni por Emalsa, que puso como condición imposible que se incrementara en consecuencia el recibo del agua hasta cubrir el coste de producción de Soria I. Un metro cúbico de esa planta, de compresión de vapor, cuesta cuatro veces más de lo que vale producir la misma cantidad en cualquier otra potabilizadora de ósmosis inversa. Pero Soria no hizo caso a nadie y tiró adelante con esa inversión funesta. Soria I jamás ha producido un solo litro de agua y ponerla en marcha para que no se deteriore cuesta alrededor de un millón de euros sólo en fuel. Un disparate propio del sujeto en cuestión.
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