El Sevilla le pone los pies en el suelo a la UD Las Palmas
El Sevilla ganó 2-1 a la UD Las Palmas, que llegó como líder al Sánchez Pizjuán, al remontar un partido que tenía perdido, primero con un gol de penalti de Sarabia a los 89 minutos y, poco después, con el decisivo del joven Carlos Fernández al rematar un córner en el último instante del tiempo añadido.
El equipo canario jugó mejor en el primer tiempo y se adelantó con un tanto de Tana al filo del primer cuarto de hora, pero luego fue muy conservador en la segunda parte y le faltó rematar la faena ante un Sevilla que fue de menos a más y dominó por completo a un inofensivo Las Palmas en la reanudación, hasta que la victoria en el último segundo premió su fe en la victoria.
La UD Las Palmas llegaba a un feudo muy difícil para defender sin complejos su posición y sin dos hombres claves por lesión, Jonathan Viera y el ghanés Kevin-Prince Boateng.
Tras el parón liguero, y después de sendas goleadas al Valencia (2-4) y al Granada (5-1), el técnico amarillo dejó en el banquillo a Momo y alineó al argentino Mateo García en la izquierda, junto a Tana, Vicente Gómez -que apoyó en la contención a Roque Mesa- y el marroquí El Zhar en terrenos ofensivos, y el croata Livaja arriba.
En el Sevilla, el argentino Jorge Sampaoli renovó el once tras no haber contado estas dos semanas con cinco internacionales: el galo Rami, el único titular; Vitolo y el argentino Mercado, suplentes; y el argentino Kranovitter y el nipón Kiyotake, a los que no convocó.
Sin dos lesionados, el lateral francés Tremoulinas y el meta David Soria -el italiano Sirigu, recién llegado, se quedó en la suplencia-, Sampaoli quería buscar el equilibrio entre su fútbol ofensivo y atrevido, y la necesidad de amarrar más en defensa.
También reservó al internacional grancanario Vitolo o a Sarabia, y sacó en el centro al francés N'Zonzi y al brasileño Ganso, lento al no estar físicamente a tope; y a los argentinos Correa y Vázquez, y a los galos Nasri -que debutó- y Ben Yedder en puestos de ataque.
La primera parte del Sevilla fue pésima. Sin ideas y perdido, con muchas lagunas e incapaz de hacerse con el mando y de crear opciones de gol, fue dominado por un ordenado conjunto isleño, que se replegó bien y buscó su momento con los robos de Roque Mesa, inconmensurable y que este verano estuvo a punto de fichar por el club andaluz.
Todo ello, unido a la calidad y rapidez de El Zhar, Tana o Mateo, con el luchador Livaja de estilete, fue el presagio de lo que luego ocurrió ante un errático Sevilla, después de anulársele un gol por fuera de juego al marroquí a los 5 minutos y, poco después, tras un envenenado tiro del croata que rechazó bien Sergio Rico.
El equipo insular, bien colocado y con las ideas más claras que los locales, recogió sus frutos al adelantarse nada más superarse el primer cuarto de hora, cuando el canario Pedro Tanausú 'Tana', muy versatil en la media punta, marcó el 1-0 con un disparo desde fuera del área tras una contra conducida por el omnipresente Roque Mesa.
A partir de ahí, los amarillos controlaron el choque frente a un Sevilla sin rumbo y sin verticalidad ni profundidad, que, aún así, mejoró en el último cuarto de hora y rozó el empate en un magnífico pase en profundidad de Ganso, sustituido luego en el descanso por Vitolo, que Ben Yedder remató raso para que el exsevillista Javi Varas salvara el gol, tras lo que Vázquez mandó alto el rechace.
En la reanudación, el Sevilla, más vertical e intenso, salió muy enchufado y dominó a una UD Las Palmas conservadora, que se limitó a guardar los espacios y esperar alguna contra, pero sólo gozó de una ocasión en las botas del argentino Araújo, quien había sustituido a Tana, y que desbarató Sergio Rico a un cuarto de hora del final.
Así, este periodo fue un monólogo sevillista. Ya con Vitolo -formado en el club de su tierra- en el campo y luego con el joven canterano Carlos Fernández por Ben Yedder y con Sarabia por Correa, el equipo de Sampaoli acosó en todo momento al rival, trenzó buenas acciones en ataque y tuvo muy cerca el empate.
La más clara fue un tirazo de Franco Vázquez a la hora de juego, tras una gran jugada de Vitolo, al que Javi Varas replicó con un paradón. Más tarde, con los andaluces volcados, buscaron el gol N'Zonzi, pero su cabezazo se fue fuera de milagro, y Nasri, Sarabia y Carlos Fernández, aunque sus remates los rechazó el meta amarillo.
Los intentos de los andaluces no fructificaron hasta un minuto antes de los 90 reglamentarios, cuando el árbitro pitó penalti por una caída de Vitolo en el área rival y Sarabia lo transformó en el 1-1 en una jugada discutida por los visitantes.
Cuando todo parecía resuelto, en el 94 y recién rebasado el tiempo añadido, llegó el mazazo para los canarios al rematar Carlos Fernández un córner y hacer el 2-1 definitivo.