El Parlament de Catalunya se posiciona en contra de la homofobia
La propuesta de ley contra la homofobia que habían presentado ERC, PSC, ICV-EUiA y la CUP continuará su trámite parlamentario después que la sala haya rechazado la enmienda a la totalidad que había presentado el PP. CiU y Ciutadans se han puesto, en esta ocasión, de parte de los partidos de izquierdas, decantando la balanza de forma clara: 110 votos en contra de la enmienda del PP y sólo 17 a favor. Los populares y sus argumentos se han quedado solos en un día que para muchos será histórico. Al final de la votación, los diputados de los partidos de izquierdas se han girado de cara al público para aplaudir a los miembros de los colectivos LGTB, que habían venido para asistir a la votación. El mérito es suyo.
Las diferentes entidades que defienden los derechos LGTB hace muchos años que reivindican su causa y que piden justicia. Este mismo texto ya se había discutido y aprobado en muchos ayuntamientos catalanes pero no tuvo tanta suerte en el de Barcelona, donde CiU se echó para atrás. Pero la votación del Parlament representa un triunfo sin precedentes y un premio a la constancia de estos colectivos. “Por fin hemos hecho un acto contundente y de valentía política contra la violencia que sufren muchas personas”, destacó Eugeni Rodríguez, portavoz del Frente de Liberación Gay de Catalunya (FAGC), el día en que se registró en el Parlament la proposición de ley. También estaba el Casal Lambda, la Asociación de Familias Lesbianas y Gais y la Coordinadora de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales de Catalunya.
La ley continúa su camino y seguramente recibirá enmiendas y se habrá de modificar parcialmente, pero el paso ya está dado. Entre otros puntos, la norma obligará a tomar medidas para combatir la LGTBfobia en el trabajo y que los proyectos educativos de centro incorporen el respeto a la diversidad afectiva y sexual. También obliga a los equipamientos culturales a tener material LGTB, entre otros cambios.
Un recuerdo para Sonia
“Este es un homenaje a todas las Sonias del mundo. Sonia, va por ti. Nunca más, en ninguna parte, contra nadie”. David Fernández, diputado de la CUP, ha aprovechado el debate sobre la proposición de ley contra la homofobia para recordar a Sonia, la transexual asesinada a patadas por seis nazis en el Parque de la Ciutadella en 1991. Las mismas entidades lucharon también con mucha insistencia para conseguir que el Ayuntamiento de Barcelona instalara una pequeña escultura y una placa de recuerdo a Sonia y las transexuales, uno de los colectivos que aún sufren más discriminación.
Desde ICV, la diputada Laura Massana ha considerado la ley absolutamente “necesaria e imprescindible” y ha recordado la polémica redada policial que hicieron los Mossos en diferentes locales de ambiente el día después del Orgullo Gay.
Los argumentos del PP para oponerse a la tramitación de la ley los ha expuesto la diputada Dolors López, que ha insistido en “dejar muy claro” su respeto absoluto a “la diversidad afectiva y sexual”. López ha advertido que esta ley puede “estigmatizar” y ha criticado que es demasiado “intervencionista”. También ha defendido que la norma no era necesaria porque la discriminación ya está castigada desde las leyes europeas, en la Constitución española y en el Estatuto y, finalmente, ha sorprendido a todos al asegurar que “consejeros de Unió” habían pedido al PP “en privado” que presentara esta enmienda a la totalidad para hacer reaccionar a CDC. La casualidad ha querido que la diputada de CiU que tenía que hablar tuviera que marcharse y finalmente ha comparecido Maria Mercè Jou, de Unió Democràtica de Catalunya. Como suele ocurrir en el Parlamento, la diputada ha leído su intervención, pero respondiendo a la acusación del PP ha añadido: “Somos un partido humanista y como partido humanista no tenemos otro remedio que respetar a todos”
