El Ayuntamiento de Barcelona y Guifi.net estudian interconectar sus redes de wifi

El comisionado para la economía social y cooperativa del Ayuntamiento de Barcelona y la fundación Guifi.net estudian crear una línea de colaboración para mejorar el servicio de acceso a la red a la ciudadanía de la ciudad.

Fuentes de las dos entidades han explicado a este medio la existencia de la voluntad de poner en marcha la colaboración. La primera reunión formal de este proceso se ha previsto para el día 29 de febrero. Antes ya se han producido acercamientos y acciones puntuales. Un ejemplo es que, como consecuencia del inicio del Mobile World Congress, el Ayuntamiento, a través de Barcelona Activa ha asignado a la fundación una de las ponencias a las que tiene derecho en el evento.

Intentos de hacer cosas conjuntamente se habían producido en anteriores mandatos municipales, pero este parece el más ambicioso por la predisposición de las dos partes, según se ha podido constatar.

En el Ayuntamiento de Barcelona son muy cautos a la hora de hablar del proyecto. Fuentes del comisionado para la Economía Social y Solidaria hablan de dos aspectos previos. Uno es el técnico. El Instituto Municipal de Informática tendría mucho que ver en este punto. El segundo punto es el jurídico. Al respecto habría que encontrar el encaje entre la economía pública, que representa el ayuntamiento y la economía comunitaria, de Guifi.net, para hacerlo compatible con la normativa del sector de las telecomunicaciones. No obstante, desde Guifi.net no se tiene ninguna duda de que esta colaboración no sólo es perfectamente posible con la normativa vigente, sino que además, toda la legislación que va llegando desde Europa cada vez más obliga a ir hacia esa dirección. De estas dos condiciones se derivaría la acción posterior.

Guifi.net es una organización que nació en la comarca de Osona. Se define como proyecto ciudadano para la construcción de una red de telecomunicaciones, abierta, libre y neutral, la cual se vertebra a partir de la contribución de los segmentos de red que cada participante aporta allí donde la red ya está presente.

La red se inició en Osona en 2004. Varias personas acordaron intercomunicarse a través de la creación de nodos entre las localidades de Vic, Gurb, Santa Eugenia de Berga y Calldetenes. Desde ese momento la experiencia no ha parado de crecer. Ahora hay activos más de 37.000 nodos, o lo que es lo mismo, más de 37.000 familias utilizan esta red. Guifi.net está también abierta a empresas e instituciones públicas. Es más, la entidad supera el ámbito catalán. Hay experiencias en las que grupos de personas han decidido instalar red en lugares como Sevilla o Castelló, en elPaís Valencià. En estos casos desde Catalunya se afirma que “han hecho suya Guifi.net”.

Roger Baig, trabajador de la fundación que gestiona Guifinet explica que en Barcelona, “nuestra presencia permite cubrir todo el territorio de la ciudad mediante antenas que se instalan en los tejados, en unos lugares con más profundidad que otra”. Pero lo que quisiera hacer esta entidad que ha recibido premios de la Unión Europea por su modelo de negocio, sería acceder también a la transmisión de datos con fibra óptica. Para ello tienen experiencia con otras administraciones públicas que ante la falta de cobertura de todo o parte de su término municipal han llegado a acuerdos con la fundación.

“Para poder hacer esto es necesario que nos pongamos de acuerdo”, dice Baig. Y pone como ejemplo el hecho de que si un ayuntamiento, como el de Barcelona decide que cualquier obra en la vía pública que implique abrir zanjas tenga que incorporar un aprovechamiento para desplegar red de fibra óptica se avanzaría mucho en la conectividad . Según la experiencia de los técnicos de Guifi.net, la parte más costosa del despliegue de la fibra es la obra a pie de calle. “La fibra física no supone ni un 1% del coste”, dice.

Negocio vinculado

El futuro de las redes abiertas, expresan en Guifi.net, es la transmisión de voz y datos por fibra óptica. “El wifi es la paja y la fibra es el oro” dice Baig. Y precisamente porque hay mucho dinero a ganar hay, afirman, mucha presión para que el negocio quede en manos de las cuatro grandes operadoras. “En materia de telecomunicaciones por fibra Barcelona es una mina de platino”, asegura Baig.

Una idea que expresan desde Guifi.net y que es vista también con simpatía desde el ayuntamiento barcelonés sería conectar las redes telemáticas que ambas entidades tienen en la ciudad y que por el momento se están desplegando en paralelo. “Es un desperdicio que nadie se debería permitir”, dice Baig.

El Ayuntamiento de Barcelona puso en marcha en 2007 una red wifi pública para permitir la conexión a Internet de los ciudadanos, básicamente desde los centros cívicos y lugares como bibliotecas. Además, creó la red Barcelona Wifi, que utilizando edificios públicos y otros equipamientos municipales, como estaciones de metro, permiten conectarse, por ejemplo desde los teléfonos móviles. Ahora bien, este experimento no llegó a su cenit porqué las operadoras privadas recurrieron y la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones decidió que se redujera tanto la capacidad como las posibilidades de la red. Baig es drástico en juzgar la operación: “Creo que se puso en marcha para que fallara”, dice.

Si el Ayuntamiento se acoge a la prudencia para no adelantar acontecimientos más allá de su voluntad de colaborar la extensión de las otras economías, Guifi.net aprovecha para desmitificar imágenes interesadas que se puedan transmitir a la opinión pública sobre su experiencia. “Somos una entidad de lo que se conoce como Economía del Común. Esto quiere decir que creamos red, hacemos llegar la señal en la puerta de las casas, pero a partir de aquí es el ciudadano quien termina la instalación”.

Al mismo tiempo la existencia de la entidad ha hecho que empresas e instituciones públicas la usen y también creen actividad económica a su alrededor. Todo ello genera negocio local y experiencia técnica. Porque a pesar de basarse en voluntarios, desde la red se han estipulado para las empresas unas aportaciones que permiten el mantenimiento de la estructura y también realizar inversiones. Todo gestionado a partir de unas normas de gobernanza creadas para hacer que todo funcione.

Además del acceso a Internet, la red Guifi.net permite, por ejemplo, unir las redes de las diferentes sedes; desplegar servicios de videovigilancia dirigidos a agricultores para que así controlen desde casa sus campos. También hace posible la gestión remota de centros de producción o hacer copias de seguridad de datos de empresas o compañías familiares. Otro ejemplo de uso ciudadano es una emisora de Ràdio l'Hospitalet con diferentes canales de música con licencia copyleft que usan comercios para tener hilo musical.

En el ámbito municipal o supramunicipal se dan casos como el del Ayuntamiento de Avinyonet donde la banda ancha no llegaba a muchos ciudadanos y donde el Ayuntamiento usa ahora la red de Guifi.net para hacer llegar Internet con la máxima calidad a todos los vecinos, conectar sus sedes y ofrecer Internet en los espacios públicos, como la biblioteca y el polideportivo.

Otro proyecto que se lleva adelante es el despliegue de fibra óptica en varios municipios de la comarca de Osona. La característica diferencial es que la operación se hace en forma de comunes. Esto quiere decir que las instalaciones quedan en propiedad de los promotores o también como donación a la fundación (opción mayoritaria). Esta red es utilizada por proveedores de proximidad de la zona para hacer llegar a los usuarios un amplio abanico de servicios de nueva generación.

Quizás con esta misma intención desde el Ayuntamiento de Barcelona se quisiera ampliar la experiencia que pueda surgir de la colaboración con la fundación, con otras entidades de la Economía Social y Solidaria como Som Conexió ETICOM, aunque admiten que “esto está todavía verde”.