La comunidad boliviana acoge al presidente Evo Morales en Barcelona
“Un grito, bolivianos que quieren volver a Bolivia”. Ante esta exhortación de Manuel Gutiérrez, presidente de FEDEBOL, Federación de Entidades Bolivianas en Catalunya, el ruido ha llenado la sala del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona (CCIB), donde cerca de 7.000 personas esperaban la intervención del presidente de Bolivia, Evo Morales. El rojo, el amarillo y el verde, los colores de la bandera de Bolivia, han dominado el recinto que acogía la feria Comunicando el cambio, con la que el gobierno boliviano pretendía mostrar a sus ciudadanos residentes en España los avances que está viviendo el país
Una de las iniciativas que han presentado para los bolivianos fuera de su país es el Centro Plurinacional de Educación Alternativa a Distancia. “Debemos garantizar el derecho a la educación de todos y todas las bolivianas, vivan dentro o fuera de nuestro país”, ha declarado el Viceministro de Educación Noel Aguirre.
Morales ha realizado una larga intervención, muy aplaudida por el público, en la que ha repasado su trayectoría y la situación de su país desde que llegó al gobierno. Ha querido destacar “desde el momento en que conseguimos crear consciencia, no ha sido difícil ganar las elecciones”.
“500 años después de la invasión donde empezó el saqueo de nuestros recursos naturales decidimos pasar de la resistencia a la toma del poder gracias a la participación de los distintos sectores sociales, era el compromiso del movimiento indígena de América”, dice el presidente.
El papel de estos sectores sociales es lo que se destaca en el manifiesto impulsado por la Plataforma Catalana de Solidaridad con Bolivia, cuya lectura estuvo a cargo de Ada Colau, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. “La historia reciente de Bolivia es un ejemplo único de empoderamiento de los movimientos sociales, para transformar desde abajo hacia arriba, unas instituciones que durante tantos años habían estado al servicio de la oligarquía y el modelo neoliberal”, dice el texto.
“Los partidos políticos clásicos perdieron el respeto de la población, y fueron reemplazados por los movimientos sociales como interlocutores entre el pueblo y el gobierno”, sigue el manifiesto. Con los movimientos sociales en Barcelona, principalmente asociaciones de bolivianos, se encontró Evo Morales antes del acto.
Ada Colau destaca que el presidente se ha mostrado muy receptivo ante las inquietudes de los distintos colectivos y asegura que ha tomado nota de la medida que ha tomado Ecuador de no reclamar la deuda hipotecaria a los ciudadanos que, tras perder su piso en España, vuelven a su país de orígen. Precisamente el presidente de Ecuador es otro jefe de estado que se ha reunido con la PAH, y Colau lamenta que, a diferencia de estos líderes sudamericanos, ni Rajoy ni Mas “se hayan dignado” a recibir a la Plataforma.
El manifiesto asegura que, en Bolivia, la relación con los movimientos sociales “se articuló en una plataforma política sólida para alcanzar el poder e impulsar una Asamblea Constituyente que ha dado la vuelta a las viejas estructuras estatales, se ha recuperado para el pueblo aquello que estaba en manos privadas, los recursos naturales, el gas, los hidrocarburos, el agua, la electricidad, las telecomunicaciones, y ha arbitrado mecanismos para que sea el pueblo, a través de sus organizaciones populares, las que dicten las normas que les gobiernan”.
En este sentido, Morales declaró, ante los aplausos de los asistentes, que “todos los servicios que son básicos para cualquier ser humano, no pueden ser de negocio privado, sino de servicio público”. Para el presidente, hay “una lucha no solo por defender nuestros recursos naturales, sino para defender nuestra identidad, nuestra forma de vivencia”.