El edil de la CUP investigado por incitar a la sedición planta a la Audiencia Nacional: “La desobediencia es el camino”
El concejal de la CUP en Vic investigado por un supuesto delito de incitación a la sedición, Joan Coma, ha plantado al juez de la Audiencia Nacional y no ha acudido a la declaración a la que estaba citado este lunes. “Tenemos ante nosotros un estado demofóbico. Nosotros hemos llegado a la conclusión que la desobediencia es el camino”, ha dicho Coma en una rueda de prensa, en la que ha explicado su agenda del día –reunión de la junta de portavoces y varias comisiones en el Ayuntamiento– porque “no nos escondemos”.
“No tenemos nada que esconder y lo tenemos todo por ganar”, ha zanjado Coma, que ha presentado ante el juez de la AN, Ismael Moreno (el mismo que investigó el caso de los titiriteros), el artículo que ha publicado este lunes en la prensa local de Vic, en el que argumenta su decisión de no acudir a declarar. “No vamos porque nos sentimos perseguidos por nuestras ideas políticas, persecución impropia de un marco mínimamente democrático”, razona Coma en El 9 nou.
Varios políticos han querido apoyar a Coma en Vic. Por ejemplo, el teniente de alcaldía de Barcelona, Jaume Asens (BComú); el diputado de Catalunya Sí que es Pot en el Parlament, Albano Dante (Podem); los líderes parlamentarios de Junts pel Sí, Jordi Turull (PDECat) y Marta Rovira (ERC); así como los diputados de la CUP, Benet Salellas, Mireia Boya y Gabriela Serra. Este mismo lunes, a las cinco de la tarde, se ha convocado una concentración de apoyo al concejal en la plaza Mayor de Vic. A la protesta se han sumado diversas entidades.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional había pedido que Coma declarara como imputado –investigado, con la nueva denominación– por un delito de “incitación o provocación a la sedición”. Según la Fiscalía, el edil alentó a desobedecer las instituciones españolas, como el Tribunal Constitucional, durante un pleno de Vic que aprobó apoyar la declaración de inicio del proceso de independencia del Parlamento del 9 de noviembre del año pasado.
Coma ha acusado al partido de extrema derecha de Josep Anglada, que cuenta con representación en el pleno de Vic, de denunciar a la Guardia Civil las palabras que han desembocado en su causa judicial. “Hay una conexión entre la extrema derecha y las cloacas del Estado”, ha valorado Coma.
Vic aprobó la moción de apoyo a la resolución independentista con 16 votos a favor de los 21 concejales que componen el pleno, correspondientes a CiU, ERC y la CUP. En esa sesión, Coma reclamó “dejar de supeditar las decisiones de nuestras instituciones a las instituciones españolas” e instó a desobedecer instituciones españolas como el Tribunal Constitucional, tal como lo hace la declaración aprobada en el Parlamento y suspendida unos días después por el mismo tribunal.
La Fiscalía considera que las palabras de Coma en el pleno incitaban a “impedir fuera de las vías legales la aplicación de las leyes y el cumplimiento de las resoluciones dictadas por el Tribunal Constitucional”. Añade que hay que tener en cuenta que Coma “es persona constituida en autoridad” y que realizó sus manifestaciones de manera pública. Subraya que en estas manifestaciones Coma llamó “expresamente” a la desobediencia a resoluciones judiciales y “se da un alcance a las mismas más allá de sus intenciones”.