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Podemos suaviza el discurso sobre el referéndum catalán sin renunciar a él

Iglesias entre a los líderes de las confluencias e IU durante un acto electoral en Barcelona

Arturo Puente

En el debate entre los cuatro principales candidatos a la presidencia del Gobierno español de este lunes, el presidenciable de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, fijó la posición de su candidatura respecto al referéndum sobre la independencia de Catalunya que lleva en el programa, sobre el que dijo que no sería una línea roja en las negociaciones postelectorales. Durante sus más de dos años de andadura como partido, la formación de Iglesias ha mostrado hasta tres discursos distintos sobre un derecho a decidir que, de una u otra manera, ha defendido siempre.

“En una negociación de Gobierno nunca hay líneas rojas”, aseguró Iglesias este lunes al ser preguntado por la cuestión en el debate a cuatro, tras lo que añadió: “Tenemos una propuesta clara pero estamos dispuestos a escuchar otras mejores”. Esta es la línea argumental que mantiene Podemos desde enero pasado, una vez comenzaron las fracasadas negociaciones para buscar una posible investidura de Pedro Sánchez.

Los partidos independentistas no han desaprovechado la ocasión para cargar contra Iglesias. Desde ERC, que quiere disputar el primer puesto a En Comú Podem el 26J, Gabriel Rufián ha opinado que el debate mostró que Iglesias “no puede” garantizar la consulta si llega al Gobierno. “Vimos a tres señores de derechas [Rajoy, Sánchez y Rivera] y a uno de izquierdas [Iglesias] que no puede”, ha valorado el republicano. Por su lado, el candidato de CDC, Francesc Homs, ha comparado a Iglesias con el cómico Groucho Marx ya que “puede cambiar en función del día” sus principios sobre el referéndum catalán.

Desde la oferta de gobierno “a la valenciana”, lanzada por Iglesias a Sánchez el 22 de enero, la formación accedió a discutir propuestas sobre el encaje de Catalunya, manteniendo que consideran que el referéndum es la mejor. Esta apertura a negociar “propuestas mejores” es, sin embargo, diferente a lo que venían sosteniendo antes del 20D.

Durante la campaña a las elecciones del 20 de diciembre, e incluso en los días siguientes a esa fecha, Podemos había señalado al referéndum como “condición sine qua non” para propiciar una investidura. Así lo aseguró Iglesias el 9 de diciembre, cuando sorprendió en una comparecencia en Barcelona con el compromiso firme de que el referéndum sería uno de los requisitos indispensables, aunque no el único, para apoyar la formación de un gobierno.

Unos días después de aquellas declaraciones, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, volvió a repetir la misma condición por parte de En Comú. En una entrevista con Catalunya Plural, Colau aseguró que su formación no investiría a Pedro Sánchez, ya que, según explicó, “solo investiremos a un presidente que se comprometa con el referéndum de Catalunya, y Pedro Sánchez no se ha comprometido”.

Derecho a decidir ligado a proceso constituyente

Dos campañas de generales, dos discursos. Pero no han sido los únicos. Antes de su pacto estable con Colau, que llevó a la conformación de la candidatura catalana En Comú Podem, alguna persona del entorno de Iglesias opinaba que realizar un referéndum en Catalunya no era posible con la actual Constitución y vinculaba la apertura de un proceso constituyente en el marco del Estado a la celebración de un referéndum.

La primera vez que Iglesias se refirió al derecho a decidir como líder de Podemos fue en noviembre de 2014, el mismo día que fue proclamado secretario general de su formación. En el discurso pronunciado ese día se refirió a “abrir el candado del 78”, una frase que después ha tenido gran recorrido y que en aquel momento identificaba con el proceso constituyente que proponía para España. En este mismo discurso, Iglesias se comprometió con la defensa del derecho a decidir de los catalanes, siempre dentro de este proceso constituyente que daría “derecho a decidir sobre todas las cosas”.

En mayo de 2015 Podemos mantenía la apuesta por abrir un proceso constituyente, sin el cual, consideraban, no sería posible que Catalunya decidiera sobre la independencia. “El derecho a decidir depende de los catalanes pero en el marco de la legalidad actual, que no he inventado yo, eso es imposible. Para que eso se pueda discutir con implicaciones en el conjunto del Estado hace falta abrir un proceso constituyente en el conjunto del país”, aseguró Iglesias en una entrevista en El Món a Rac1, en la precampaña de las elecciones municipales en las que su partido obtuvo grandes resultados en el área metropolitana de la mano de Ada Colau.

Una idea similar volvió a defender en la campaña de las elecciones catalanas del 27 de septiembre, en la que el líder de Podemos estuvo muy activo en los actos de la candidatura Catalunya Sí que es Pot. “Queremos una consulta en Catalunya, que la gente vote. Y eso sólo es articulable con un proceso constituyente”, volvió a asegurar entonces en una entrevista en la Cadena Ser.

La solución del proceso constituyente, ofrecida por Iglesias desde su nombramiento como secretario general hasta, al menos, las catalanas de septiembre de 2015, fue dejada de lado poco antes de las generales. Ahora, y desde el pasado noviembre, Podemos considera que para celebrar un referéndum consultivo sobre la independencia de Catalunya no hace falta cambiar el texto constitucional, y proponen transitar la vía del artículo 92 que, según consideran, habilitaría al Gobierno para convocarlo. 

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