El juicio por el saqueo del Palau de la Música empezará el 1 de marzo y se alargará hasta junio
1 de marzo de 2017. Después de siete años, el juicio del caso Palau ya tiene fecha de inicio. Las agendas se han cuadrado finalmente este lunes después de una reunión entre las partes procesales y los magistrados de la sección décima de la Audiencia de Barcelona, que había propuesto comenzar el juicio en enero. Está previsto que los saqueadores confesos del Palau, Fèlix Millet y Jordi Montull, el extesorero de Convergència, Daniel Osàcar, y los demás acusados declaren en las primeras sesiones del juicio.
La gran cantidad de partes (38), peritos (23) y testigos propuestos (133) hará que las sesiones del juicio se alarguen hasta finales del mes de junio. Según el calendario configurado este lunes, la última sesión del juicio debería celebrarse el día de la verbena de San Juan, pero el tribunal reservado dos días más para afrontar cualquier imprevisto. En algunas semanas habrá sesiones de lunes a viernes.
La instrucción del caso empezó en julio del año 2009 y, aunque lleva prácticamente terminada desde 2013, ha finalizado este 2016. El caso Palau tiene 16 acusados –Fèlix Millet, Jordi Montull, exdirectivos del Palau y de Ferrovial y el extesorero de Convergència, Daniel Òsacar, entre otros. También hay cinco responsables civiles a título lucrativo –entre ellos Convergència.
El fiscal del caso, Emilio Sánchez Ulled, pide 27 años y medio de cárcel para Millet y Montull, dos ilustres de la burguesía catalana. La Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), que ejerce de acusación popular, reclama a los antiguos gestores del Palau 37 y 25 años de cárcel, respectivamente. Ambos utilizaron su control del Palau de la Música para saquearlo, cargando a la institución cultural todo tipo de gastos (viajes, obras en sus casas, bodas de sus hijas) o, directamente, llevándose el dinero a sus bolsillos.
En 2009, Millet confesó haberse apropiado de 3,3 millones, aunque según el instructor el expolio del Palau asciende a 18 millones. De ellos, más de nueve no se sabe dónde están porque Bancaja (ahora integrada en Bankia) y Caixa Manresa y Caixa Catalunya (ambas absorbidas desde hace unos meses por el BBVA) no proporcionaron suficiente información al juez instructor.
Además de apropiarse de fondos públicos y privados del Palau de la Música, Millet y Montull están acusados de conformar un “entramado delictivo” junto a Ferrovial y el extesorero de Convergència para la financiación ilícita de la formación entre los años 1999 y 2000, que asciende a 6,6 millones de euros. Del 4% que pagaba Ferrovial, Millet y Montull se quedaban el 1,5%, que luego se repartían 80-20, según el juez instructor. El 2,5% restante iba para Convergència. Es la otra pata del caso Palau.
Con todo, el juez instructor no consiguió dar con los nombres de los altos responsables políticos de Convergència que ejercían su influencia para que las adjudicaciones fueran a parar a Ferrovial. El fiscal pide veinte millones de euros al extesorero de CDC, Daniel Osàcar, al tiempo que plantea el comiso de los 6,6 millones al partido, que tiene las sedes embargadas por este caso. El del Palau es uno de los casos de corrupción en los que está implicada Convergència. Hasta que el partido no dé carpetazo a su periplo judicial, Convergència no puede disolver por completo sus antiguas siglas, pese a haber iniciado la denominada “refundación”.
La sección décima de la Audiencia de Barcelona será la encargada de dirimir el caso. El togado Julio Hernández Pascual será el ponente, y los otros magistrados serán José Antonio Lagares Morillo y Montserrat Comas d’Argemir, experimentada jueza progresista que también fue vocal del CGPJ entre el 2001 y el 2008. El tribunal recibió la causa el pasado 2 de septiembre: un total de 65 cajas con 102 volúmenes, esto es, 60.874 folios más la documentación de las piezas separadas.
