El retraso de Mas en el juicio del 9-N lleva al tribunal a advertir sobre medidas cautelares
Artur Mas se ha dado un baño de masas antes de declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC). El expresident, arropado por miles de personas, ha llegado casi media hora tarde a su juicio, lo que ha llevado a la sala a advertir a los abogados de que iniciaría un trámite por si alguna parte solicitaba medidas cautelares contra él.
Mas, junto a las exconselleras Joana Ortega e Irene Rigau, estaba citado a declarar ante la sala civil y penal del TSJC a las 9:00 de la mañana de este lunes. No obstante, el expresident ha llegado al Palau de Justicia a las 9:28 horas, tras saludar encima de una tarima a las miles de personas que le han arropado en la calle.
Según fuentes judiciales, el tribunal del 9-N –presidido por el presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, y completado por los magistrados Carlos Ramos y Eduardo Rodríguez– ha preguntado cuándo llegarían los acusados al ver que se retrasaban casi 30 minutos. Ante la tardanza de Mas y de las exconselleres, Barrientos ha convocado a las partes y les ha dicho que si se demoraban más allá de las 9:30, habría que convocar una vistilla para que las partes que lo desearan solicitaran eventuales medidas cautelares. Finalmente no ha sido necesario, pues el expresident ha llegado antes de las 9:30.
El tribunal sí ha llegado puntual a la sala, a las 9 de la mañana, al igual que los abogados de Mas, Rigau y Ortega, los fiscales y los letrados de las acusaciones populares (dos sindicatos policiales).
Mas, Ortega y Rigau habían salido del Palau de la Generalitat, arropados por el Govern en pleno y cargos electos de las fuerzas soberanistas, sobre las 8:20 de la mañana para dirigirse a pie y a paso lento hasta el Palacio de Justicia de Barcelona, y han hecho varias paradas por el camino, como en el Born y a su paso por el Arco del Triunfo, a cien metros del Palacio de Justicia, donde han recibido vítores y aplausos. Ahí se han subido a una tarima (ver fotografía de esta información), desde donde han saludado a los manifestantes, lo que ha hecho retrasar todavía más su llegada al juicio.