El Gobierno PSOE-Podemos afronta su prueba de fuego en el tramo final de los nuevos Presupuestos
- Están en el aire algunas cuestiones como los dependientes, la retirada de amianto, la reapertura del Hospitalito del Rey o la agricultura ecológica
Ya se ha dado, aunque con algunos baches, el primer paso. Podemos forma parte del Gobierno socialista de Castilla-La Mancha con una Vicepresidencia Segunda y una Consejería de gestión del Plan de Garantías Ciudadanas. Aunque el presidente regional, Emiliano García-Page, ha dicho en una entrevista con eldiario.es que es pronto para sacar conclusiones, lo cierto es que PSOE y Podemos se enfrentan ahora al segundo escalón del acuerdo que alcanzaron en el mes de julio para desbloquear los Presupuestos autonómicos de 2017.
Podemos rechazó su aprobación en abril, pero ahora vuelven a tramitarse en las Cortes regionales, con ese partido ya en la Junta. Tras rechazarse la enmienda a la totalidad del PP y un crispado debate en la Comisión de Presupuestos, queda el tramo más difícil, la ‘prueba de fuego’: las enmiendas parciales y su aprobación final.
Lo más probable, según fuentes del Gobierno consultadas por eldiarioclm.es, es que los dos partidos presenten enmiendas conjuntas. Así lo ha contemplado hasta ahora el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina. Es la forma más fácil y menos polémica de sacar adelante unas cuentas públicas en el octavo mes del año, para comenzar a computar en los créditos aprobados lo ejecutado a lo largo del ejercicio. Hasta ahora han estado vigentes, mediante su prórroga, los Presupuestos de 2016 pero con el techo de gasto de 2017. La duda quedará despejada a finales de semana, ya que el plazo de presentación de enmiendas culmina el próximo día 19. Después se elaborará el dictamen en comisión para su aprobación final en el pleno del 31 de agosto.
De momento, y hasta que se reúna la Comisión de Presupuestos para comenzar a tramitar las enmiendas, el texto articulado del proyecto de Ley de Presupuestos para 2017 es el mismo que se remitió como proyecto de Ley a las Cortes el pasado mes de enero. Las mismas fuentes confirman que no incorpora ninguna de las enmiendas que se presentaron durante el trámite anterior. Por lo tanto, el Plan de Garantías Ciudadanas, el “núcleo central” de las negociaciones, sigue estando presupuestado en casi 120 millones de euros. La previsión es que se pueda aumentar vía enmiendas.
Hay que recordar que el rechazo de Podemos a los Presupuestos el pasado mes de abril vino determinado, según explicó este partido, porque muchas de sus enmiendas fueron rechazadas por el PSOE. No solo las que aumentaban partidas para el Plan de Garantías sino otras que consiguió que se incorporaran al dictamen con los votos del PP: fue el caso de la reapertura del Hospitalito del Rey de Toledo, de la agricultura ecológica (donde los socialistas han adelantado que hay 8 millones de euros más para futuras ayudas), de la dependencia y de la cooperación al desarrollo, entre otras.
La retirada del amianto y la Fundación Impulsa
En cuanto al amianto, otras de las cuestiones más polémicas, en el acuerdo de García-Page con José García Molina, secretario general de Podemos y actual vicepresidente segundo, sí que adelantaron una partida de 2,5 millones para su retirada. También han anunciado más fondos para que los docentes interinos puedan cobrar su sueldo en verano.
Otra cuestión es qué pasará con la partida destinada para la Fundación Impulsa. Fue uno de los motivos de mayor tensión entre PSOE y Podemos en la tramitación anterior, debido a una enmienda de la formación morada que suponía una detracción de recursos de la fundación y que suponía, para este partido, una “externalización” de los servicios públicos. Por parte de los socialistas, su addenda más controvertida fue la referida al control financiero de la Universidad de Castilla-La Mancha.
¿Conseguirán ambos partidos ponerse de acuerdo sobre estos temas para presentar sus propuestas conjuntas? Cabe destacar que, según ha recordado el presidente del Grupo Parlamentario Socialista, Rafael Esteban, hay 500 millones de euros más para servicios y derechos de los ciudadanos. “Habrá más dinero para educación, sanidad, agricultura, dependencia o empleo, para ayudar a los que peor lo están pasando y para que los empleados públicos puedan recuperar sus derechos”, ha afirmado. Es decir, existe ese margen de maniobra para las enmiendas conjuntas.
Mientras, el PP parece haberse quedado fuera de juego. La Comisión de Presupuestos en la que el consejero de Hacienda debía comparecer para dar cuenta del proyecto de ley y que presiden los 'populares', se ha convertido esta semana en un auténtico guirigay que culminó con los diputados de PSOE y Podemos abandonando el debate debido a las acusaciones de los ‘populares’ sobre el pacto de gobierno, asimilando la situación con Venezuela y sin retractarse de las declaraciones de la diputada Ana Guarinos en las que afirmó que Podemos “está lleno de pederastas”. García-Page ha afirmado que a este partido ya solo le queda hacer “filibusterismo”.
Desde el Gobierno regional consideran que “hay tiempo suficiente” hasta el 31 de agosto para que estas y otras cuestiones se resuelvan mediante el procedimiento abreviado en las Cortes. “El proyecto que se ha presentado tiene pequeñas modificaciones en gastos sobre el anteriormente debatido, y su aprobación cumplirá con todos los trámites legales establecidos”, subrayan.
Se da la circunstancia de que el trámite tardío de los presupuestos castellano-manchego prácticamente se solapará con el inicio de negociaciones para comenzar a elaborar los de 2018. Ambos partidos han comenzado ya a esbozar las líneas generales, y el próximo Consejo de Gobierno tiene previsto dar luz verde al límite de gasto no financiero (techo de gasto) para el próximo año, y remitirlo a las Cortes regionales para su tramitación.