El Sescam busca a médicos que critiquen al PSOE para hacer un vídeo
El perfil es personal sanitario, de cuanto mayor rango mejor pero siempre personal sanitario y no administrativo, que quiera aparecer públicamente en un vídeo que preparará el Sescam para criticar al PSOE por poner un recurso al nuevo hospital de Toledo ante el Ministerio de Hacienda. Tienen que criticar abierta y expresamente tanto el recurso como al partido, para anunciar que el nuevo hospital es lo que la gente necesita y que el PSOE sólo pretende sacar rédito político de estos recursos y trabas legales, como decía la nombrada nueva gerente del complejo hospitalario de Toledo, Cristina Granados.
No obstante no va a ser nada fácil conseguir esos testimonios porque el PP ha conseguido unanimidad a la hora acumular rechazos al proyecto del nuevo hospital: todos los sindicatos sanitarios o con representación en los centros están en contra del proyecto presentado, así como todos los partidos de la oposición (en resumen: todos menos el Partido Popular), los propios profesionales y las diversas plataformas sanitarias de la región. De hecho sólo el PP avala el proyecto. Aunque todas las organizaciones están de acuerdo en que Toledo necesita un nuevo hospital y desean que el proyecto sea realidad, nadie excepto los populares apoyan la gestión público-privada del mismo.
Una vez hecho el vídeo se pretende contratar campañas publicitarias en diversos medios de comunicación afines al partido para vender las bondades del nuevo proyecto del hospital y resaltar la labor de José Ignacio Echániz en la Consejería de Sanidad, enseñando el proyecto público-privado como un triunfo del PP y del actual gobierno regional. Se exhibirá también en los centros sanitarios de la región y será editado por profesionales controlados directamente por los populares que darán las directrices de lo que quieren que aparezca en dicho vídeo.
Esta gestión es la que ocasiona unos sobrecostes de 663 millones de euros en comparación con el anterior proyecto que paralizó el PP y que se ahorraría la Junta de Comunidades de no privatizar los servicios que contempla el proyecto del PP. Además se critica el hipotecar esa gestión durante los próximos 30 años: no sólo venden la actual gestión de determinados recursos del hospital sino que la venden hasta el año 2046, sin que los siguientes gobiernos que lleguen puedan hacer nada (pagar aún más en caso de que quieran extinguir las privatizaciones del centro, costando aún más dinero).
Desde el PP se teme que los recursos encadenados interpuestos no sólo por el PSOE sino por otros colectivos (existe otro recurso presentado por la empresa de arquitectos que elaboró la obra hasta su suspensión) haga retrasar las obras y tumbe lo que consideraban desde el partido su punto fuerte para las próximas elecciones. El llegar a mayo con el proyecto del hospital aún parado sería una gran lacra electoral, tras paralizarlo el gobierno de Cospedal en enero de 2012.