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Más plazas de hotel en Toledo en la antigua fábrica de espadería Bermejo

Antiguo edificio de la espadería Bermejo de Toledo

Carmen Bachiller

El Pleno del Ayuntamiento de Toledo aprueba este jueves el Plan Especial de Reforma Interior de Mejora (PERIM) de la ordenación detallada de la antigua fábrica de espadería Bermejo, ubicado entre la Subida de la Granja, 10 y la calle Airosas, en pleno Casco Histórico de Toledo., y que incluye, además, dos solares anexos.

Es propiedad de Instalaciones Turísticas España S.A.  (empresa vinculada al Hostal El Cardenal) que presentó en julio de este año el plan de reforma al Ayuntamiento para ordenar cuatro parcelas catastrales, sin que se presentasen alegaciones. Se trata de un edificio de tres plantas con una superficie construida de 920 m2 y de otras tres parcelas se encuentran libres de edificación y valladas en la actualidad.

“Se propone una ordenación de estas parcelas para garantizar una correcta inserción de la futura edificación en el entorno”, señala el concejal, quien aclara que no se trata de un proyecto de obra sino de “ordenar y fijar los usos” del futuro inmueble.

A partir de su aprobación definitiva se podrá  iniciar la nueva construcción en la, hasta ahora, degradada zona de esta parte del Casco Histórico, y “poner al día” según el concejal una obra “paralizada desde hace años”. El inmueble tendrá tanto usos hoteleros como para viviendas, aunque eso ya dependerá del proyecto definitivo que presente el propietario.

El desarrollo del plan se llevará a cabo en tres fases. La primera pasa por consolidar la edificación ya existente (uso hotelero), la segunda tiene que ver con las futuras edificaciones en las parcelas ahora vacantes y se trata de la ampliación y conexión de usos y niveles actual del Hostal el Cardenal con las nuevas edificaciones, también de carácter hotelero. En una  tercera fase se construiría sobre la cuarta parcela vacante, aún sin definir, y que podría dedicarse a apartamentos turísticos.

“El Casco Histórico sigue vivo y su población se ha mantenido desde 1996”

Teo García cree que “lo importante es que el Casco Histórico sigue vivo y que se pueden compaginar distintos usos”. Contempla su evolución mirando 20 años atrás para afirmar que “su población no ha descendido porque en 1996 era de 10.413 habitantes y en 2016 de  10.447. Algo que pone de manifiesto que se ha mantenido frente al mantra que habla de continuo descenso poblacional”.

Un reciente estudio conjunto realizado por la Universidad de Castilla-La Mancha en colaboración con el Ayuntamiento de Toledo refleja que el Casco Histórico encabeza el ranking de preferencias de alquiler en la ciudad y es uno de los tres barrios predilectos para comprar vivienda.

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