Facebook censura la Venus de Willendorf, una escultura de hace 30.000 años
A Facebook no le gustan los desnudos. No importa si es la portada de Marisol en Interviú 40 años después, los cuadros del pintor italiano Amedeo Modigliani o, como en este caso, la Venus de Willendorf de hace 30.000 años que forma parte de una colección en el Museo de Historia Natural de Viena.
El caso se produjo el pasado mes de diciembre cuando Laura Ghianda, autodefinida como artivista, subió una instantánea de la obra que fue compartida 7.000 veces. “Facebook censuró la inserción de una de mis publicaciones porque... usé una imagen ”pornográfica peligrosa“ de Willendorf”, recogía la usuaria en su perfil.
Posteriormente, Guianda envió un mensaje a los administradores de la red social para solucionar lo que, según ella, es un fallo de su algoritmo. La única respuesta que recibió fue que reenviarían la consulta al equipo y que, mientras tanto, le invitaban a “leer el sitio web dedicado a las regulaciones”.
La repercusión de la noticia llegó hasta el Museo de Historia Natural de Viena, que se sumó a las críticas declarando que “no lo van aceptar” porque “la Venus debe permanecer desnuda”.
Como recogen en The art newspaper, Christian Koeberl, director general de la institución, se pronunció sobre ello el pasado mes de enero: “No hay motivo para cubrir la Venus de Willendorf y ocultar su desnudez, ni en el museo ni en las redes sociales”. Dos meses después del incidente, la polémica continúa viralizándose. Especialmente, después del artículo publicado este martes por medios internacionales como el Daily News.
No es la primera vez que el algoritmo de Facebook es puesto en duda. De hecho, en 2011 también censuró a un ciudadano francés por colgar en su cuenta el cuadro El origen del mundo, pintado por Gustave Courbet en 1866.
Si bien las normas de la comunidad de Facebook prohíben las publicaciones en las que se vea un pezón, o explícitamente más sexuales, la línea de qué se censura sigue sin estar del todo clara. Hace un tiempo rectificó y ahora permite imágenes de mujeres amamantando o que muestren cicatrices de una masectomía.
Como indican, también permiten fotografías de pinturas, esculturas y otras obras de arte. Pero, como refleja el caso de la Venus de Willendorf, el algoritmo no siempre acierta.