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La “rueda de las televisiones”: un negocio de más de 50 millones al año

Imagen promocional del programa Esmúsica, en TVE

Vanesa Rodríguez

Una canción libre de derechos, un tuneo mínimo de la misma y a la “rueda de las televisiones”. Así funcionaba el fraude contra el que la Policía ha desplegado una operación en la que hay ya al menos 18 detenidos. En la trama, editoriales musicales, autores desconocidos, socios de la SGAE, testaferros e intermediarios de las cadenas de televisión se repartían los pingües beneficios que generaban por derechos de autor canciones mediocres en programas que nadie veía y en ocasiones apenas se escuchaban.

El escándalo fue destapado por Ignacio Escolar en 2013 en un amplio reportaje en Vertele. En él se detallaba el mecanismo de la “rueda” y cómo varias productoras se lucraban con esta estafa de la que las televisiones se llevaban también tajada. Por aquel entonces, la SGAE ya abrió varios expedientes para tratar de frenar estas prácticas.

Los implicados tomaban canciones de dominio público, como pueden ser obras de Mozart o Verdi, les hacían mínimas modificaciones y las difundían en programas de televisiones públicas y privadas que se emiten de madrugada.

Estos “falsos arreglos sobre obras de dominio público” generaban derechos de autor en una trama de la que se habrían beneficiado varios autores, editoriales musicales y cadenas de televisión.

¿Y la SGAE no verificaba el registro de estas canciones? Según el reportaje publicado en 2013, los músicos cuando registran una partitura presentan una declaración jurada de que su obra es original. No está definido por ley la cantidad de cambios que hay que registrar para generar una nueva obra y fuentes de la SGAE reconocían entonces que es tal la cantidad de solicitudes de registro de obras que reciben diariamente, que sus expertos musicales no tienen tiempo ni capacidad técnica para comprobar su autenticidad.

La investigación policial comenzó a raíz de la denuncia de Coalición Autoral, una asociación de autores que agrupa a más de 300 socios de la SGAE que luchaban por combatir esta situación. La Coalición denunció en 2014 la estafa que hacía que en la lista de los músicos que más dinero cobraban de la SGAE no apareciera ni uno mínimamente identificable por el público, ya que eran todos músicos que trabajaban para la “rueda de las televisiones”.

La mayor fuente de ingresos

Las televisiones se han convertido en los últimos años en la mayor fuente de ingresos de la SGAE. En 2012 fueron 103 millones, que llegaron a suponer prácticamente la mitad del total. Según datos de 2015, su última memoria anual, la entidad recaudó unos 88 millones a través de las televisiones públicas y privadas de una facturación total de 218 millones. Por comparar, los conciertos generaron el mismo año 20 millones en derechos de autor y el montante por la venta de discos de todo el año fue de solo 8 millones.

Gran parte de ese dinero recaudado en derechos de autor por la música en televisión, según las fuentes el porcentaje varía entre el 50 y el 70%, provenía de los programas de la “rueda” emitidos de madrugada, que no llegan al 0,5% de la audiencia.

Fuentes cercanas a la SGAE cifran para eldiario.es en más de 50 millones anuales el negocio de los derechos de autor generados a través de estas canciones fraudulentas. Añaden que hubo autores que se llegaron a embolsar más de un millón de euros al año por sus pseudocomposiciones.

Las mismas fuentes señalan además al Ministerio de Cultura como “responsable subsidiario” del fraude, ya que denuncian que eran conocedores desde hace tiempo de la trama.

Cada minuto de difusión musical en televisión puede generar hasta 200 euros en derechos de autor. Teniendo en cuenta la duración de estos programas y que una misma pieza puede llegar a emitirse varias ocasiones en un año en distintos horarios, las ganancias que se lograban eran millonarias.

Basta con echar un vistazo a la actual parrilla televisiva para conocer la calidad y duración de este tipo de programas que copan las madrugadas. TVE es música se emite diariamente en La 1 y La 2 hasta las 6.00 de la mañana. Antena 3 y La Sexta programan durante horas Minutos musicales, y en Telecinco y Cuatro Miramimúsica se puede seguir de 3.15 a 6.25.

De las teles a la SGAE y vuelta a las teles

Según ha informado la Policía en una nota de prensa, los investigados tenían intermediarios en las televisiones que facilitaban la emisión de estas canciones a cambio de un porcentaje de la tajada de los derechos, “así como de una contraprestación económica por su labor”. Con estos acuerdos en torno a los derechos de estas obras, las cadenas se convertían en titulares de los derechos de autor de las canciones que les habían cedido.

La SGAE tenía que pagar en sus liquidaciones semestrales un retorno por estos derechos de autor a quien figurara como titular, ya fueran autores, televisiones, productoras o testaferros. En la “rueda” todos los implicados acababan así obteniendo beneficios en esta estafa de la propiedad intelectual.

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