Fabra acosa a sus imputados por un sondeo que deja al PP sin opciones de gobernar
El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, intenta marcar la agenda política valenciana con la expulsión de sus diputados que afronten juicios por corrupción acuciado por la necesidad. Los últimos sondeos que ha conocido dan al PP el peor resultado de los últimos veinte años: conseguirían apenas entre 30 y 32 escaños en las elecciones autónomicas de 2015, hasta 25 menos que ahora.
Con ese resultado, el PP no tendría ninguna opción de seguir gobernando la Comunidad Valenciana. Ni siquiera un eventual pacto con UPyD, que de no tener representación conseguiría 10 o11 diputados, le valdría a Fabra para seguir en el cargo. El sondeo, desvelado por Levante-EMV en su edición papel, va en línea con los publicados por eldiario.es o el realizado por el PSPV. El desplome del PP se confirma e incluso se acentúa.
El PSPV, pese a conseguir el peor resultado de su historia, sería el segundo partido más votado, a poca distancia de los populares, con 28 o 29 escaños. Compromís y EU se afianzarían en las Cortes, con 14-16 y 12-13 escaños respectivamente. Un tripartito, la alianza entre los 3 partidos de izquierda demonizada por el PP, sería aritméticamente posible.
Otras combinaciones, a priori más extrañas, también. Por ejemplo, una alianza de PSPV y EU para gobernar sin Compromís y con el apoyo externo de UPyD. Todo son, sin embargo, elucubraciones con mayor o menor base. Ninguno de estos cuatro partidos quiere entrar, a 14 meses de las elecciones, en cálculos electorales.
En círculos políticos ya se había atribuido el cambio de política de Fabra respecto a sus diputados supuestamente corruptos a las encuestas, al miedo a la derrota. De hecho, la oposición ha reclamado insistentemente al Consell la difusión pública de los sondeos pagados con dinero público, 240.000 euros en dos años para hacer “estudios trimestrales de opinión pública”. De momento, sin éxito.