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Fcapa responde a Marzà, “los conciertos educativos no son un privilegio gracioso”

El conseller de Educación, Vicent Marzà

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Valencia —

La Federación Católica de Asociaciones de Padres de Alumnos de Valencia (Fcapa) ha respondido al conseller de Educación, Vicent Marzà, quien este lunes aseguraba que “se ha acabado la barra libre de los conciertos educativos”. Así, el colectivo católico recuerda al titular de Educación que los conciertos educativos “no son un privilegio gracioso que concede la Administración a los padres sino un instrumento para el ejercicio de un Derecho Constitucional”.

Así, reiteran que el derecho a la libertad de educación está reconocido, “no otorgado, por la Constitución Española (art. 27.3: «Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones»), por la Declaración Universal de los Derechos Humanos (art. 26.3: «Los padres tienen derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos») y por la Ley Orgánica de Educación, que tanto defienden (art. 1.q) «La libertad de enseñanza, que reconozca el derecho de los padres, madres y tutores legales a elegir el tipo de educación y el centro para sus hijos, en el marco de los principios constitucionales.») y otras muchas normas y tratados internacionales”.

De este modo, acusan a Marzà de pretender, “una vez más, violentar ese derecho”, al tiempo que añaden que “con un lenguaje más propio de un mitin de Compromís, del STEPV o de Escola Valenciana, el conseller, olvidando que el cargo institucional que ostenta le convierte en conseller de todos y para todos, ha arremetido, de forma totalmente injusta, equivocada e injustificada, contra los conciertos educativos”.

En este sentido, explican que: “injusta, porque desprecia los derechos de las familias; equivocada, porque ignora la realidad –mayor demanda social de educación concertada, ahorro para las arcas públicas- y se sustenta solo en planteamientos ideológicos; injustificada, porque su ataque no tiene base legal, ni social, ni pedagógica alguna”.

Además, explican que la enseñanza concertada “no es ni subsidiaria ni complementaria de la enseñanza pública. La Ley Orgánica de Educación (art. 108.4: «La prestación del servicio público de la educación se realizará, a través de los centros públicos y privados concertados.»), después de haber señalado la existencia de un único sistema educativo, indica que éste se puede prestar de dos formas, pero ni establece orden de prelación alguna, ni determina la existencia de dos sistemas paralelos, ni nada parecido. ¿Podría indicar el Señor conseller una sola norma jurídica vigente en la Comunidad Valenciana que establezca que la enseñanza concertada es subsidiaria, subordinada o complementaria de la enseñanza pública?”

“Ambas -prosiguen- son sostenidas con fondos públicos, y ambas con los impuestos de todos los valencianos. Los ciudadanos que, en uso de nuestro derecho, hemos optado por la enseñanza concertada también pagamos impuestos para el sostenimiento de la pública, y no solo al revés como parece quiere dar a entender el Señor Conseller. La única diferencia es que la enseñanza concertada cuesta mucho menos dinero a las arcas públicas. Todos los centros concertados cumplen una función social, todos y no solo algunos. La expresión ”barra libre“ es, además de desafortunada e impropia, radicalmente falsa”.

Fcapa se seguirá oponiendo, “con todos los medios que le ofrece el Estado de Derecho, cívica, pacífica y democráticamente a la expropiación a los padres del derecho a la libertad de educación”, concluyen desde la federación católica.

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