Los excesos de un político insolidario

De insultos a sus vecinos a burlas a los discapacitados pasando por protección de actitudes fascistas. Estas son las perlas que atesora Alfonso Rus, presidente de la Diputación de Valencia, alcalde de Xàtiva y presidente provincial del PP. Pero también es presidente del club de fútbol de su ciudad, el CD Olímpic, que milita en la Segunda División B, y de aquí ha aflorado la última tempestad, en negarse a hacer un minuto de silencio por el fallecimiento de un jugador

El portero del Girona B, Nil Marín, falleció en un accidente de tráfico el pasado sábado, y el equipo gerundense del Llagostera, rival del Olímpic el domingo, solicitó hacer un minuto de silencio en su memoria, pero la negativa de Rus encendió las redes sociales y el fútbol catalán.

Desde el equipo de Xàtiva afirman que el presidente no sabía nada porque llegó poco antes del partido y que fue el delegado, quien después de valorarlo con los árbitros, comunicó que no se realizaría el homenaje al joven catalán de 20 años muerto en accidente de tráfico. Pese a que sí se ofreció esta justificación en medios de comunicación estatales, no se tuvo la misma actitud con los catalanes, afirmando que este lunes se emitiría un comunicado oficial.

Pero desde el Llagostera ofrecen una versión radicalmente diferente. Asegura su presidenta, Isabel Tarragó que el presidente del Olímpic les dijo que no se haría el minuto de silencio, y que si tan importante era para ellos que lo hicieran en el próximo partido en casa.

No obstante insisten desde fuentes cercanas a Alfonso Rus que la presidente no hizo ningún comentario a Rus por el hecho durante el partido, y que esta sí que pidió disculpas al presidente del Olímpic por el lanzamiento de una botella al dirigente del PP, por parte de un jugador del Llagostera molesto con la situación.

Con este presunto último gesto insolidario el dirigente del PP corona un largo historial que se ha caracterizado por sus comentarios insultantes y fuera de lugar. A los músicos de su municipio les llegó a llamar “hijos de puta” porque eran “más rojos que un pavo”. Contra sus rivales políticos ha llegado a decir que están “locos” en los municipios que se vota a Izquierda Unida, y a los profesores que hicieron una protesta en Valencia les espetó en un mitin que eran unos “gilipollas” y que había que “rematarlos” políticamente.

Pero las lindeces en los mítines también las ha llegado a dirigir a sus votantes, a quienes tildó de “burros” por creerse sus promesas electorales, y tras la última victoria electoral animó a los militantes del PP a celebrarlo con “champán y mujeres”.

Otras salidas de tono de Rus tuvieron como víctima a los discapacitados, ya que en la inauguración de un espacio verde este colectivo protestó por no haber adaptación para que ellos lo usen, y les instó burlonamente a que accedieran “con cuerdas”. Criticado fue también que se negara a conceder la medalla de la ciudad de Xàtiva al cantautor Raimon en el 50 aniversario de su carrera soblos escenarios.

Finalmente Rus también ha estado salpicado por polémicas vinculadas al franquismo. Así del PP de Xàtiva fueron las primeras imágenes de jóvenes en actitudes fascistas que salieron a la luz este verano, incluso el propio presidente de NNGG local. Pero además cabe recordar que su ciudad mantiene los honores que le dio a Franco durante la dictadura, pese a que en reiteradas ocasiones se ha pedido que se retiren, una de tantas ocasiones terminó el debate con un “arriba España”.