Pacto Civil valenciano: autocomplacencia, propaganda y partidismo
El Pacto por la Sociedad Civil Valenciana celebrado la noche de este jueves derivó en un acto absolutamente innecesario. Los tópicos de la paella y “la millor terreta del món” simbolizaron la autocomplacencia, la propaganda y el partidismo.
Un acto que cualquier militante del PP diseñaría para una campaña electoral, donde brillaron por su ausencia la autocrítica y el valenciano (hubo más valenciano en el himno regional, que se cantó al final, que en la hora y poco que duró el acto).
Un acto que mezcló un vídeo de publirreportajes de empresas valencianas y de turismo, con la banal imagen de “somos un pueblo moderno”, trufado con irrelevantes intervenciones de los personajes invitados para representar a la sociedad civil. Y la intervención de los políticos, Rita Barberá y Alberto Fabra, fue irremediablemente política y partidista, con reivindicaciones únicamente testimoniales.
Por orden de intervención la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, tardó poco en acusar a “otros” de querer desprestigiar la imagen de la Comunitat Valenciana (primer dardo a la oposición progresista), lamentó la crisis “feroz” por haber arruinado la imagen valenciana que llegó a ser “modelo para toda España”. Y tras pedir una “financiación justa” y defender la señas de identidad, reivindicó una “España unida”.
El presidente de Cruz Roja, Fernando del Rosario tuvo un discurso humilde, discreto, defendió a los sectores más pobres, pero no dio para más.
La única reivindicación más firme de mejora de la financiación llegó de Javier Quesada (profesor del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas), afirmando que el sistema era “discriminatorio” aunque “involuntario”. También quiso distinguir “endeudamiento” de “despilfarro”, y que cada uno haga su lectura; acabó alertando de “los vientos de poniente”.
El Presidente de Ford vino a hablar de Ford, nada más.
Una de las intervenciones más esperadas fue la de la presentadora de televisión Cristina Tárrega, dejando para la posteridad su frase (de carga de profundidad política indudable) “tu Andalucía no está como mi Comunidad Valenciana”, que afirma ha espetado a su marido, y también criticó que algunos quieren “tirar la imagen de los valencianos por tierra”. No obstante, pese a que dejó claro que se siente “muy valenciana”, recordó que se tuvo que ir a Madrid a triunfar en televisión.
Finalmente a Núria Roca se la vio superada, posiblemente arrepentida de su defensa de la participación en el acto. La única que intervino en valenciano amagó con algo de autocrítica pero frenó. Sólo pudo llegar a pedir unidad y desear suerte a los políticos.
El publirreportaje empresarial y turístico (en castellano, y también en inglés en algunos subtítulos) precedió al President Alberto Fabra.
Entre sus primeras palabras Fabra lamentó que la crisis “ha tumbado muchos sueños”, pareciendo querer disculparse por liquidar la Fórmula 1 liquidar la Fórmula 1. Continuó parafraseando a Rita Barberá criticando que algunos han querido “desprestigiar” a la Comunitat Valenciana. Llegó a calificar el acto de “hito” (claro, el nivel se mide dependiendo de la altura política que se tiene) y aseguró sin ruborizarse que el acuerdo era “de todos y para todos, buscando el consenso”.
Con el himno regional y el himno de España (para no perder las costumbres) se cerró el acto público, con más sensación de vergüenza que de orgullo para muchos de los asistentes.
Fiesta ‘Halloween’
Los partidos de la oposición anteriormente criticaron muy duramente el acto organizado por la Generalitat llegando a ser tildado de “fiesta de Halloween” por el portavoz adjunto del PSPV en les Corts, Rafael Rubio. Por su parte desde Compromís Juan Ponce ha lamentado que “se ha cambiado a los sindicatos por Cristina Tárrega”.
También desde Compromís su síndic Enric Morera ha criticado que se haya invitado a Ford España como empresa referente cuando esta tributa en Madrid, el dirigente nacionalista ha reclamado “que pague los impuestos aquí porque del dinero de I+D valenciano sí que cobra”.
Por su parte Lluís Torró, de EUPV, ha preguntado a Fabra “¿Qué entiende usted por un acto con la sociedad civil?”, sentenciando “¿cree que un documento de la presidencia de la Generalitat sin buscar consenso con nadie, que no ha querido firmar ni la patronal, ni los sindicatos, ni las universidades públicas, es lo que la sociedad valenciana necesita y quiere?”.
