Así será la plaza de la Reina: Peatonal, verde, con veto a nuevas terrazas y con baños públicos y una fuente

Uno de los proyectos que sin duda marcarán la legislatura del tripartito que dirige el Ayuntamiento de València de la mano de Joan Ribó comenzará a tomar forma en breve.

La remodelación y peatonalización de la plaza de Reina supondrá una prueba de fuego tanto por el cambio de paradigma que supondrá en materia de movilidad como para comprobar la efectividad del proceso participativo en el que se basará la actuación.

Al respecto, el concejal de Participación, Jordi Peris (València en Comú), ha informado a eldiariocv.es que una ve finalizada esta consulta denominada Participa Reina!, se ha elaborado un documento final con las peticiones ciudadanas que han surgido de las entrevistas personales, encuestas online y talleres de debate que se realizaron en los pasados meses de septiembre, octubre y noviembre.

Según Peris, “en todo este proceso han participado vecinos, comerciantes, hosteleros, fallas, taxistas, EMT y todo colectivo o particular que de alguna manera tiene vinculación con la actividad del entorno”. Además, se ha abierto “la posibilidad de que cualquier ciudadano de Valencia pueda aportar sus opiniones o ideas a través de la web Participa Reina!”.

De esta forma, el equipo de arquitectos que gane el concurso para la redacción del proyecto técnico deberá incluir todas las propuestas que recoge el mencionado documento. La redacción del proyecto se ha licitado por 174.800 euros y está previsto que se adjudique en mayo.

“Hasta entonces, se creará una comisión de seguimiento formada por un representante de cada colectivo que ha intervenido en el proceso participativo; esta comisión se irá reuniendo con los arquitectos para comprobar que todas o la mayoría de las propuestas ciudadanas han quedado plasmadas; si alguna es técnicamente inviable, deberán justificarlo”, ha explicado el edil.

El conjunto de la actuación, incluyendo la redacción del proyecto, el proceso participativo y la ejecución de las obras costará 5 millones de euros.

En todo el proceso han ido de la mano tanto la concejalía de Participación como la de Movilidad, que dirige Giuseppe Grezzi (Compromís), encargada de gestionar y coordinar las obras: “Está previsto que los trabajos arranquen en 2018 y que duren un año y medio”, ha comentado Peris.

Pero, ¿cuáles han sido las peticiones ciudadanas que deberá recoger el proyecto y que definirán la futura plaza? Estas son las más llamativas:

Vegetación: La plaza deberá disponer de zonas verdes que permitan regular la temperatura, disminuir la polución y atenuar el ruido. Los árboles deberán ser de hoja caduca (siempre y cuando no suponga un gasto excesivo en limpieza), de bajo porte para no tapar los monumentos y deberá haber vegetación aromática. Además, se mantendrán algunos de los árboles existentes, como la carrasca, el olivo y el roble.

Terrazas: La idea es buscar un equilibrio entre el espacio dedicado a las terrazas y a la vida cotidiana. Para ello no se concederán nuevas licencias y se marcará el suelo para que no se amplíen las existentes, lo que implicará añadir un artículo específico para la Plaza de la Reina en la ordenanza. En cuanto a la disposición de las terrazas, deberán estar todas, bien agrupadas en el centro de la plaza o bien rodeando el perímetro y la tipología de las mesas y sillas serán uniformes.

Iluminación: Adaptar el alumbrado a las necesidades lumínicas para evitar contaminación con lámparas bien orientadas y con luz blanca que no sea dispersa, luz integrada en el mobiliario e iluminar la Catedral, la calle de la Paz y Santa Catalina.

Suelos y pavimentos: La plaza irá en un único nivel de forma que no haya rampas ni escalones y sea lo más accesible posible. Incluirá pavimentos seguros que permitan diferentes usos. Deberán ser antideslizantes, una parte ignífuga en la que se plantará y quemará la falla del Tío Pep, definir una trama de pavimentos y suelos que permitan una lectura histórica de la antigua traza urbana, que el pavimento esté vinculado a las calles adyacentes y disponer en el suelo o en vertical de placas informativas.

Mobiliario: Debe facilitar el uso del espacio de forma intergeneracional, la estancia, la reunión o el juego para diferentes edades para que sea un lugar de socialización más que un lugar de paso. Así, deberá habilitar zona de bancos, sombras y mesas. El mobiliario será flexible para que permita habilitar actividades de tipo cultural, siempre en unos horarios que permitan el descanso de los vecinos.

Recogida de basura: Los contenedores se eliminarán de la plaza por razones estéticas e higiénicas. Así, se dispondrá de un sistema soterrado que podría incluso incluirse en el interior del aparcamiento.

Construcciones efímeras: La plaza deberá incluir un sistema de anclajes, toma eléctrica, etc.. que permita el montaje y desmontaje de estructuras que permitan configurar escenarios o mercados y mercadillos, de menera que se dignifique su imagen y que sea uniforme.

Fuente: Disponer de uno o varios puntos de agua que den frescor al ambiente mediante fuentes sencillas para beber y puntos de agua que emergen del suelo.

Carga y Descarga: Se plantea establecer un horario fijo y unos puntos de carga y descarga, solucionar un sistema perimetral a la plaza y tener en cuenta el peso y altura de los vehículos.

Carril bici: Resolver un recorrido de carril bici por el entorno de la plaza pero no por dentro de la misma. Ubicar paradas de bici en relación con otros medios de transporte público y con el aparcamiento subterráneo.

Recuperación de espacios en desuso: Recuperar el solar del Micalet y la Casa del Relojero para un equipamiento cultural, así como dar usos provisionales a los solares vacíos del entorno.

Información: Ofrecer información a los viandantes mediante paneles, mapas interactivos y una oficina de información de acogida al visitante.

Baños públicos: Disponer unos baños públicos en la plaza limpios, vigilados, adaptados y accesibles. Estarán integrados en la plaza o vinculados a otro equipamiento como la oficina de información o el equipamiento cultural.

Aparcamiento: Garantizar a los residentes el acceso a los aparcamientos existentes y resolver los accesos al aparcamiento subterráneo. En este sentido, se propone crear en este parking un espacio vigilado para bicicletas. Las rampas de entrada y salida estarán preferiblemente en la calle de la paz y en la calle San Vicente.

Propuestas de movilidad: La movilidad ha sido uno de los temas estrella del proceso participativo. Algunas de las propuestas que han quedado plasmadas en el documento han sido la recuperación de la línea 5b por el interior de Ciutat Vella, convocar un concurso de diseño para las paradas de transporte público que deberán incluir sombras, cambiadores, wifi, recarga de móvil, información para invidentes, etc... Instalar las paradas de bus y taxi en las calles adyacentes.