Sólo el PP 'pasa' de los vecinos del Cabanyal
Los principales partido que concurren a las elecciones municipales en la ciudad de Valencia -a excepción del PP- (PSPV, Compromís, EU, Ciudadanos, UPyD y València en Comú) han firmado este martes, junto a la Plataforma Salvem El Cabanyal y la Associació de Veïns i Veïnes Cabanyal-Canyamelar, un “documento de consenso” frente al Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de este barrio y la política urbanística del gobierno municipal de Rita Barberá y en favor de la rehabilitación y la participación ciudadana.
El texto se ha presentado y se ha rubricado en un acto celebrado en el Centre Octubre de Cultura Contemporànea de Valencia al que han asistido los responsables de estas dos entidades vecinales y los candidatos a la Alcaldía de las citadas formaciones, quienes han coincidido en destacar la “importancia” de este manifiesto por el “compromiso” que representa con el Cabanyal, por la “esperanza” que supone para sus vecinos y por plantearse como un ejemplo de “diálogo” en favor del “sentido” y del “interés común”.
Asimismo, han indicado que con este documento llega “el punto y final” para la política “de degradación consciente del Cabanyal” de Rita Barberá y del PP y comienza a verse el “empezar de una etapa nueva” para este barrio basada en la “sostenibilidad”, la “participación” y la “transparencia”, la economía local, las dotaciones públicas y la recuperación urbana.
El manifiesto, que señala que éstos son los “criterios generales de actuación” que se han marcado quienes lo suscriben, se aprobó en la asamblea general de Salvem El Cabanyal del pasado 18 de febrero “como expresión firme de su compromiso con la rehabilitación, el respeto y la protección del patrimonio del conjunto histórico del Cabanyal”.
Con la asunción de este texto las entidades vecinales y los partidos que lo respaldan defienden que “las primeras actuaciones urgentes” de carácter “social y urbanístico” que se adopten en esta zona de la ciudad “estén dirigidas a restituir unas condiciones de vida dignas a sus vecinos y vecinas”. Igualmente, reclaman que estas decisiones “den solución a la situación provocada por el proceso de degradación” de este entorno.
“Para salir de la situación actual es una tarea fundamental comenzar a pensar en el bienestar cotidiano del vecindario y en soluciones definitivas para el conjunto histórico protegido”, indica el “documento de consenso” en el apartado de propuestas de futuro para el barrio. Así, recoge que “la gestión prudente del ambiente territorial del Cabanyal-Canyamelar ha de ser el elemento central de un nuevo debate ciudadano, un debate democrático donde participen todos los actores implicados, especialmente, los que tienen menos capacidad para hacer oír su voz”.
En este punto, el documento habla de un “horizonte de esperanza” y de una “nueva etapa” que sitúa a partir del 25 de mayo próximo, tras las elecciones municipales, con “un nuevo” Ayuntamiento que “impulse soluciones” a corto, medio y largo plazo para el Cabanyal-Canyamelar.
Sin exclusiones
Las entidades vecinales y los partidos que han respaldado el manifiesto se comprometen a desarrollar desde la política local “actuaciones urgentes de carácter social y sobre la utilización del espacio público y el conflicto de convivencia que ocasiona” en el barrio, y “reuniones con todos los colectivos, sin exclusiones, con la finalidad de recuperar la cohesión social, identificar problemas comunes a todo el barrio y buscar soluciones colectivas”.
En la misma línea, valoran la paralización del Pepri, que consideran “un gran éxito”, y rechazan la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez hasta el mar a través del Cabanyal, además de defender una planificación a medio y largo plazo y el trabajo conjunto “con las organizaciones de todo el frente marítimo”.
La recuperación urbana que plantean, como recoge el manifiesto pasa por “incentivar la iniciativa pública y privada en los procesos de rehabilitación de viviendas y locales” y por “implementar una estrategia participativa que supere los límites del Pepri y llegue a todo el barrio”, dando valor a “su morfología como instrumento para impulsar la cohesión en este entorno.
Interés general
El portavoz de Salvem el Cabanyal, Faustino Villora, ha valorado, como han hecho los representantes políticos, la “exitosa lucha” de la plataforma “en defensa del patrimonio” de esta zona durante años y ha apuntado que el acto de este martes es “un paso adelante” y una muestra de que puede existir “unidad de acción” en este camino. “Es una acto de reconocimiento del interés general, del interés de la ciudadanía y no de intereses partidistas” y una muestra de “cómo hacer política de otra manera, escuchando a la ciudadanía”.
El candidato del PSPV, Joan Calabuig, ha señalado que el Cabanyal es “una pieza fundamental de la ciudad, con un valor extraordinario” que hay que potenciar frente a la “decadencia” que sufre, al tiempo que ha considerado que con actos como el de este martes se ve “que la esperanza vuelve”. El candidato de EU, Amadeu Sanchis, ha valorado el “diálogo” que ha dado paso al manifiesto suscrito frente al talante “antidemocrático” del PP y ha afirmado que tras los comicios del 24 de mayo comenzará a “reconstruirse” el Cabanyal.
Por su lado, el candidato de Compromís, Joan Ribó, ha rechazado la prolongación de Blasco Ibáñez, ha dicho que hay “muchas otras formas de llegar al mar” y ha instado a situarse “frente a quienes quieren destruir”. El candidato de UPyD, Eduardo Gómez, ha apostado por proteger edificios, la retícula del Cabanyal y la forma de vida de sus vecinos y por tomar decisiones políticas atendiendo a “la realidad del barrio”.
Sentido común
El candidato de Ciudadanos, Fernando Giner, ha aseverado que la firma del manifiesto es un “claro ejemplo” de que “el sentido común no entiende de ideología” y ha asegurado que el futuro debe estar en ese camino, “en una nueva forma de hacer política”, y en atender al ciudadano, “no desde el despacho sino en la calle”. El candidato de València en Comú, Jordi Peris, ha dicho que el apoyo al manifiesto marca “el principio del fin”, “la defensa de un barrio acosado por la política del PP”, el trabajo contra “un ayuntamiento todopoderoso” y una nueva forma de actuar.