El TSJ suspende de forma cautelar el decreto de plurilingüismo
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJ) ha suspendido cautelarmente la aplicación del decreto de plurilingüismo de la Generalitat tras el recurso presentado por la Diputación de Alicante. Los magistrados eluden pronunciase sobre el fondo del asunto. Con esta decisión, dice el auto conocido este miércoles, “en absoluto se prejuzga nada de lo que pueda resolverse en su día en la sentencia que se dicte”.
La sala de lo contencioso aplica la suspensión cautelar para evitar “graves daños y perjuicios de reparación imposible para los intereses y derechos de la parte recurrente” y evitar que el servicio público resulte afectado. De aplicarse el decreto y luego ser tumbado por la justicia, “un gran número de alumnos podría ver sus derechos disminuidos en relación a la acreditación de idiomas”, explican los jueces.
El conseller de Educación, Vicent Marzà, ha quitado importancia al auto. La “sala no entra en el fondo del asunto. Presentaremos nuestras alegaciones y creemos que nuestro decreto está fundamentado, tiene el visto bueno del Consell Jurídic Consultiu y la abogacía de la Generalitat. Vamos a seguir trabajando con toda normalidad”.
El decreto de plurilingüismo sustituye las antiguas líneas (en valenciano o castellano) por un modelo estructurado en tres niveles: básico (I y II), intermedio (I y II) y avanzado (I y II). Las diferencias las marcan la distribución de horas en las tres lenguas y otros elementos de refuerzo de competencia oral. Es decir, cuántas horas se dan en inglés, en valenciano y en castellano. A más horas de valenciano (niveles avanzados), más de inglés.
El nuevo sistema parece haber sido bien acogido por los colegios públicos -más de la mitad han elegido el nivel avanzado-, especialmente en Castellón (83%) y Valencia (55%). La respuesta ha sido más tibia en Alicante. Allí, los niveles básico e intermedio han sido los mayoritarios con un 28 y un 32%, respectivamente.
Precisamente, la Diputación de Alicante, gobernada por el PP, ha recurrido el decreto. La respuesta de ese partido a la iniciativa de la Conselleria de Educación ha sido la de dar batalla sin cuartel, incluida la judicial.
En opinión de una portavoz del PP, “este decreto supone un auténtico chantaje a las familias y es absolutamente discriminatorio que aquellos padres que, con total libertad quieran que sus hijos aprendan más inglés, necesariamente tengan que tener más valenciano”.
El Consell del Botànic, con Marzà
Los grupos parlamentarios del PSPV, Compromís y Podemos, los firmantes del Pacto del Botànic, defienden sin fisuras el decreto de plurilingüismo. “Era mentira que no hubiera libertad de elección, que se iba a machacar a los niños valencianos y que se iba a priorizar una lengua sobre otra. Se ha apostado por un modelo trilingüe”, dijo el portavoz socialista, Manolo Mata.