El uso del anillo ciclista de València se dispara un 27% y reduce el tráfico
El anillo ciclista, como se conoce al carril bici que rodea la ronda interior de València (calles de Colón, Xàtiva, Guillem de Castro, Blanqueries y plaza Tetuán), no para de crecer en cuanto a número de usuarios al tiempo que empieza a notarse un ligero descenso del tráfico motorizado. Además, ha tenido un auténtico efecto llamada en el resto de carriles bici de la ciudad.
Según los últimos datos del Ayuntamiento, publicados en el apartado de movilidad de la web municipal, el número de usuarios de esta infraestructura ciclista que se puso en marcha en el mes de marzo ha crecido un 27% entre los meses de abril y octubre.
En concreto, según los mapas de intensidades medias diarias, el itinerario que rodea la ronda interior ha pasado de 18.890 ciclistas a 24.021. Por calles, la que más ha subido ha sido la calle de Colón, que registró en octubre 6.400 ciclistas, un incremento del 33%, seguida de la calle de Xàtiva con 6.600 (un 29% más), de Guillem de Castro con 7.700 usuarios (un 26% más), de la plaza de Tetuán con 1.500 (18% más) y de la calle de Blanquerías con 1.631 ciclistas (un 12,4% más).
En el mismo periodo, en todo el recorrido el tráfico motorizado ha bajado de una intensidad media diaria de 332.118 vehículos en abril a 327.474 en octubre, es decir, un 1,4%.
Por calles, la que más tráfico ha perdido ha sido la calle de Colón, que en octubre registró 36.300 vehículos, un 9% menos que en abril. En la calle de Xàtiva el tráfico se ha reducido un 6%, en la de Guillém de Castro un 1,7%. Sin embargo, en la plaza de Tetuán ha subido un 3% y en Blanquerías un 2%.
Efecto llamada en otros carriles bici
El auge del anillo ciclista ha coincidido con el incremento del uso de los carriles bici del resto de vías principales de la ciudad.
Así, por ejemplo, de abril a octubre el carril bici de la avenida de Tarongers, en la zona de la Universidad Politécnica, ha registrado un incremento del 31%, en la zona universitaria de la avenida de Blasco Ibáñez, ha crecido un 30%, el itinerario ciclista de la avenida de Aragón ha subido un 17%, y el de la avenida del Puerto, un 20%.
Otros que conectan directamente con el anillo ciclista, como el de la calle de Almassora, han tenido un aumento de usuarios del 14%, el del Pont de Fusta ha subido un 24,6%, el de las calles de Cavanilles y General Elio un 23% y del Puente del Real ha crecido un 18%.
En estas mismas vías, el tráfico motorizado ha tenido diferentes comportamientos. Así, mientras en las avenidas de Tarongers y de Blasco Ibáñez, en las calles de Cavanilles y General Elio y en el Puente del Real ha habido un incremento de vehículos del 6,4%, 1,6%, 2% y 2,3% respectivamente, en las avenidas de Aragón, del Puerto y en el Pont de Fusta ha bajado un 3,3%, un 4% y un 2% respectivamente. En la calle Almassora no ha habido prácticamente variación.
Como informó eldiariocv.es, durante el presente año la Policía Local ha puesto 203 multas por circular en bici por las aceras, lo que supone un descenso del 33,7%, lo que se explica por un mayor uso de los carriles bici.
Actualmente, el principal motivo de sanción es circular manipulando dispositivos móviles. Entre enero y octubre se han puesto 302 multas por este motivo, un 23,7% más que el año pasado.
Precisamente, la Policía Local de València realiza desde este lunes hasta el 26 de noviembre una campaña específica de control sobre los usuarios de las bicis con sanciones que pueden alcanzar los 200 euros.