Se buscan más ofertas para gestionar el Aeropuerto sin aviones de Castellón
El plazo de presentación de ofertas para gestionar el Aeropuerto de Castellón se ha prorrogado y, en vez de finalizar el 12 de diciembre, lo hará el día 23 de este mes. Así lo publica este jueves el BOE valenciano, el Diario Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV).
El Aeropuerto de Castellón, seguramente el aeropuerto más absurdamente famoso de España, deberá recibir al menos 360.000 viajeros al año para que no le cueste ni un euro al erario público. Así lo establecen las condiciones establecidas en el concurso ahora abierto por Aerocas, la empresa dependiente de la Generalitat que gestiona la instalación.
De momento, parece que las ofertas o son insuficientes o no satisfacen a la Generalitat, que ha decidido ampliar el plazo para la presentación de propuestas de empresas que puedan gestionar el aeródromo.
La Generalitat, además, conocedora de la lista de chapuzas que marcan la historia del aeropuerto, anda con pies de barro: no quiere otros fiascos para evitar salir en, por ejemplo, el New York Times.
El Aeropuerto de Castellón, inaugurado antes de las elecciones autonómicas de 2011 por Carlos Fabra, ahora condenado por fraude a hacienda, y Francisco Camps, ya defenestrado por el case de los trajes como presidente de la Generalitat, sigue sin operar. A pesar de todo, la Generalitat invertirá en él 8,6 millones de euros en 2014.
Pliego de condiciones
Según la agencia Efe, el contrato se adjudicará a la oferta económica más ventajosa de acuerdo a los pliegos de condiciones, que establecen, entre otros requisitos, que la empresa contratista deberá obtener la certificación de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea como gestor del aeródromo castellonense.
En principio, el aeropuerto deberá empezar a operar en 2014, casi tres años después de su inauguración.En este periodo, la infraestructura ha estado marcada por el escándalo, hasta el punto que la oposición ha pedido una comisión de investigación rechazada por el PP en las Corts Valencianes.
