Imelsa ha muerto, viva Divalterra
“La nueva denominación es el punto de partida para el comienzo de una nueva manera de gestionar esta empresa”, de esta forma, con el ánimo de dejar atrás la etapa oscura de Imelsa manchada por la presunta corrupción de sus anteriores máximos responsables, Marcos Benavent y Alfonso Rus, la nueva marca Divalterra ha sido presentada por sus gerentes actuales, Agustina Brines y Víctor Sahuquillo.
Los gerentes, marcando distancias sobre la anterior etapa, también han incidido en que “las empresas públicas son de los ciudadanos. Por ello, en Divalterra la transparencia no es solo un concepto: es una manera de entender la propia gestión de la empresa. Queremos que la ciudadanía conozca qué se hace con cada céntimo de dinero público”.
Sahuquillo y Brines han fijado como prioritario “el establecimiento de un plan de formación interno, que permita una mayor profesionalización y especialización de la plantilla; algo imprescindible para que las acciones que se desarrollen sigan los criterios de calidad que nos hemos autoimpuesto”. Para ello “se ha llevado a cabo un estudio interno de necesidades y recursos existentes, que nos ha permitido reestructurar las áreas de servicios de la empresa para adaptarlas a las necesidades de consistorios y ciudadanía”, han indicado.