El conflicto entre Boko Haram y el ejército de Nigeria ha provocado una crisis humanitaria en el estado de Borno, en el noreste de Nigeria.
En la capital del Estado, se concentran más de 1,2 millones de desplazados
Al menos 500.000 personas necesitan urgentemente comida, atención médica, comida y refugio
En Beni Shiekh, alrededor de un 30-40% de la población es desplazada, unas 33.000 personas, pero la cifra podría ser mucho mayor. Muchos de los desplazados viven con la población local pero muchos otros, se han asentados en edificios gubernamentales. Hay ocho campos identificados dentro de la ciudad y varios más, a las afueras. La principal fuente de ingresos para la población es recoger leña y luego venderla en la carretera. Fotografía: Ikram N'gadi.
En Beni Shiekh, alrededor de un 30-40% de la población es desplazada, unas 33.000 personas, pero la cifra podría ser mucho mayor. Muchos de los desplazados viven con la población local pero muchos otros, se han asentados en edificios gubernamentales. Hay ocho campos identificados dentro de la ciudad y varios más, a las afueras. La principal fuente de ingresos para la población es recoger leña y luego venderla en la carretera. Fotografía: Ikram N'gadi.
La desnutrición es uno de los principales problemas, especialmente para los niños. Los desplazados se han visto obligados a huir de sus lugares de origen debido a la violencia y muchos de ellos dejan sus campos de cultivo también atrás. En los nuevos emplazamientos, donde se concentran miles de personas, si hay espacio para cultivar no es suficiente. Fotografía: Ikram N'gadi.
La desnutrición es uno de los principales problemas, especialmente para los niños. Los desplazados se han visto obligados a huir de sus lugares de origen debido a la violencia y muchos de ellos dejan sus campos de cultivo también atrás. En los nuevos emplazamientos, donde se concentran miles de personas, si hay espacio para cultivar no es suficiente. Fotografía: Ikram N'gadi.
La desnutrición aguda severa puede provocar la muerte de un niño muy rápidamente. Por eso es importante detectarla y tratarla rápidamente. En Beni Shiekh, así como en las localidades vecinas de Ngamdu y Minok, MSF evalúa el estado nutricional de los menores de 5 años y los que sufren desnutrición aguda severa entran inmediatamente en el programa nutricional ambulatorio. Fotografía: Ikram N'gadi.
La desnutrición aguda severa puede provocar la muerte de un niño muy rápidamente. Por eso es importante detectarla y tratarla rápidamente. En Beni Shiekh, así como en las localidades vecinas de Ngamdu y Minok, MSF evalúa el estado nutricional de los menores de 5 años y los que sufren desnutrición aguda severa entran inmediatamente en el programa nutricional ambulatorio. Fotografía: Ikram N'gadi.
Varias madres esperan con sus hijos para la evaluación nutricional en Beni Shiekh. Muchas veces, las madres no saben que su hijo está desnutrido pero lo llevan al médico por otra enfermedad, porque lo ven más débil y enfermo. La mayoría de los niños son desplazados pero viven con la comunidad local. MSF atiende a ambas comunidades. Fotografía: Ikram N'gadi.
Varias madres esperan con sus hijos para la evaluación nutricional en Beni Shiekh. Muchas veces, las madres no saben que su hijo está desnutrido pero lo llevan al médico por otra enfermedad, porque lo ven más débil y enfermo. La mayoría de los niños son desplazados pero viven con la comunidad local. MSF atiende a ambas comunidades. Fotografía: Ikram N'gadi.
Ya Zara Alamin está con su bebé de 5 meses, con desnutrición aguda severa, en el Centro de Nutrición Ambulatoria de MSF en Beni Shiekh. Aunque este es el tipo más grave de desnutrición puede tratarse ambulatoriamente si no hay complicaciones médicas u otras enfermedades asociadas. Desde mediados de julio hasta finales de agosto, 850 niños han seguido el programa ambulatorio. Fotografía: Ikram N'gadi.
Ya Zara Alamin está con su bebé de 5 meses, con desnutrición aguda severa, en el Centro de Nutrición Ambulatoria de MSF en Beni Shiekh. Aunque este es el tipo más grave de desnutrición puede tratarse ambulatoriamente si no hay complicaciones médicas u otras enfermedades asociadas. Desde mediados de julio hasta finales de agosto, 850 niños han seguido el programa ambulatorio. Fotografía: Ikram N'gadi.
70 niños han tenido que ser derivados desde Beni Shiekh al hospital de Damaturu porque necesitan tratamiento hospitalario. Es el caso de esta niña que se recupera poco a poco de la desnutrición aguda severa. Su padre fue asesinado en un ataque de Boko Haram hace tres años y su madre se quedó a cargo de siete hijos. Sobrevive gracias a lo que mendiga su hijo mayor. Fotografía: Ikram N'gadi.
70 niños han tenido que ser derivados desde Beni Shiekh al hospital de Damaturu porque necesitan tratamiento hospitalario. Es el caso de esta niña que se recupera poco a poco de la desnutrición aguda severa. Su padre fue asesinado en un ataque de Boko Haram hace tres años y su madre se quedó a cargo de siete hijos. Sobrevive gracias a lo que mendiga su hijo mayor. Fotografía: Ikram N'gadi.
Las principales necesidades de la población en el noreste de Nigeria son la comida, la protección, la atención médica, el agua potable y el refugio. Pero además se trata de una población que ha sufrido durante años a causa de la violencia y el conflicto, y en muchos casos, no ha tenido más remedio que desplazarse para seguir con vida. Fotografía: Ikram N'gadi.