VÍDEO: Lanzamiento de botes de humo a los inmigrantes en la zona donde murieron mientras nadaban
Estas imágenes, obtenidas de los vídeos difundidos por Interior, contradicen la versión oficial de los hechos ocurridos durante el intento de entrada en Ceuta, en el que murieron 15 personas. Un análisis pormenorizado realizado por eldiario.es demuestra que al menos un bote tirado desde el espigón fronterizo de humo cayó sobre los inmigrantes en aguas marroquíes mientras nadaban con la intención alcanzar territorio español, aunque aún está por constatar si el lanzamiento procede de la Guardia Civil o de la policía marroquí. El material cae sobre la zona donde, según Interior, se produjeron las muertes.
No es la única novedad demostrada en el vídeo. Al menos una de las dos patrulleras españolas entró en aguas marroquíes, a pesar de que Fernández Díaz afirmase que no se tenía el permiso para hacerlo. Los disparos de material antidisturbios no se dirigían únicamente hacia arriba ni mantenían una distancia de seguridad de 25 metros, como defendía el ministro. No solo hubo devoluciones inmediatas de inmigrantes, algo ilegal, sino que al menos una de las personas entregadas prácticamente no podía mantenerse en pie, lo que confirma algunos de los testimonios recogidos por este periódico.
Lanzamiento de botes de humo sobre los inmigrantes
Las imágenes muestran cómo al menos uno de los botes de humo lanzados el pasado 6 de febrero cae sobre los inmigrantes mientras nadaban con la intención de acceder a territorio español en aguas marroquíes, donde según la versión oficial se produjeron las muertes de al menos 15 personas [minuto 0:55].
Teniendo en cuenta la estela de humo desprendida por este material, el lanzamiento procede del espigón fronterizo. Interior tendría que aclarar ahora si fue un agente de la Guardia Civil quien tiró este material o, por el contrario, responsabiliza de ello a la policía marroquí.
Devoluciones ilegales a quienes necesitaban asistencia
El vídeo muestra cómo la Guardia Civil expulsan a varios inmigrantes por la puerta del vallado fronterizo que divide Ceuta de Marruecos. Las imágenes reflejan como al menos uno de ellos estaba totalmente exhausto en el momento de la devolución. Aunque prácticamente no puede mantenerse en pie, un agente le empuja hacia el lado marroquí [minuto 1:24].
Algunos de los testimonios denunciaban que, aunque algunas de las personas que lograron pisar la orilla ceutí necesitaban atención mética, nadie se la proporcionó antes de ser devueltos a territorio marroquí.
El ministro de Interior reconoció que el instituto armado no prestó en ningún momento este tipo de asistencia a los inmigrantes entregados a Marruecos pero porque, según sus palabras, nadie lo necesitaba. “Las autoridades marroquíes no hubieran aceptado una entrega si alguna de estas personas hubiera llegado herida o con alguna lesión”, sentenció en la comparecencia que trataba de aclarar la actuación de la Guardia Civil. “Estas personas llegaron sin ningún tipo de lesión, y sin ningún tipo de herida”.
La Guardia Civil entró a aguas marroquíes
El ministro del Interior aseguró que la Guardia Civil no tenía permiso para entrar en aguas marroquíes y, por este motivo, no auxilió a los inmigrantes a pesar de haber visto, en palabras de Fernández Díaz, que “en muchas ocasiones los artilugios que estaban utilizando como flotadores y chalecos salvavidas se desprendían del cuerpo de estas personas, o no les proporcionaba la suficiente flotabilidad” y cómo “a algunos de esos inmigrantes que llevaban chalecos o flotadores se acercaban otros que, como consecuencia del pánico al agua que se produjo en aquel momento, se aferraban a ellos haciendo que, al no poder proseguir su marcha, tuvieran que regresar a la orilla”.
Las imágenes oficiales demuestran que al menos las dos patrulleras del instituto armado sobre pasaron el espigón y se introdujeron en aguas marroquíes [minuto 1:21]. Por su parte, la lancha neumática de la policía alauí entró a toda velocidad a zona española, muy cerca de donde se encontraba un grupo de inmigrantes nadando [minuto 0,14].
Se disparó cerca de los inmigrantes
Los vídeos reflejan cómo algunos agentes disparan material antidisturbios desde el espigón apuntando hacia abajo, directamente hacia el agua en un momento en el que varios inmigrantes nadaban por esa zona [minuto 0:38].
Por tanto, la Guardia Civil no siguió la “trayectoria oblicua” incluida en los protocolos del uso de este material, ni tampoco cumplió la distancia mínima de 25 metros que, según la versión oficial, se respetó en todo momento a la hora de disparar hacia el agua para asegurarse de que estos lanzamientos no impactasen sobre las personas que intentaban alcanzar territorio español a nado.
“Se lanzaron los medios para delimitar la traza fronteriza en el mar con la orden habitual de que siempre hubiese varios metros entre el lugar del impacto en el agua y los propios inmigrantes para no alcanzarlos. Todos los lanzamientos se hicieron desde tierra, siendo la distancia superior como mínimo a los 25 metros, de acuerdo con los protocolos de utilización de los medios antidisturbios, y la zona de impacto siempre correspondió a aguas españolas, lejos de donde se encontraban los inmigrantes”, afirmó el ministro de Interior.