Este jueves, 13 de marzo, se cumple el tercer aniversario del inicio de la guerra de Siria. Hasta la fecha, nueve millones de ciudadanas y ciudadanos sirios se han visto obligados a huir de sus casas y refugiarse lejos de las bombas de esta abominable guerra.
A través de su trabajo tanto en Siria como con los refugiados y las comunidades de acogida en los países vecinos, Oxfam ha sido testigo de primera mano de los terribles efectos de la guerra.
La organización está trabajando en la zona proporcionando ayuda de emergencia a 800.000 personas en el Líbano, Jordania y Siria.
Zakia Abdullah junto a los restos de su vivienda. Un misil Scud se estrella en el barrio de Tariq Al Aba/ Pablo Tosco/ Oxfam Intermon
Zakia Abdullah junto a los restos de su vivienda. Un misil Scud se estrella en el barrio de Tariq Al Aba/ Pablo Tosco/ Oxfam Intermon
Un grupo de personas recadta el cuerpo de una niña de 6 años entre los escobrosn de una de las viviendas del barrios de Tariq Al AbaUn misil Scud se estrella en el barrio de Tariq Al Bab./Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Un grupo de personas recadta el cuerpo de una niña de 6 años entre los escobrosn de una de las viviendas del barrios de Tariq Al AbaUn misil Scud se estrella en el barrio de Tariq Al Bab./Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Nefel Nasser, refugiada siria en el campo de Za’atari, Jordania/ Pablo Tosco/ Intermón Oxfam
Nefel Nasser, refugiada siria en el campo de Za’atari, Jordania/ Pablo Tosco/ Intermón Oxfam
El campo de Za’atari en Jordania alberga a 125.000 refugiados de los casi dos millones de personas que han huido de la guerra de Siria, en su mayoría mujeres y niños. Jordania/ Pablo Tosco
El campo de Za’atari en Jordania alberga a 125.000 refugiados de los casi dos millones de personas que han huido de la guerra de Siria, en su mayoría mujeres y niños. Jordania/ Pablo Tosco
Hamda Saleem, de 49 años, y su esposo en el campo de refugiados de Za'atari, Jordania. Ella permanece tumbada en la cama. Hace meses quedó atrapada en un fuego cruzado en su ciudad, Dera’a. Recibió tres balazos, dos de ellos en el pecho –una de las balas sigue alojada ahí– y otro en la espalda. Fue tras extraerle este proyectil cuando sus piernas se paralizaron para siempre. En uno de los rincones del container su silla de ruedas acumula polvo porque es infinitamente difícil hacerla rodar sobre la tierra repleta de socavones del campo./ Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Hamda Saleem, de 49 años, y su esposo en el campo de refugiados de Za'atari, Jordania. Ella permanece tumbada en la cama. Hace meses quedó atrapada en un fuego cruzado en su ciudad, Dera’a. Recibió tres balazos, dos de ellos en el pecho –una de las balas sigue alojada ahí– y otro en la espalda. Fue tras extraerle este proyectil cuando sus piernas se paralizaron para siempre. En uno de los rincones del container su silla de ruedas acumula polvo porque es infinitamente difícil hacerla rodar sobre la tierra repleta de socavones del campo./ Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Un grupo de niños recoge agua de un punto de distribución. El campo de Za’atari en Jordania alberga a 125.000 refugiados de los casi dos millones de personas que han huido de la guerra de Siria, en su mayoría mujeres y niños. Jordania/ Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Un grupo de niños recoge agua de un punto de distribución. El campo de Za’atari en Jordania alberga a 125.000 refugiados de los casi dos millones de personas que han huido de la guerra de Siria, en su mayoría mujeres y niños. Jordania/ Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Hospital de campaña que el ejercito marroquí ha levantado en el campo de refugiados sirios de Za'atari (Jordania). Allí nacen cada día entre 8 y diez bebés, según señalan las cifras de varias ONG que operan en terreno. La carencia de leche, frutas y verduras, una dieta desequilibrada, así como el intenso calor y el constante polvo son algunas de las dificultades que deben enfrentar las mujeres que han sido madres en el asentamiento y sus hijos./Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Hospital de campaña que el ejercito marroquí ha levantado en el campo de refugiados sirios de Za'atari (Jordania). Allí nacen cada día entre 8 y diez bebés, según señalan las cifras de varias ONG que operan en terreno. La carencia de leche, frutas y verduras, una dieta desequilibrada, así como el intenso calor y el constante polvo son algunas de las dificultades que deben enfrentar las mujeres que han sido madres en el asentamiento y sus hijos./Pablo Tosco/Oxfam Intermón
Malak acaba de dar a luz a su pequeña Diaa en el hospital de campaña que el ejercito marroquí ha levantado en el campo de refugiados sirios de Za'atari (Jordania). Fotografía: Pablo Tosco/ Intermón Oxfam
Malak acaba de dar a luz a su pequeña Diaa en el hospital de campaña que el ejercito marroquí ha levantado en el campo de refugiados sirios de Za'atari (Jordania). Fotografía: Pablo Tosco/ Intermón Oxfam
El campo de Za’atari en Jordania alberga a 125.000 refugiados de los casi dos millones de personas que han huido de la guerra de Siria, en su mayoría mujeres y niños./ Fotografía: Pablo Tosco
El campo de Za’atari en Jordania alberga a 125.000 refugiados de los casi dos millones de personas que han huido de la guerra de Siria, en su mayoría mujeres y niños./ Fotografía: Pablo Tosco
Campamentos de refugiados improvisados instalados a las afueras de las ciudades en el Líbano. / Fotografía: Pablo Tosco/ Intermón Oxfam.
Campamentos de refugiados improvisados instalados a las afueras de las ciudades en el Líbano. / Fotografía: Pablo Tosco/ Intermón Oxfam.
El centro comercial abandonado de Al-Waha, a las afuera de Trípoli, donde han llegado han llegado cerca de 130 familias sirias/ Fotografía: Pablo Tosco/ Intermón Oxfam.