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Las violaciones de derechos humanos de las que Felipe VI podría hablar en su visita a Arabia Saudí

Felipe VI y el ministro de Defensa, Pedro Morenés, visitaron Riad en enero para trasladar su pésame por la muerte del rey Abdalá

Gabriela Sánchez

“Es un viaje importante porque compartimos muchos escenarios estratégicos a nivel mundial (...). Hay muchos intereses españoles: el tren, el metro... Hay muchos intereses de España en juego”, enfatizó el portavoz del Gobierno para defender la visita del rey Felipe VI a Arabia Saudí. No citó la importancia de las vulneraciones de derechos humanos por parte de la dictadura saudí. Tampoco mencionó si la “inminente venta” de cinco fragatas a su gobierno será otro de los temas destacados del encuentro. 

Después de la cancelación de su visita el pasado mes de marzo, Felipe VI tenía programado para este fin de semana viajar a Arabia Saudí para reunirse con su homólogo Salmán bin Abdulaziz. El monarca español iba a acudir acompañado de los nuevos ministros de Exteriores y de Fomento, Alfonso Dastis e Íñigo de la Serna, aunque finalmente se ha aplazado debido a la muerte del hermano del rey saudí.

Amnistía Internacional y Oxfam Intermón piden a Felipe VI que “ejerza su influencia” para transmitir a Arabia Saudí la necesidad de “atajar las graves violaciones de derechos humanos” perpetradas por su Gobierno y la coalición saudí liderada por este país en el conflicto de Yemen.  

El portavoz gubernamental pasó por alto que los derechos humanos y los asuntos comerciales coparán buena parte de la visita oficial, según el diario El País y varios medios saudíes. Algunos de ellos son los acuerdos entre Arabia Saudí y España para desarrollar el proyecto del AVE a la Meca y el metro en la capital. También, según las mismas fuentes, el más polémico: el acuerdo comercial con la empresa pública Navantia para la construcción de cinco buques de guerra que acabarían en manos de un país que, según ha documentado Amnistía Internacional, es responsable de crímenes de guerra en Yemen.

“Esta reunión debe servir para hablar de derechos humanos para convencer al rey de Arabia Saudí de que debe dar pasos en favor a los derechos humanos”, ha insistido el presidente de Amnistía Internacional España, Esteban Beltrán. “Más allá de los negocios, los derechos humanos tienen que ponerse encima de la mesa”, insisten desde la ONG.

Estos son solo algunas de las violaciones de derechos humanos cometidas por Arabia Saudí que el monarca español podría tratar durante su viaje oficial: 

Ataques a civiles en Yemen

La coalición liderada por Arabia Saudí bombardea casi a diario a la población civil, recuerdan. Los hospitales, las escuelas o los centros de salud se han convertido en objetivo de guerra y las constantes advertencias de organizaciones como Médicos Sin Fronteras no han logrado el fin de ataques a centros médicos.

Por este tipo de bombardeos, la ONU había decidido introducir a la coalición liderada por Arabia Saudí en un listado de grupos responsables de ataques a niños pero su nombre desapareció de la “lista negra” en el último momento. Riad exigió de forma contundente su retirada y consiguió su objetivo: el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon admitió haberlo eliminado por presiones por parte de algunos gobiernos que amenazaron con retirar los fondos para ayuda humanitaria. Es un ejemplo más de la fuerte influencia diplomática de Arabia Saudí, que también pesa sobre el gobierno y la monarquía españolas. 

Desde el 25 de marzo de 2015, Arabia Saudí inició la devastadora campaña de bombardeos aéreos en Yemen. A los estragos causados por los propios ataques se suman aquellos derivados del bloqueo: la crisis se ha disparado aumentando los ya altos niveles de malnutrición existentes en el país. No solo faltan los alimentos, también el agua. 

Según Amnistía Internacional, más de 7.000 personas han muerto en el conflicto de Yemen. Más del 50% son civiles. 

Las fragatas que Navantia pretende vender

De esta base de vulneraciones de la legislación internacional parten Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y Oxfam Intermón para exigir la suspensión de las negociaciones con la empresa pública española Navantia en la venta de cinco corbetas por valor de alrededor de 2.000 millones de euros. Estas ONG denuncian el riesgo de que Arabia Saudí utilice las fragatas en el bloqueo naval que está asfixiando a los yemeníes.

“Este acuerdo es ilegal en base al Tratado sobre el Comercio de Armas de la ONU, ratificado por España”, explica a eldiario.es Alberto Estévez. “Un Estado no puede firmar una venta de armas si tiene el conocimiento de que puede utilizarse para cometer crímenes de guerra. El Gobierno español sabe perfectamente que la coalición saudí está bombardeando mezquitas, escuelas, hospitales...”, añade.

Según explica el experto en armas, el gobierno ha mantenido la venta de munición en el congelador durante meses y ahora se teme que la visita oficial  acelere las negociaciones para desbloquear el contrato. 

Pena de muerte y represión a disidentes

Desde noviembre 2013, Arabia Saudí ha acelerado su cifra de ejecuciones: al menos 350 personas han sufrido la condena capital, según Amnistía Internacional. Cien de ellas han tenido lugar en 2016. 

La ONG recuerda que Ali al Nimr, se encuentra en espera de ejecución tras haber sido detenido por su participación en actos de protesta. “Está condenado a muerte por delitos cometidos cuando era menor de edad, algo que prohíbe la Convención de Derechos del Niño”, denuncia Carlos Escaño, experto en Arabia Saudí de Amnistía Internacional España. 

Otra de las denuncias que diferentes organizaciones internacionales han vertido contra Arabia Saudí se refiere a la falta de garantías jurídicas en juicios que pueden finalizar en pena de muerte. “La acusación de estos jóvenes condenados a muerte se basa en testimonios extraídos a través de torturas. Los juicios son flagrantemente injustos y no pudieron recurrir”, apunta Escaño. 

 

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