Defensa rebaja su presupuesto un 6 por ciento y centra el ajuste en las inversiones

El Ministerio de Defensa dispondrá en 2013 de un presupuesto de 5.937 millones de euros, 379,44 millones menos que en el presente ejercicio, lo que supone un recorte del 6 por ciento, debido especialmente a la rebaja del 26 por ciento en el gasto destinado a inversiones.

Según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado presentado hoy en el Congreso por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, la política de Defensa verá reducida su financiación en un 7,7 por ciento, hasta los 5.786,01 millones, un ajuste que se concentra en los gastos operativos y las inversiones en las Fuerzas Armadas, que en conjunto disminuyen un 21 por ciento.

El 75,8 por ciento de la dotación para la política de Defensa en España financiará gastos de personal, una partida cuyo importe se sitúa en 4.387,87 millones de euros, tras un recorte del 3,1 por ciento, lo que permitirá fijar en 80.000 efectivos el número de militares profesionales de tropa y marinería en situación de servicio activo.

Las inversiones reales descenderán un 29,4 por ciento, hasta los 490,62 millones de euros, un volumen que se destinará de forma prioritaria al programa de apoyo logístico para el mantenimiento de los sistemas de armamento, mientras que el Gobierno ralentizará el desarrollo y la ejecución de los programas principales de modernización ya iniciados.

Entre los distintos programas de gasto de Defensa, el mayor recorte corresponde al capítulo de modernización de las Fuerzas Armadas, con una rebaja del 33,6 por ciento que deja esta partida en 178,65 millones de euros, si bien los programas especiales crecen un 38,1 por ciento, de 4,95 a 6,84 millones.

La dotación global para apoyo logístico desciende un 11,7 por ciento, hasta los 1.333,57 millones, y la importante partida de gastos operativos en las Fuerzas Armadas se reduce un 5,4 por ciento, al pasar de 2.289,06 a 2.165,01 millones.

El proyecto de Presupuestos para 2013 fija en 1.160,31 millones de euros la dotación destinada al programa de gasto para la administración y los servicios generales de Defensa, que disminuye un 5,3 por ciento, y reduce la financiación de la formación del personal de las Fuerzas Armadas un 7,6 por ciento, hasta los 387,21 millones.