El INE confirma que España creó 433.000 empleos en 2014
Lo adelantaban los registros mensuales de paro y afiliación a la Seguridad Social, y lo adelantó también ayer el presidente del Gobierno en el Congreso: el balance del mercado laboral en 2014 muestra que por primera vez se ha creado empleo neto en un año desde que comenzó la crisis.
El año pasado, el paro bajó en 477.900 personas y el empleo creció en 433.900, según la Encuesta de Población Activa publicada por el Instituto Nacional de Estadística. No obstante, tanto el número absoluto de desempleados como la tasa de paro siguen en niveles muy altos: 5.457.700 personas continúan en paro y la tasa se sitúa en el 23,7%.
Se trata de cifras superiores a las que el mercado laboral registraba hace tres años, cuando Rajoy llegó a La Moncloa. Y muy superiores a las del inicio de la crisis. Hoy hay algo más de tres millones de ocupados menos que en el último trimestre de 2007: entonces, había 20.717.900 personas con empleo, frente a las 17.569.100 que la estadística marca hoy. A finales de 2007 había 1.942.000 parados y siete años después, 5.457.700, es decir, tres millones y medio de desempleados más.
El balance anual de 2014 se produce a pesar de que el cuarto trimestre del año fue gris para el mercado de trabajo. En los últimos meses del año, el número de ocupados aumentó en 65.100 personas respecto al trimestre anterior, pero los parados crecieron en 30.100. La población activa aumentó en la recta final de 2014: el mercado laboral ganó 95.200 activos.
Sin embargo, esta ganancia de activos que se produjo en el último trimestre no sirvió para compensar la caída que España llevaba meses arrastrando. En el último año, el saldo de población activa sigue siendo negativo: 2014 acabó con 44.000 personas activas menos que en 2013.
La estadística confirma el auge del empleo temporal, a tiempo parcial y del autoempleo. En 2014, el crecimiento de temporales e indefinidos fue similar en términos absolutos: el empleo estable creció en 212.800 personas y el eventual lo hizo en 176.900. En términos relativos, se observa que el incremento de los temporales fue del 5,3%, más del doble de lo que subieron los indefinidos, un 1,9%.
Los trabajadores por cuenta propia han aumentado en 43.400 personas y más del 90% son autónomos sin otros trabajadores a cargo o profesionales independientes, lo que reafirma la tendencia al autoempleo como forma de mantenerse en el mercado laboral.
Contratos por horas
Aumentan prácticamente todos los contratos temporales respecto a hace un año, especialmente los que tienen una duración de entre cuatro y seis meses (en 48.000 personas) y de entre uno y dos años (28.000 más). Pero también crecen las personas que tienen contratos de solo un día (ahora son 4.000 más que hace un año), de entre dos días y un mes (12.000 más) y de entre uno y tres meses (8.000 más).
En términos relativos, la jornada a tiempo parcial crece prácticamente al mismo ritmo que lo que lo hace la jornada completa. En 2014 se crearon 367.400 puestos de trabajo a tiempo completo –un 2,5% más que un año antes–, y 66.500 empleos a tiempo parcial –un 2,4% más–.
Los detalles de la estadística muestran también el número de horas efectivas que trabaja cada persona en su puesto. En el último año, han crecido los trabajadores con jornadas de entre 40 y 49 horas (medio millón más de personas), pero también los que llevan a cabo jornadas de entre una y nueve horas (en 3.000 personas), entre 10 y 19 horas (10.000 más), y entre 20 y 29 horas (unos 50.000 trabajadores).
Hogares con todos en paro
Los hogares con todos sus miembros en paro se han reducido en 23.100 en el último trimestre del año y en 159.600 durante 2014. La otra cara de la moneda: los hogares donde todos los activos están trabajando han crecido en 37.000 en el último periodo de 2014 y en 422.600 en todo el año.
Ha sido el sector servicios el que ha tirado de la economía. Es el sector que ha registrado el grueso del aumento del empleo (344.200 de los 433.900 puestos de trabajo creados en 2014) y del descenso del paro (172.800 parados menos). Por el contrario, la agricultura fue el sector que peor se comportó el año pasado: es el único en el que subió el paro (en 24.200 personas) y que destruyó empleo (48.400 puestos de trabajo menos).