Bosch lanza la primera alerta
Bosch, el fabricante del software con el que Volkswagen falseó las emisiones de sus vehículos, advirtió a Volkswagen en 2007 que usar este dispositivo con los vehículos en marcha por carretera era ilegal.
Un empleado avisó al consejo de supervisión de que se estaba usando un dispositivo en los vehículos que suponía una "violación de la ley", según publica el diario alemán Frankfurter Allgemeine am Sonntag
La Comisión Europea elaboró un informe que llevaba el sello del Joint Research Centre –un centro de investigación del organismo- donde se analizaban mediante test de carretera 12 vehículos diesel que superaban claramente los niveles de óxido de nitrógeno permitidos por la legislación comunitaria.
El informe de 2013 es más duro y ya se refiere a la manipulación pura y dura de los fabricantes, que recurrirían a “artefactos prohibidos” tales como el software que acopló Volkswagen a millones de coches para esconder las emisiones. La UE prohíbe tajantemente desde 2007 el uso de cualquier aparato.
El estudio realizado por el ICCT buscaba investigar las diferencias entre las emisiones de los vehículos diesel en EEUU y en Europa. Para este estudio, se realizaron pruebas de emisiones en carretera sobre tres vehículos (dos Volkswagen y un BMW) en colaboración con la universidad de West Virginia.
La agencia continuó realizando investigando vehículos. El 8 de julio compartió sus resultados con la empresa: estaban seguros de que los coches emitían más dióxido de nitrógeno de lo permitido en California. La compañía siguió aduciendo razones técnicas para tratar de justificar el problema.
Tras no funcionar la solución de la revisión, la agencia medioambiental estadounidense acusa al fabricante de haber instalado un software diseñado para evitar los límites a las emisiones de forma fraudulenta en 482.000 vehículos de Estados Unidos.
La compañía sufre los efectos del escándalo en Bolsa y se desploma un 18,6%. Al día siguiente la compañía volvió a caer y perdió un 19,82%.
El fabricante de coches alemán admite haber instalado en los vehículos diésel de Estados Unidos el software que permitía saltarse los controles de emisiones cuando el coche estaba siendo sometido a las pruebas de control.
La filial española del grupo reconoce haber montado los motores trucados -el modelo EA 189- en España. La compañía rehúsa dar cifras del número de vehículos vendidos con este motor que incorporaba un software trucado capaz de detectar cuando se le estaba haciendo pruebas al coche
El grupo automovilístico alemán Volkswagen informa de que cinco millones de vehículos de su marca principal Volkswagen están afectados en todo el mundo por la manipulación de cifras de emisiones contaminantes. Todos los Golf VI, los Passat de séptima generación y la primera serie de Tiguan tienen el motor trucado.
Esta es la fecha tope que ha dado el Gobierno alemán a la compañía para que la empresa envíe un calendario de actuación con un plan detallado de acciones.
La empresa tiene previsto celebrar una Junta Extraordinaria de Accionistas en esta fecha.