La subasta de las renovables puede ralentizar la instalación de 4.000 megavatios de fotovoltaica
Actualmente hay en Extremadura proyectos fotovoltaicos en distintas fases de tramitación, con una potencia por encima de los 4.000 megavatios. Pero el reparto de la puja del próximo 26 de julio puede ralentizar su construcción.
De nuevo las reglas marcadas en la subasta de las renovables beneficiarán a las fuentes eólicas frente a la energía solar, donde Extremadura mantiene todos sus intereses.
Con una subasta favorable a la comunidad, parte de esos 4.000 proyectados entrarían en funcionamiento de inmediato. La Junta confirma que algunos de los proyectos que quieren venir a Extremadura se van a presentar a la puja.
Una vez hecho el reparto de la subasta, las iniciativas empresariales seleccionadas adquieren el compromiso de desarrollarse antes de diciembre de 2019, lo que supone un pasaporte seguro a corto plazo.
“Es la energía del futuro”
El desarrollo de la energía fotovoltaica en la comunidad es 'imparable'. Se trata de una energía competitiva que tiene vida 'más allá de la subasta', comenta el consejero de Economía, José Luis Navarro.
Los costes de instalación y generación de energía solar se han abaratado, hasta el punto de que los bancos están dispuestos a financiar proyectos sin necesidad de que formen parte del paquete de kilovatios de la subasta.
Sin subasta los proyectos llegarían, pero más tarde. “¿Por qué estamos peleando tanto para que las reglas de la subasta fueran iguales para fotovoltaica y eólica? Porque todo lo que sea adelantar un año la inversión es adelantar un año el empleo. Ese es nuestro objetivo”, explica Navarro.
El desembarco de la fotovoltaica es sinónimo de riqueza. Navarro calcula que cada megavatio cuenta con una inversión de un millón de euros. De modo que un proyecto de 500 megavatios trae consigo 500 millones.
“En una planta de 300 megavatios mientras se construye, hay varios cientos de personas trabajando durante uno o dos años. Eso son cientos de personas que encuentran un trabajo”.
¿Cómo funciona la subasta?
Los promotores no presentan emplazamiento de proyectos concretos, lo que presentan es un compromiso de desarrollar en el horizonte de 2019. Seis meses después de que se les adjudique tienen que concretar al Ministerio de Energía dónde construirían esas plantas. “Lo que pasa es que nosotros si sabemos que son promotores de fotovoltaica, que en su cartera de proyectos incluyen proyectos extremeños”.
El día 26, cuando se conceda la subasta, tampoco se sabrá con seguridad cuántos proyectos vendrán finalmente a la comunidad. Solo se conocerá qué porcentaje de energía eólica ha sido adjudicado, y cuánto a la fotovoltaica. Habrá que esperar todavía unos meses para concretar con precisión cuánto se construirá en Extremadura.
Las reglas de la subasta son idénticas a las del pasado mes de mayo, aunque se ha introducido una cláusula que contempla la posibilidad de ampliar la potencia total prevista de 3.000 megavatios. Y ahí es donde Extremadura mantiene todas sus esperanzas. El objetivo, destaca el responsable de Economía, es que tengan alguna oportunidad.
Autoconsumo
Por otro lado el consejero ha hecho un llamamiento al Gobierno de España, y concretamente al ministro de Energía, para que anime a los propietarios de viviendas a invertir en instalaciones de autoconsumo de energía. “Este es el mensaje que nuestro máximo responsable en materia energética tendría que estar lanzando”.
Critica los efectos de la moratoria total que llevó a cabo el Gobierno en el año 2012, que ha supuesto “cinco años y medio perdidos”. A ello suma que el autoconsumo esté paralizado por falta de impulso político, y que la normativa “es provisional”. La consecuencia --comenta-- es una situación de “inseguridad” que “desanima a los inversores, tanto a las familias como a las pymes”.
Navarro se ha mostrado convencido de que si hubiera una normativa “que transmitiera a las empresas que quieren invertir seguridad jurídica en el corto y medio plazo hoy se estarían construyendo muchísimas plantas de energías renovables en España”.